El fervor nacionalista se apodera de todas las capas de la sociedad argentina al margen de su credo pol¨ªtico
El fervor nacionalista se ha apoderado de los argentinos. Millares de banderas celestes y blancas engalanan las ventanas de Buenos Aires para festejar la "recuperaci¨®n" de las islas Malvinas. La reacci¨®n popular ha sido un¨¢nimemente favorable a la ocupaci¨®n por la fuerza de estas islas australes que hab¨ªan dejado de ser argentinas desde 1833. Los medios de comunicaci¨®n est¨¢n plagados de elogios a las Fuerzas Armadas y se refieren al "momento hist¨®rico que nos ha tocado vivir".
Pol¨ªticos y militares se extienden en declaraciones sobre lo justo de la reivindicaci¨®n argentina y en especulaciones sobre las riquezas ,pesqueras, minerales y petrol¨ªferas que puede encerrar este archipi¨¦lago del Atl¨¢ntico sur. "El eslogan "Las Malvinas son argentinas" que se ense?aba en los colegios es ya una realidad", se?ala un alto mando militar. Un almirante explicaba a trav¨¦s de radio Ribadavia que la paciencia, argentina ha llegado a su l¨ªmite ante la infinidad de trucos y argucias empleados por Londres para no devolver la soberan¨ªa de las islas.El presidente de la Rep¨²blica y de la Junta Militar, general Leopoldo Galtieri, dijo el viernes, ante unas diez mil personas que se hab¨ªan concentrado en la plaza de Mayo, que "hemos recuperado salvaguardando el honor nacional, sin rencores, pero con la firmeza que las circunstancias exigen, las islas australes que integran por leg¨ªtimo derecho el patrimonio nacional". Galtieri invoc¨® la protecci¨®n de "Dios y su Santa Madre" y pidi¨® el compromiso de todos los argentinos para "cumplir con nuestro deber".
Un diario de Buenos Aires contaba ayer que Galtieri se qued¨® asombrado ante los v¨ªtores y aplausos de la multitud congregada bajo su balc¨®n de la Casa Rosada y se lo coment¨® as¨ª al ministro del Interior, general Saint Jean, quien le respondi¨®: "disfr¨²telo, jefe, disfr¨²telo". Abajo, mientras tanto, la muchedumbre se divert¨ªa gritando: "uno, dos y tres, el que no salte es un ingl¨¦s".
Dos reci¨¦n nacidas, una en Corrientes y otra en Santa Fe, fueron bautizadas ayer como "malvinas argentinas" y numerosas compa?¨ªas y establecirnientos publican anuncios pagados en los peri¨®dicos para expresar su alborozo por la "recuperaci¨®n" de las islas. "Bravo, se?or presidente", reza uno de ellos. Otro dice simplemente: "Te queremos Argentina" y un tercero: "Salud al pueblo argentino.
Las invocaciones al general San Mart¨ªn, el Libertador, son constantes en art¨ªculos y discursos. La televisi¨®n emite regularmente im¨¢genes de maniobras militares y el eslogan "a vencer, Argentina". El capit¨¢n de corbeta que muri¨® en el desembarco en las Malvinas recibe ya tratamiento de h¨¦roe y fue objeto ayer de solemnes honras f¨²nebres en la ciudad de Bah¨ªa Blanca, con asistencia de los jefes de los tres Ej¨¦rcitos.
Los peri¨®dicos est¨¢n llenos de detalles sobre el desarrollo y el ¨¦xito de la operaci¨®n militar, aunque parece que algunos focos de resistencia continuaban en las islas en la madrugada del s¨¢bado y que pod¨ªan oirse disparos espor¨¢dicos en los alrededores de Port Stanley, rebautizado ahora como Puerto Rivero.
La "conquista" de las Malvinas y el consiguiente j¨²bilo popular han desviado la atenci¨®n del p¨²blico de los serios problemas sociales y pol¨ªticos del pa¨ªs.
Esa misma plaza de Mayo que era escenario el viernes de patri¨®ticas muestras de apoyo a la acci¨®n emprendida por la Junta Mil?tar, lo hab¨ªa sido tres d¨ªas antes de una manifestaci¨®n organizada. por la CGT, central sindical peronista, con el resultado de varios heridos y m¨¢s de un millar de detenidos.
La Junta Militar ha ordenado la liberaci¨®n de m¨¢s de un centenar de personas que continuaban detenidas desde los incidentes de] martes, para festejar la recuperaci¨®n de las "islas cautivas". El secretario general de la CGT, Sa¨²l Ubaldini, fue puesto tambi¨¦n en libertad, y la organizaci¨®n que dirige hizo un llamamiento a los argentinos para que festejen la restituci¨®n de las Malvinas a la soberan¨ªa nacional. Id¨¦ntica actitud tom¨® el otro sindicato, CNT-20. La lucha por los derechos sindicales y pol¨ªticos" por mejores salarios y de las condiciones de vida parece quedar apartada hasta que se resuelva la presente crisis.
A pesar de que los medios de comunicaci¨®n informan cumplidamente de que numerosas unidades navales brit¨¢nicas se dirigen hacia el Atl¨¢ntico sur, nadie parece creer seriamente aqu¨ª que vaya a producirse un enfrentamiento entre las dos marinas y se conf¨ªa en que la crisis se desviar¨¢ hacia, canales diplom¨¢ticos, pero con la diferencia de que la situaci¨®n "de facto" favorece ahora a Argentina.
En Buenos Aires se piensa que la crisis de las Malvinas se resolver¨¢ del mismo modo que la de Goa, en 1961, cuando la India ocup¨® esa colonia portuguesa y, tras un est¨¦ril debate en la ONU, consolid¨® su soberan¨ªa.
sin Los rumores sobre la presencia de un submarino brit¨¢nico en el R¨ªo de la Plata, frente a Buenos Aires, fueron desmentidos por autoridades de la Marina, que: explicaron que dada la escasa Profundidad de estas aguas un sumergible tendr¨ªa que estar a m¨¢s de seiscientas millas n¨¢uticas de la costa para no ser detectado por los helic¨®pteros antisubmarinos.
La batalla inmediata se plantea en el campo diplom¨¢tico y en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. El ministro de Asuntos Exteriores argentino, Costa M¨¦ndez, lleg¨® ayer a Nueva York para participar en el debate. Los peri¨®dicos de Buenos Aires resaltan el apoyo de los pa¨ªses latinoamericanos y la declaraci¨®n del Gobierno espa?ol que, aunque condena el uso de la fuerza, reconoce la reivindicaci¨®n argentina. "Espa?a y Portugal, las madres de Am¨¦rica latina, son por ahora nuestro ¨²nico apoyo diplom¨¢tico en Europa", dec¨ªa ayer un analista pol¨ªtico.
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