Buena acogida en el Reino Unido al intercambio de embajadores con el Vaticano

La decisi¨®n de intercambiar embajadores entre el Vaticano y el Reino Unido, anunciada el pasado s¨¢bado por el Papa, llega 450 a?os despu¨¦s de la ruptura entre el rey Enrique VIII de Inglaterra y el papa Clemente VII. El hist¨®rico paso ha sido bien, pero no un¨¢nimente, recibido por los brit¨¢nicos.La cuesti¨®n de Irlanda del Norte plantea algunos problemas y existe a¨²n un cierto resentimiento ante la postura de la Iglesia cat¨®lica, que sigue considerando como irregulares a las ¨®rdenes anglicanas.

El anuncio de la decisi¨®n se produce cuatro meses antes de la visita de Juan Pablo II a Inglaterra, Escocia y Gales, anunciada para mayo. Oficialmente, la visita del Papa a finales de mayo ser¨¢ una visita pastoral a la comunidad cat¨®lica romana brit¨¢nica, pero el Foreign Office la considera tambi¨¦n como una visita privada de un jefe de Estado al que recibir¨¢ con todos los honores.

El Foreign Office ha indicado claramente que el establecimiento de plenas relaciones diplom¨¢ticas no tiene consecuencias eclesi¨¢sticas. El s¨¢bado, un portavoz del nuncio del Vaticano en Dubl¨ªn se apresur¨® a decir que monse?or Gaetano Gallibrandi seguir¨ªa siendo el representante del Papa para toda Irlanda, que forma una unidad eclesi¨¢stica cat¨®lica encabezada por el cardenal Thomas O'Fiaich.

Las plenas relaciones diplom¨¢ticas suponen un reconocimiento por el Vaticano de la soberan¨ªa brit¨¢nica, invalidando as¨ª la bula contra la ley de sucesi¨®n a la Corona brit¨¢nica en 1701.

La Santa Sede no hace, pues, ninguna reserva sobre Irlanda del Norte. Los medios oficiales brit¨¢nicos insisten en que, en el Ulster, el nuncio de Dubl¨ªn s¨®lo tendr¨¢ jurisdicci¨®n para asuntos eclesi¨¢sticos.

Las cuestiones diplom¨¢ticas y pol¨ªticas ser¨¢n tratadas por la nueva nunciatura en Londres, que ocupar¨¢ monse?or Bruno Heim, hasta ahora cabeza de la delegaci¨®n apost¨®lica en la capital brit¨¢nica que se cre¨® en 1938.

Desde 1914, el Gobierno brit¨¢nico ha tenido un ministro plenipotenciario ante la Santa Sede. En la actualidad, se trataba de sir Mark Heath, el m¨¢s firme candidato para la embajada en el Vaticano.

Queri¨¦ndose divorciar de Catalina de Arag¨®n para casarse con Ana Bolena, el rey Enrique VII rompi¨® con el Vaticano y se proclam¨® en 1532 cabeza de la Iglesia de Inglaterra. Las relaciones entre el Reino Unido y la Santa Sede recobrar¨¢n ahora una cierta normalidad.

En la actualidad hay unos cinco millones de cat¨®licos -incluidos los ni?os- en el Reino Unido. En la poblaci¨®n protestante se dan a¨²n sentimientos antipapistas.