Un cl¨¢sico
Con la reposici¨®n de El barberillo de Lavapi¨¦s, el Teatro de la Zarzuela rinde homenaje a Barbieri, figura clave de nuestra historia musical en el campo de la creaci¨®n, la investigaci¨®n y la difusi¨®n. En el teatro, mientras empezaba a debatirse el problema de la ¨®pera espa?ola, Barbieri cogi¨® el toro por los cuernos y nacionaliz¨® la zarzuela hasta convertirla en un g¨¦nero hondamente castizo.Predomina, como es natural, en estampas hist¨®ricas como El barberillo o Pan y toros: el folklore ciudadano de origen tonadillero: seguidillas, pasacalles, tiranas, caleseras y todo est¨¢ tratado con tal gracia y sencilla maestr¨ªa que, despu¨¦s de m¨¢s de un siglo, conserva con la ingenuidad del libreto de Luis Mariano de Larra- su m¨¢s vivo frescor.
El barberillo de Lavapi¨¦s, de Luis M
de Larra y F. A. Barbieri Direcci¨®n musical: Moreno Buend¨ªa Direccion esc¨¦nica: Luis Balaguer. Int¨¦rpretes: J. Meneses, A. Gonz¨¢lez, R. Andr¨¦s, M. Cruz D¨ªaz, R. Jim¨¦nez, J. Castej¨®n, A. Ramallo, R. Castej¨®n y otros. Primeros bailarines: Isabel Quintero y Mart¨ªn Vargas Teatro de la Zarzuela. 21 de enero
Ante esa ingenuidad, producto en gran parte de la distancia que nos separa de gustos, sentimientos y modos de comportamiento art¨ªstico y coloquial, Luis Balaguer ha optado por darle a la representaci¨®n de la zarzuela un aire de farsa con toques m¨ªmicos. Se salva as¨ª el peligro de un cierto acartonamiento, que habr¨ªa sido m¨¢s evidente ante el garbo intacto de los pentagramas. En realidad, se ha logrado una suerte de larga tonadilla, ambientada en unos escenarios de Pablo Gago verdaderamente felices en su combinaci¨®n de tradici¨®n y modernidad, que se sirven del esquematismo y del collage en grados muy dosificados.
En general, la parte musical y coreogr¨¢fica estuvo bien servida, tanto por la justa comicidad, el buen hacer y entonar de Jes¨²s Castej¨®n en Lamparilla, ese f¨ªgaro madrile?o, suburbano y conspirador, como por el lirismo y el elegante acento popular de Josefina Meneses, excelente Paloma. Otro tanto, en sus distintos papeles, podr¨ªa decirse de Ascensi¨®n Gonz¨¢lez y Ricardo Jim¨¦nez, que debe trabajar mucho sus hoy bastante in¨¦ditas posibilidades de actor.
Coros, ballets y orquesta funcionaron bien gracias a la competencia de Perera, Lorca y Moreno Buend¨ªa, cuya direccion musical precisa de un poco de picante, justamente el que poseen, por s¨ª mismos, los pentagramas de Asenjo Barbieri. Exito grande y ocasi¨®n de conocer o recordar un cap¨ªtulo de nuestra zarzuela que, hasta los no entusiastas del g¨¦nero, como Falla (aunque con frecuencia se afirme lo contrario), salvaron siempre. "Pan y toros y El barberillo de Lavapi¨¦s", escribe D. Manuel en su ensayo sobre Pedrell, evocan los caracteres r¨ªtmicos y mel¨®dicos de la canci¨®n y de la danza espa?ola a finales del XVIII y principios del XIX. Estas obras han ejercido, sin duda alguna, una gran influencia sobre los composi tores espa?oles, dando a nuestra m¨²sica, desde la mitad del siglo pasado hasta las obras de Alb¨¦niz y Granados, una fisonom¨ªa que las distingue de todas las otras".
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.