'Parrish', en¨¦sima pel¨ªcula norteamericana
De las ocho pel¨ªculas que, aparte telefilmes y probables largometrajes especiales de la serie Estrenos TV, se emiten esta semana en las dos cadenas de televisi¨®n, una es espa?ola, dos inglesas y cinco norteamericanas. No es una semana excepcional, sino todo lo contrario. La norma es esa y tal vez en otras semanas el porcentaje es aun mayor para el excesivo trato de favor que recibe el cine norteamericano en TVE.No es aberrante que el cine de Hollywood domine en las programaciones de la televisi¨®n. Ocurre en todos los pa¨ªses occidentales y las causas son hasta cierto punto razonables. La principal hay que buscarla en las enormes listas de filmes con audiencia segura que el cine norteamericano tiene almacenados.
Pero esto, que ser¨ªa irrebatible en una emisora de televisi¨®n privada, no lo es en una televisi¨®n estatal, que ha de jugar obligatoriamente a varias bandas y con los ojos puestos no s¨®lo en la ley de la ganancia. Misiones de una televisi¨®n como la nuestra deber¨ªan ser tambi¨¦n las culturales y pedag¨®gicas, y aqu¨ª es donde falla el olfato programador de quienes corresponda.
La desatenci¨®n al cine europeo y, en concreto, al espa?ol son en TVE bastante desalentadores. El mal viene de atr¨¢s y no reside tanto en ese desequilibrio en favor del cine norteamericano, hasta cierto punto inevitable, sino en su proporci¨®n. Es una cuesti¨®n de medida. Hay semanas, en especial las ¨²ltimas, en que TVE parece una abrumadora sucursal de las distribuidoras cinematogr¨¢ficas multinaciones, y no hace falta decir que estas son tales multinacionales s¨®lo en su campo de operaciones, y no en su origen, que es estrictamente nacional, los Estados Unidos.
La pel¨ªcula de esta noche, Parrish, es un melodrama sin coartadas, eficaz, realizado por un director muy solvente siempre y en ocasiones magn¨ªfico, Delmer Daves, autor de tres buenos filmes del Oeste -Flecha rota, El tren de las tres y diez, El ¨¢rbol del ahorcado- y algunos relatos polic¨ªacos de calidad, como Dark Passage. Inclinado a los g¨¦neros, su facilidad para el melodrama coincide con cierto declinar de su carrera, que tuvo sus momentos m¨¢s altos en los a?os cincuenta. Parrish es de 1961 y sirvi¨® de lanzamiento para el actor Troy Donahue, cuya carrera posterior no fue lo afortunada que se previ¨® tras el ¨¦xito conseguido por este filme, un tanto convencional, pero en la l¨ªnea de los melos posteriores al maestro Douglas Sirk.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.