La Comunidad Econ¨®mica Europea fracasa de nuevo en el intento de encontrar una soluci¨®n a su grave crisis estructural

Los ministros de Asuntos Exteriores de los diez pa¨ªses miembros e la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE) fracasaron ayer una vez m¨¢s en su intento de encontrar una soluci¨®n a la grave crisis estructural que atraviesa la comunidad. Despu¨¦s de m¨¢s de veinte horas de discusiones, los ministros, reunidos en Bruselas, tuvieron que levantarse de la mesa sin haber logrado un acuerdo sobre la aportaci¨®n brit¨¢nica al presupuesto comunitario, que sigue constituyendo, desde hace casi tres a?os, el "problema clave" y grave de la CEE.

El ministro brit¨¢nico, lord Carington, mantuvo una actitud dura, pero no inflexible como hasta ahora, motivo por el cual, al vez, la presidencia belga, dispuesta a lograr un acuerdo, aunque sea "por agotamiento", ha decidido convocar una nueva reuni¨®n para el pr¨®ximo d¨ªa 25.La actitud del Reino Unido sigue siendo, pese a todo, dif¨ªcilmente conciliable con la de Francia y con la de la Rep¨²blica Federal de Alemania. El Reino Unido quiere una reducci¨®n "para siempre" de su aportaci¨®n al presupuesto de la CEE y est¨¢ dispuesto a emplear todos los medios a su alcance, incluido el bloqueo de los nuevos precios agr¨ªcolas que deben ser fijados antes del 1 de abril pr¨®ximo.

Sus compa?eros se declararon disponibles a llegar a "un arreglo" de cinco a?os de duraci¨®n, pero Londres se neg¨® a aceptarlo si no inclu¨ªa una cl¨¢usula afirmando que, finalizado ese per¨ªodo, se volver¨ªa a revisar su situaci¨®n financiera. Los brit¨¢nicos no parecen tampoco dispuestos a aceptar que Ias medidas especiales" que regir¨ªan durante esos cinco a?os sean "regresivas", es decir, que la CEE le devolviera cada a?o un poco menos de su dinero.

La producci¨®n lechera

"No hemos podido ponernos de acuerdo sobre estos dos puntos y tampoco sobre c¨®mo controlar la producci¨®n lechera (que es aproximadamente un 20% superior al consumo europeo), sin por ello perjudicar a los peque?os ganaderos", explic¨® el ministro belga, Leo Tindemans, presidente de turno del Consejo. "Creo, sin embargo, que hemos hecho un buen trabajo", a?adi¨®.

Lord Carington, por su parte, resalt¨® el "buen clima" de la reuni¨®n, pero explic¨® que la oferta "comunitaria" era insuficiente: "?Qu¨¦ haremos dentro de cinco a?os? Es evidente que el problema de fondo seguir¨¢ estando ah¨ª", explic¨®. El hecho de que sean los ministros de Asuntos Exteriores, jefes de la diplomacia de cada pa¨ªs, y no los de Finanzas o los de Agricultura quienes est¨¢n encargados de solucionar la crisis de la CEE demuestra que el problema b¨¢sico al que se enfrentan los diez es esencialmente pol¨ªtico. La crisis comunitaria, aunque se traduzca en una discusi¨®n sobre la cantidad de millones de libras que debe "recuperar" cada a?o Londres o en el impuesto que deben pagar los ganaderos que aumenten inconsideradamente su producci¨®n, tiene un reflejo de mayor alcance. Adem¨¢s, las continuas peleas intracomunitarias se producen en un momento en el que la situaci¨®n internacional aconseja m¨¢s que nunca un "frente unido" en Europa occidental, sin el que es dificil "defenderse" de los terceros (Estados Unidos acaba de abrir la guerra del acero" y Jap¨®n sigue invadiendo el mercado europeo con sus productos).La lentitud desesperante con la que se producen m¨ªnimos avances perjudica, adem¨¢s, la negociaci¨®n para la ampliaci¨®n de la Comunidad Econ¨®mica Europea, es decir, la adhesi¨®n de Espa?a y de Portugal. Repetidamente, el ministro franc¨¦s ha hecho saber que mientras que no se "despeje" la situaci¨®n y sepan a qu¨¦ atenerse en cuanto a los productos mediterr¨¢neos (otro de os elementos a discutir el pr¨®ximo d¨ªa 25) y a la reforma de la pol¨ªtica agr¨ªcola com¨²n, ser¨¢ imposible dar luz verde a las negociaciones.

ministros CIC Asuntos Exteriores con sus problemas internos que no han discutido pr¨¢cticamente ni de la crisis polaca ni de la situaci¨®n en Turqu¨ªa. S¨®lo en el breve descanso para almorzar, los diez volvieron a expresar su voluntad de acudir personalmente a Madrid -o enviar a sus secretarios de Estado- el pr¨®ximo d¨ªa 9 de febrero con ocasi¨®n de la reapertura de la Conferencia sobre Seguridad y Cooperaci¨®n en Europa.