Las elecciones cantonales que se celebran hoy en Francia, primer 'examen' de la gesti¨®n socialista
Las elecciones cantonales que se celebrar¨¢n este domingo y el pr¨®ximo en Francia han adquirido un matiz m¨¢s pol¨ªtico a¨²n durante las ¨²ltimas horas como consecuencia de la denuncia del l¨ªder neogaullista, Jacques Chirac, contra el ministro del Interior, Gaston Defferre, por considerar que este ¨²ltimo le ha difamado.
El resultado del escrutinio es incierto, pero, en todo caso, no afectar¨¢ las instancias parlamentaria y gubernamental, aunque constituye el primer examen de la gesti¨®n socialista por los franceses.Veinte millones de electores galos est¨¢n convocados para votar en estas elecciones. Desde que, el pasado verano, los socialistas consiguieron el poder con su victoria aplastante en las elecciones presidenciales y legislativas no se hab¨ªa celebrado ninguna consulta de esta amplitud.
Los resultados no van a modificar la composici¨®n del poder, tal como la establecieron los comicios que les dieron a los socialistas la presidencia de la Rep¨²blica y la mayor¨ªa absoluta en la Asamblea Nacional.
Pero el que m¨¢s de la mitad del cuerpo electoral tenga la ocasi¨®n de pronunciarse, aunque sea a nivel local, constituye un ¨ªndice significativo para el nuevo poder en v¨ªsperas del primer aniversario de su gesti¨®n, sustanciada ya por todas las reformas importantes del septenio del presidente Fran?ois Mitterrand.
Esto explica el inter¨¦s espec¨ªficamente pol¨ªtico de las cantonales. Los resultados de este primer domingo ya responder¨¢n ampliamente a las dos principales inc¨®gnitas que se plantean los franceses: el fracaso de los socialistas en las cuatro elecciones parciales del pasado mes de enero, ?fue un simple tropiezo o la revelaci¨®n de un inicio de desencanto del electorado? El baj¨®n hist¨®rico del partido comunista, en mayo del a?o pasado, ?se acentuar¨¢ ahora, como lo sospechan muchos, o recuperar¨¢ el PCF una parte de sus electores tradicionales?
Politizaci¨®n
Esta politizaci¨®n de las cantonales se ha agriado durante los ¨²ltimos d¨ªas con la explotaci¨®n que ha hecho la oposici¨®n conservadora liberal, respaldada por la Prensa que la apoya, de lo que ya se denominan los affaires de los socialistas: el suicidio de un alto cargo de la Seguridad Social, del que se culpa a la ministra de la Solidaridad, Nicole Questiaux; la rebeli¨®n de la jerarqu¨ªa policial contra el ministro del Interior, Defferre, y la grabaci¨®n publicada por la Prensa d¨ªas pasados con revelaciones molestas sobre la relaci¨®n entre los abogados socialistas y Marcel Francesci, el corso de las cajas de juego, traficante de droga, alcalde gaullista, asesinado semanas atr¨¢s.
Ajuste de cuentas
Ayer, el primer ministro, Pierre Mauroy, pero sobre todo Deferre, respondieron con las mismas armas, y la pol¨¦mica se ha convertido en un ajuste de cuentas entre los jerarcas de la mayor¨ªa gobernante y de la oposici¨®n. El ministro del Interior acus¨® a Chirac y a varios dirigentes neogaullistas de ser c¨®mplices de Francesci. El alcalde de Par¨ªs ha denunciado inmediatamente al ministro por difamaci¨®n.
La degradaci¨®n del clima pol¨ªtico en este pa¨ªs es un hecho que empieza a preocupar seriamente.
La repercusi¨®n de estas batallas, a base de insultos rec¨ªprocos, sobre las elecciones es dudosa y hace m¨¢s intrigante el resultado.
Los socialistas se muestran relativamente inquietos: "La derecha a¨²n no ha encajado la derrota de mayo. Acepta el juego democr¨¢tico, pero enrabieta, y no sabemos muy bien lo que pretende con este montaje demag¨®gico de todos esos affaires que son m¨¢s inventados que reales", afirmaba ayer un alto dirigente del partido socialista.
Hoy y el domingo pr¨®ximo se renuevan 2.014 cantones de los 3.674 de la metr¨®poli. Los electores elegir¨¢n en cada cant¨®n los llamados consejeros generales, que, a su vez, despu¨¦s designar¨¢n a los presidentes de los Consejos Generales.
De estos ¨²ltimos existen tantos como departamentos, es decir, 95 en Francia. Con los nuevos poderes que les da la ley de Descentralizaci¨®n, esos presidentes ser¨¢n una especie de alcaldes de los departamentos.
En la actualidad, la oposici¨®n conservadora es mayoritaria en el pa¨ªs, con cincuenta presidencias de consejos generales.
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