Comienza hoy en Nueva York la segunda sesi¨®n de la Asamblea General de la ONU sobre desarme
La segunda sesi¨®n especial de la Asamblea General de la ONU sobre el desarme va a hacer coincidir en Nueva York, a partir del pr¨®ximo 7 de junio, un impresionante n¨²mero de personalidades pol¨ªticas del mundo entero, as¨ª como representantes de organizaciones no gubernamentales y de instituciones especializadas.
Desde Margaret Thatcher, jefa del Gobierno de Gran Breta?a, hasta Men¨¢jem Beguin, de Israel, los primeros ministros de Jap¨®n, Canad¨¢ y los pa¨ªses n¨®rdicos han anunciado que acudir¨¢n a Nueva York en los pr¨®ximos d¨ªas, si bien los acontecimientos de las Malvinas y la nueva ofensiva israel¨ª sobre L¨ªbano permiten augurar la cancelaci¨®n de algunos de estos viajes.Al menos cincuenta ministros de Asuntos Exteriores de otros tantos pa¨ªses del mundo son esperados en la ciudad norteamericana, entre ellos Claude Chesson, de Francia, Andrei Gromyko, de la URSS, as¨ª como el cardenal Agostino Casaroli, secretario de Estado del Vaticano, que leer¨¢ un mensaje del Papa Juan Pablo II.
El debate general, que ocupar¨¢ la sesi¨®n hasta el 20 de junio, constituir¨¢ la ocasi¨®n para que los representantes ante la ONU de otros Estados miembros expongan sus puntos de vista, unos sobre el peligro de la carrera de armamentos -que, seg¨²n los datos de organizaciones competentes, suponen gastos de un mill¨®n de dolares, unos 100 millones de pesetas, cada minuto- y otros sobre las condiciones que permitir¨¢n frenar el curso de esta espiral armamentista, particularmente en el dominio nuclear.
Contados al m¨¢ximo nivel
Se espera que las potencias m¨¢s pertrechadas de armamentos de este tipo, a trav¨¦s de Andrei Gromyko y del presidente norteamericano, Ronald Reagan, enunciar¨¢n ante la tribuna de la Asamblea General sus proposiciones m¨¢s recientes -y otras nuevas, sin duda- con vistas a la reanudaci¨®n, el pr¨®ximo 29 de junio en Ginebra, de sus negociaciones sobre la limitaci¨®n de armamentos estrat¨¦gicos, START.
Pero ser¨¢ al margen de la sesi¨®n, en el curso de las entrevistas entre el secretario de Estado norteamericano, Alexander Haig, y el ministro de Asuntos Exteriores de la URS S, Andrei Gromyko, donde tendr¨¢ lugar el intercambio de puntos de vista m¨¢s significativo no solo sobre las negociaciones futuras, sino tambi¨¦n sobre la apreciaci¨®n rec¨ªproca respecto a las relaciones entre ambos pa¨ªses.
Adem¨¢s de estas entrevistas, la presencia de un elevado n¨²mero de jefes de Gobierno y de ministros de Asuntos Exteriores ser¨¢ la ocasi¨®n de nuevos contactos, sobre todo el que se espera mantengan Claude Cheysson, jefe de la diplomacia gala, y su colega sovi¨¦tico, Andrei Gromyko.
Tras el debate general, en el que intervendr¨¢n, adem¨¢s de los representantes oficiales, unos sesenta representantes de organismos no gubernamentales y de institutos especializados sobre problemas de desarme, la Asamblea General abordar¨¢, en las comisiones plenarias, su verdadero programa de trabajo.
El programa de trabajo implicar¨¢ fundamentalmente un examen de las medidas tomadas tras el estudio de las recomendaciones de la primera sesi¨®n especializada sobre el desarme, celebrada en los meses de mayo y junio de 1978, la adopci¨®n de un programa al respecto, elaborado por una comisi¨®n preparatoria, y disposiciones para movilizar a la opini¨®n p¨²blica mundial a favor de una opci¨®n de desarme.
La sensibilizaci¨®n existente, sobre todo entre los j¨®venes, alrededor del peligro de una confrontaci¨®n nuclear, se traducir¨¢ en la celebraci¨®n de manifestaciones, seminarios, exposiciones y sesiones de cine.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.