Vilas, ¨²ltima barrera para la revelaci¨®n Wilander

El espa?ol Jos¨¦ Higueras no pudo completar su magn¨ªfica actuaci¨®n en Roland Garros, al perder en semifinales con el argentino Guillermo Vilas, por 6-1, 6-3 y 7-6. Vilas se enfrentar¨¢ en la final al a la gran revelaci¨®n del torneo, el joven sueco de diecisiete a?os Mats Wilander, que derrot¨® al argentino Jos¨¦ Luis Clerc, por 7-5, 6-2, 1-6 y 7-5. A Wilander se le considera ya como el sucesor de Bjorn Borg.Al rev¨¦s del partido anterior, en que Wilander gan¨®, sobre todo, por los fallos de Clerc, Higueras vendi¨® m¨¢s cara su derrota ante el gran favorito del torneo, invicto este a?o en tierra batida. Vilas demostr¨® encontrarse en un momento de forma impresionante, no s¨®lo con juego variado y fuerte, seg¨²n su costumbre, sino con una moral de hierro, que es la ¨²nica capaz de permitir a un tenista de calidad llegar a bolas incre¨ªbles.

El jugador espa?ol, que empezo siendo arrollado por su rival, dentro siempre de un juego largo y hasta pesado, ya habitual en tere nos as¨ª, fue recuper¨¢ndose seg¨²n avanzaba el encuentro y puso en graves aprietos al pupilo de Ion Tiriac. La diferencia en casi todos los momentos volvi¨® a decidirla un hecho que nunca se puede olvidar en deporte y en tenis, especialmente: la fortuna. Vilas, adem¨¢s de jugar muy bien, tuvo suerte en bolas ganadas milagrosamente.

Wilander ya hab¨ªa eliminado con anterioridad al gran favorito del torneo, el checo Ivan Lendl, as¨ª como al norteamericano Vitas Gerulaltis. Tres meses m¨¢s joven que su compatriota Borg, cuando conquist¨® su primer t¨ªtulo franc¨¦s en 1974, Wilander se convirti¨® en el jugador m¨¢s joven que disputar¨¢ la final individual de Roland Garros.

Tras un primer set de cierta igualdad, pero en el que impuso su juego, el sueco se anot¨® el segundo f¨¢cilmente. El argentino di¨® la sensaci¨®n de que pod¨ªa remontar el partido cuando gan¨® el tercero por un concluyente 6-1, pero las esperanzas de Clerc quedaron anuladas en el cuarto, ante un Wilander que sorprendentemente mantuvo una serenidad impropia de su juventud. Aunque el argentino lleg¨® a acercarse a su rival tras llegar a perder por 5-1, la serenidad de sueco volvi¨® a brillar pese a su juventud.

Clerc abandon¨® el estadio de Roland Garros inmediatamente despu¨¦s de su derrota, neg¨¢ndose a asistir a la obligatoria conferencia de prensa que se celebra al finalizar los partidos. Esta postura del jugador argentino, que el a?o pasado recibi¨® el premio a la deportividad por su impecable comportamiento, puede costarle una multa de unos 500 d¨®lares (50.000 pesetas).