Sue?os de gloria

H¨¦ctor Malamud es un c¨®mico solitario, con una vena de humor jud¨ªo -el que transcurre desde Chaplin a Woody Allen, pasando por Groucho Marx y sus hermanos- y la destreza de la escuela argentina. Su espect¨¢culo se llama La gente me ama y est¨¢ relacionado con la vieja ilusi¨®n del cine, al que otro gran jud¨ªo -Ilya Ehremburg- llam¨® "la f¨¢brica de sue?os".Malamud, dentro de esa l¨ªnea tradicional de humor, interpreta el papel de un vendedor de caramelos y chocolate en una sala de cine que sue?a con ser el h¨¦roe de la pantalla, y todo lo que ello finalmente significa: dinero, mujeres, popularidad y, sobre todo, amor: el amor de todos. Apenas habla: es, sobre todo, un mimo, con m¨²sica de fondo -m¨²sica, inevitablemente, de grandes pel¨ªculas- y algunas palabras, generalmente en ingl¨¦s, en un ingl¨¦s tan b¨¢sico como para ser comprendido por todos.

La base de esta invenci¨®n est¨¢, naturalmente, en la parodia de los personajes con los que sue?a y de los arquetipos de pel¨ªcula m¨¢s estimulantes y populares. Al principio avanza lentamente, demasiado lentamente, por ese camino, y tarda en recolectar su p¨²blico. Finalmente lo consigue: salta al patio de butacas, de fila en fila; interpela a los espectadores, se mezcla entre ellos y llega, por fin, a hacer, efectivamente, que la gente le ame. Tal vez un poco tarde; pero los amores tard¨ªos suelen ser s¨®lidos, y el p¨²blico le aplaude con entusiasmo, despu¨¦s de haber re¨ªdo de buena gana.

H¨¦ctor Malamud se ha detenido en Madrid, sala Cadarso, en una larga gira por Europa: este espect¨¢culo lo estren¨® en el teatro Kafka de Praga, en 1976.