El Ej¨¦rcito franc¨¦s se adapta sin traumas al cambio pol¨ªtico
El Ej¨¦rcito franc¨¦s "ha demostrado durante los ¨²ltimos a?os que sab¨ªa adaptarse a la evoluci¨®n que ha significado en este pa¨ªs la llegada de los socialistas al poder". En estos t¨¦rminos se manifest¨®, por primera vez, el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, general Jeannou Lacaze, al d¨ªa siguiente de la supresi¨®n, por el Gobierno, de todos los tribunales militares.
Tras las secuelas de las ¨²ltimas guerras coloniales, entre la sociedad civil y el Ej¨¦rcito franc¨¦s se ha establecido una relaci¨®n de confianza que el cambio de poder del pasado mes de mayo no ha hecho m¨¢s que confirmar.Hac¨ªa muchos a?os que el n¨²mero uno de las fuerzas armadas no realizaba una declaraci¨®n p¨²blica, como ahora lo ha hecho el general Lacaze. La entrevista que ha concedido al semanario independiente L'Express se considera como un acontecimiento que valora dos hechos. En primer lugar, la desaparici¨®n de la incomprensi¨®n entre los militares y la sociedad francesa, que, al final de la guerra de Argelia, se hab¨ªa agravado hasta alcanzar cotas de rebeli¨®n por parte de algunos soldados perdidos, seg¨²n expresi¨®n acu?ada por el general Charles de Gaulle en aquellos tiempos. Y, en segundo lugar, que el cambio pol¨ªtico aportado por las elecciones presidenciales y legislativas del a?o pasado ha sido perfectamente aceptado por las fuerzas armadas.
Cuando en 1978 los socialistas y comunistas estuvieron a punto de ganar las elecciones legislativas, algunos mandos de] Ej¨¦rcito advirtieron: "Si la izquierda llega al poder, nos vamos a casa". Incluso el general Lacaze adopt¨® la f¨®rmula. Ahora, tras el triunfo de Fran?ois Mitterrand, el jefe del Estado Mayor dice que el comportamiento del, Gobierno y, m¨¢s precisamente, el del ministro del Ej¨¦rcito, Charles Hernu, no han dado motivo alguno de descontento al Ej¨¦rcito. La jerarqu¨ªa militar se ha mantenido, los nombramientos efectuados han respondido a una planificaci¨®n anterior, no ha habido politizaci¨®n del Ej¨¦rcito. "Si se hubiese producido un cambio brutal, algunos cuadros se habr¨ªan marchado a casa, y yo el primero. Pero eso no ha ocurrido".
El jefe del Ej¨¦rcito franc¨¦s, con estas palabras, no hace m¨¢s que corroborar un sentimiento general, que a veces se manifiesta en la Prensa, o en conversaciones privadas, y que subraya el mimo con el que el poder socialista ha tratado al Ej¨¦rcito desde que, hace diez meses, lleg¨® al poder.
Confianza recobrada
Por otra parte, el contencioso entre el Ej¨¦rcito y los franceses, consecuencia de las guerras coloniales, ha desaparecido. Las fuerzas armadas francesas, desde hace un par de lustros, se han hecho m¨¢s transparentes. Los altos mandos se han encargado ellos mismos de romper su aislamiento respecto a la sociedad civil, intensificando sus relaciones con esta ¨²ltima y, sobre todo, con la Prensa.El triunfo de Mitterrand y la formaci¨®n de un Gobierno con los comunistas se present¨® como una prueba ¨²ltima de su legalismo, y de su integraci¨®n en la sociedad francesa contempor¨¢nea. Todo indica que el resultado es positivo, y "que los tiempos de las sospechas y de los malentendidos han sido reemplazados por los de la confianza recobrada", seg¨²n un comentario de L'Express.
El general Lacaze, considerado como un republicano y que lleg¨® a la cima del mando supremo del Ej¨¦rcito en tiempos del ex presidente Valeiry Giscard d'Estaing, estima que "si el Ej¨¦rcito ofrece la imagen. de una comunidad conservadora es debido a que, por naturaleza, necesita agarrarse a valores de base, pisar en tierra firme".
En esta entrevista, el jefe del Estado Mayor aborda todos los problemas nacionales y estrat¨¦gicos del momento, as¨ª como la vida m¨¢s personal y la formaci¨®n de los militares. En su opini¨®n, los oficiales de antes estaban motivados por las guerras, pero hoy lo est¨¢n "por preocupaciones m¨¢s t¨¦cnicas, aunque el sentido del contacto humano, del mando y de la entrega contin¨²an siendo los mismos".
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