La victoria de Habr¨¦ puede facilitar la reconciliaci¨®n nacional en Chad
Las Fuerzas Armadas del Norte (FAN) del ex primer ministro Hiss¨¨ne Habr¨¦ fueron acogidas triunfalmente el lunes en la capital de Chad, Yamena, que controlan por completo, mientras los ¨²ltimos partidarios del presidente, Gukuni Uedel, con ¨¦ste a la cabeza, se han retirado a territorio camerun¨¦s, donde el flujo de refugiados contin¨²a sin interrupci¨®n.
La fulminante victoria de Habr¨¦, aunque no pone t¨¦rmino a tres a?os de guerra civil en ese pa¨ªs africano, puede facilitar una reconciliaci¨®n de todas las tendencias chadianas, seg¨²n el presidente de la Organizaci¨®n para la Unidad Africana, Daniel Arap Moi.Las FAN se han revelado como una fuerza m¨¢s disciplinada y adiestrada que las otras ramas militares chadianas, en particular las Fuerzas Armadas Populares (FAP), de Gukuni Uedei, que, a pesar de disponer de 3.000hombres y una log¨ªstica considerable, no han logrado hacer frente a las columnas de Habr¨¦, procedentes de Ati, a cuatrocientos kil¨®metros de la capital.
Dificultades para consolidarse
No obstante, Habr¨¦ tendr¨¢ muchas dificultades para consolidarse como el nuevo hombre fuerte de Chad, ya que en los tres ¨²ltimos a?os las facciones disidentes del norte, musulm¨¢n, y del sur, animista y cristiano, jam¨¢s han logrado formalizar una uni¨®n efectiva, a pesar de los esfuerzos y las mediaciones de la OUA, que sigue preconizando una negociaci¨®n entre todas las tendencias y la celebraci¨®n de elecciones libres.
Para Gukuni, que hab¨ªa dejado de contar con la protecci¨®n de Libia -lo que no explica por completo su fracaso militar-, la victoria de su rival ha sido facilitada por la complicidad de los contingentes de la Fuerza Interafricana de Paz, integrada por tropas del Zaire, Senegal y Nigeria, que dipon¨ªan en Ati de 2.000 hombres, y no han intervenido para detener el avance de las columnas de Habr¨¦
El presidente chadiano rechaz¨® la negociaci¨®n de un compromiso pol¨ªtico con Habr¨¦, tal y como recomendaba la OUA, pero el fracaso de Gukuni no puede achacarse tanto a su intransigencia y al descorazonamiento de sus protectores, como al convencimiento que ten¨ªan ¨¦stos de su d¨¦bil car¨¢cter y su incapacidad para movilizar en torno suyo a las fuerzas del Sur.
En los ¨²ltimos meses se hab¨ªa producido tambi¨¦n un sensible viraje en las alianzas exteriores de uno y otro bando. Francia, que estuvo apoyando pol¨ªtica y militarmente a Habr¨¦ desde que ¨¦ste negoci¨® con Par¨ªs la liberaci¨®n de la etn¨®loga francesa Fran?oise Claustre, secuestrada en 1974, se hab¨ªa acercado a Gukuni a partir de noviembre del a?o pasado, cuando el presidente chadiano acept¨® a rega?adientes la retirada de las tropas libias de Chad.
La victoria de las FAN ha sido facilitada por la deserci¨®n de numerosos soldados del Ej¨¦rcito regular chadiano y la captura de importantes alijos de armas de procedencia libia en Abeche, el basti¨®n fuerte de Habr¨¦. La entrada de los partidarios de ¨¦ste en Yamena el pasado lunes, tras dos horas de combates, representa el colof¨®n de una larga marcha emprendida en diciembre de 1980, tras la ruptura de la coalici¨®n Habr¨¦-Gukuni en el seno del Gobierno de Uni¨®n Nacional (GUNT).
Antiguo licenciado de la Sorbona francesa, Habr¨¦ ha sido el ¨²nico de los dirigentes chadianos en oponerse militarmente a la intervenci¨®n libia, lo que le vali¨® una considerable dosis de cr¨¦dito en el seno de la OUA, a diferencia, de Gukuni, considerado por la organizaci¨®n africana como un simple hombre de facci¨®n.
Ambiciones personales y rivalidades ¨¦tnicas han marcado profundamente la historia atormentada de Chad desde febrero de 1968, ¨¦poca en que Ibrahim Abatcha, hoy fallecido, fund¨® el Frente de Liberaci¨®n de Chad (Frolinat),, dividido cuatro a?os m¨¢s tarde en cinco tendencias dispares, apoyadas por los pa¨ªses lim¨ªtrofes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.