Tensi¨®n en Roma ante el proceso contra los secuestradores de Moro
A pesar de las excepcionales medidas de seguridad establecidas por las autoridades italianas, era perceptible ayer en Roma una clara tensi¨®n ante el comienzo del proceso contra los secuestradores de Aldo Moro, el presidente de la Democracia Cristiana (DC) capturado y luego asesinado por las Brigadas Rojas en 1979.Las Brigadas Rojas, silenciosas tras la liberaci¨®n del general norteamericano James L. Dozier, que supuso la detenci¨®n de unos doscientos miembros de esta organizaci¨®n terrorista, han reanudado su actividad de una manera sangrienta.
El lunes al mediod¨ªa, un comando terrorista compuesto por unas diez personas atac¨® un autocar del cuerpo de carabineros que patrullaba por una de las calles que rodean el gimnasio del Foro It¨¢lico, donde hoy se inicia el proceso contra los secuestradores de Moro.
Los tres carabineros que se encontraban en el interior del veh¨ªculo resultaron heridos, uno de ellos gravemente. Contra ellos fueron disparados m¨¢s de un centenar de proyectiles, y lograron salvar sus vidas gracias al chaleco antibalas, a la rapidez con que contestaron al fuego de los atacantes y a la suerte, ya que de las dos bombas de mano que lanzaron los brigadistas, una no lleg¨® a explosionar y la otra lo hizo lejos del veh¨ªculo.
Ante un atentado de estas caracter¨ªsticas los observadores se preguntan si se trata de una reanudaci¨®n de las hostilidades -lo que significar¨ªa que las Brigadas Rojas han conseguido reorganizarse-, o bien de una acci¨®n desesperada y simb¨®lica en v¨ªsperas del proceso.
El jefe del Gobierno, Giovanni Spadolini, por su parte, considera que "el terrorismo no ha sido vencido y que la lucha ser¨¢ larga".
Spadolini hizo estas declaraciones en la inauguraci¨®n de un cuartel, al referirse al atentado citado.
En cualquier caso, el gimnasio donde se desarrollar¨¢ el proceso ha sido transformado en un aut¨¦ntica fortaleza, al igual que la sala habilitada para las audiencias del juicio.
Dentro de la sala han sido instaladas cuatro imponentes jaulas para albergar a los 54 acusados que est¨¢n encarcelados (otras nueve personas ser¨¢n procesadas en rebeld¨ªa).
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