El Consejo de Administracion de Iberduero ratific¨® el acuerdo de principio con el Ministerio de Industria sobre Lem¨®niz
El consejo de administraci¨®n de Iberduero, reunido en la ma?ana de ayer, ratific¨® r¨¢pidamente el acuerdo de principio a que llegaron el viernes el presidente de la empresa el¨¦ctrica, Manuel G¨®mez de Pablos, y el ministro de Industria y Energ¨ªa, Ignacio Bay¨®n. Se desconocen las bases de ese principio de acuerdo, que ser¨¢ profundizado el pr¨®ximo mi¨¦rcoles en una nueva negociaci¨®n entre Industria e Iberduero. Por otra parte, Javier Garc¨ªa Egotxeaga, consejero de Industria del Gobierno vasco manifest¨® a EL PAIS que "me consta que el Ministerio de Industria e Iberduero no han llegado a ning¨²n acuerdo", al tiempo que otras fuentes del Gobierno de Vitoria expresaron su sorpresa ante el anuncio de un acuerdo de principio por cuanto "en esa primera fase, las conversaciones sobre Lem¨®niz se est¨¢n llevando exclusivamente de Gobierno a Gobierno".
El consejo de administraci¨®n de Iberduero ratific¨® ayer, en una reuni¨®n que ha sido calificada de tr¨¢mite, el acuerdo de principio entre Ignacio Bay¨®n y G¨®mez de Pablos, en torno a la central nuclear de Lem¨®niz. Seg¨²n la empresa el¨¦ctrica, el efecto m¨¢s pr¨¢ctico de este acuerdo es la demora por parte de Iberduero de tomar una decisi¨®n final sobre la central, que podr¨ªa pasar por la suspensi¨®n de las obras de construcci¨®n. Esta demora queda pendiente de la nueva reuni¨®n que tendr¨¢n en Madrid, el pr¨®ximo mi¨¦rcoles, el ministro de Industria y el presidente de la entidad, informa desde Bilbao Tonia Etxarri.
Desde hace diez d¨ªas aproximadamente se ven¨ªa hablando de la posibilidad de que Iberduero suspendiese los contratos con ocho empresas que realizaban actualmente obras en la central nuclear. Incluso la Guardia Civil ten¨ªa preparado un plan para, desde medianoche del viernes, montar un dispositivo especial de vigilancia en Lem¨®niz para impedir el acceso a la obra, seg¨²n Efe.
Dos reuniones distintas
El viernes fue el d¨ªa clave para relanzar las negociaciones sobre Lem¨®niz. El Ministerio de Industria y Energ¨ªa fue el centro de reuni¨®n de las partes implicadas, que se entrevistaron bilateralmente por separado. A primera hora de la tarde hubo una reuni¨®n entre Ignacio Bay¨®n, Luis Maga?a (comisario de la Energ¨ªa) y Javier Garc¨ªa Egotxeaga (consejero de Industria del Gobierno vasco). Cuando ¨¦sta termin¨®, despacharon Bay¨®n y Garc¨ªa Egotxeaga.
La primera reuni¨®n ha sido calificada de "exploratoria y de car¨¢cter t¨¦cnico acerca de las posibles f¨®rmulas de control p¨²blico de la central nuclear de Lem¨®niz", por Garc¨ªa Egotxeaga, que, a su vez, expres¨® su perplejidad sobre los posibles resultados de la segunda reuni¨®n, en el sentido de que se habr¨ªan concretado acuerdos entre Iberduero e Industria. "Las conversaciones de car¨¢cter t¨¦cnico sobre Lem¨®niz se iniciaron el pasado viernes, en virtud de las indicaciones del presidente Calvo Sotelo y del lendakari Carlos Garaikoetxea, tras su ¨²ltima entrevista mantenida en Madrid el pasado d¨ªa 4 de febrero", indic¨® Egotxeaga, que termin¨® diciendo que "en una primera fase las conversaciones sobre este tema deben ser de Gobierno a Gobierno, y s¨®lo en una segunda ronda las dos Admin¨ªstraciones convocar¨ªan a la sociedad afectada".
Otras fuentes del Gobierno vasco declararon a este peri¨®dico que "todos los rumores acerca de la paralizaci¨®n de las obras de Lem¨®niz, los hemos conocido por la Prensa, y en ning¨²n momento por alg¨²n portavoz de la empresa el¨¦ctrica. Adem¨¢s, para paralizar las obras, Iberduero hubiera debido pedir permiso previamente a la autoridad laboral de la comunidad aut¨®noma (la Consejer¨ªa de Trabajo, cuyo titular es Mario Fern¨¢ndez)". Para dichas fuentes, la posible paralizaci¨®n no es mas que una "maniobra de distracci¨®n, una cortina de humo" de Iberduero para "descargar la parte de responsabilidad que le corresponde en el problema de Lem¨®niz".
Es de recordar a este respecto que, en el pasado mes de diciembre, Iberduero hizo p¨²blica una nota en la que dec¨ªa que "ve¨ªa con grave preocupaci¨®n que, debido a planteamientos pol¨ªticos, se pueda prolongar una situaci¨®n que est¨¢ llegando a seir insostenible" y que "se reservaba el derecho de adoptar las medidas que mejor defiendan los intereses de sus trabajadores y accionistas".
Sensibilizaci¨®n popular
Garc¨ªa Egotxeaga respondi¨® entonces aludiendo a las ilegalidades cometidas en la primera fase de las obras y la ubicaci¨®n de Lem¨®niz a pocos kil¨®metros del Gran Bilbao, donde habita un mill¨®n de personas. Seg¨²n el consejero, estos eran los "condicionantes objetivos" que determinaban la "enorme sensibilizaci¨®n popular ante el tema" y otorgaban "dimensi¨®n p¨²blica pol¨ªtica" a la cuesti¨®n.
Tras la reuni¨®n con Bay¨®n, G¨®mez de Pablos se traslad¨® a Bilbao, donde ayer s¨¢bado inform¨® a diversos estamentos de su empresa sobre el principio de acuerdo llegado. Concretamente inform¨® al consejo de administraci¨®n, a las centrales sindicales y a las empresas contratistas, as¨ª como a todos los altos cargos y delegados de Iberduero en Espa?a.
Aunque ayer no se llegaron a perfilar los detalles del posible acuerdo de principio -reflejado, seg¨²n pudo conocer EL PAIS en una carta de Ignacio Bay¨®n, que contesta a otra de G¨®mez de Pablos-, portavoces autorizados de Iberduero declararon que "si no se hubiera concretado el acuerdo de principio entre las dos partes, el consejo de administraci¨®n hubiera decidido la suspensi¨®n de contratos civiles que operan en la obra", lo que hubiera implicado una interrupci¨®n temporal de la actividad laboral en Lem¨®niz.
Razones de "incertidumbre, presiones sociales, intimidaci¨®n permanente", los 35.000 millones de pesetas de inversi¨®n anual, y la consiguiente p¨¦rdida econ¨®mica -teniendo en cuenta la pr¨¢ctica paralizaci¨®n de la actividad laboral de las obras- y los 3.000 millones de pesetas que han supuesto los da?os directos provocados por los atentados contra las subestaciones y que han afectado directamente al suministro de energ¨ªa el¨¦ctrica, son los argumentos que presenta Iberduero para justificar las tentaciones que tuvo de provocar la suspensi¨®n total de los contratos civiles.
No se descarta que en los primeros d¨ªas de la pr¨®xima semana, el Gobierno vasco valore de modo oficial lo que para algunos de sus representantes supone "una injerencia de Iberduero en las negociaciones que hemos iniciado con el Gobierno central".
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