La fragmentacion ¨¢rabe y sus propias divisiones internas debilitan progresivamente a los palestinos en Beirut

ENVIADO ESPECIALEl intento de generar un consenso ¨¢rabe en torno al mantenimiento de una limitada presencia palestina en L¨ªbano para poder negociar en mejor posici¨®n con Estados Unidos e Israel ha fracasado aparentemente. Las divergencias entre los diferentes grupos integrados en la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina (OLP) sobre las concesiones que es necesario hacer a Israel para evitar que su ej¨¦rcito ataque Beirut oeste han quedado, una vez m¨¢s, puestas de manifiesto, por las declaraciones contradictorias de los dirigentes palestinos.

Mientras, el Gobierno de Tel Aviv se impacienta y su artiller¨ªa bombardea los campamentos palestinos al sur de la capital -rompiendo moment¨¢neamente el alto el fuego vigente desde hace una semana-, al tiempo que su fuerza a¨¦rea sobrevuela Beirut de madrugada a muy baja altura, despertando a sus habitantes cuando los aviones rebasan la barrera del sonido y haciendo a?icos los cristales.Unico aspecto positivo en estas ¨²ltimas veinticuatro horas: el subsecretario norteamericano para Oriente Pr¨®ximo, Morris Drapper, regres¨® ayer de madrugada a Beirut, procedente de Jerusal¨¦n, con la promesa israel¨ª de prolongar el alto el fuego 48 horas m¨¢s, hasta el domingo.

Bechir Gemayel, jefe de la milicia cristiana derechista libanesa (Kataeb-falangista), aliada de Israel, invitado a acudir el jueves a Taef, capital de verano de Arabia Saud¨ª, por el comit¨¦ ministerial restringido de la Liga Arabe, se neg¨® a aceptar la permanencia en L¨ªbano de una OLP con poderes muy recortados.

El comit¨¦, en el que participan los ministros de Asuntos Exteriores de L¨ªbano, Siria, Kuwait, Argelia, Arabia Saud¨ª y un representante de la OLP, concluy¨® ayer sus trabajos sin haber logrado, a causa de la intransigencia del hombre fuerte de L¨ªbano, acordar una postura com¨²n palestino-libanesa, respaldada poor los pa¨ªses ¨¢rabes, que servir¨ªa de base para la negociaci¨®n con Estados Unidos, pa¨ªs que act¨²a como intermediario con Israel.

El jefe cristiano se ha pronunciado recientmente, aunque en t¨¦rminos velados, no s¨®lo por un desmantelamiento de la fuerza militar palestina en L¨ªbano, sino por la expulsi¨®n de los 600.000 palestinos residentes aqu¨ª. Los refugiados palestinos que no poseen la nacionalidad libanesa temen que tras la salida de los fedayin del pa¨ªs la milicia falangista les haga la vida imposible, hasta el punto de obligarles tambi¨¦n a abandonar L¨ªbano.

La postura com¨²n ¨¢rabe resulta tanto m¨¢s dif¨ªcil de definir que ni siquiera los palestinos parecen de acuerdo sobre la actitud a tomar.

Por primera vez desde hace cinco d¨ªas, dos dirigentes de la OLP, Georges Habache, l¨ªder del Frente Popular para la Liberaci¨®n de Palestina, y Abu Iyad, n¨²mero dos de Al Fatah, pusieron en tela de juicio que la central palestina haya aceptado el principio de su salida de Beirut, revelado por varios miembros del Gobierno liban¨¦s y confirmado por otros destacados responsables palestinos.

Habache declar¨® a una emisora de radio francesa que Yasir Arafat, l¨ªder de la OLP, "nunca ha abordado el tema" de la evacuaci¨®n con los dem¨¢s dirigentes palestinos, mientras que Ibu Iyad afirmaba que la resistencia debe permanecer en Beirut "para proteger a sus aliados libaneses, expuestos a los golpes fascistas de la falange".

El presidente liban¨¦s, El¨ªas Sarkis, y el emisario norteamericano para Oriente Pr¨®ximo, Philip Habib, se han percatado con disgusto, asegura la Prensa libanesa, de que su informaci¨®n sobre la evoluci¨®n de la postura de la OLP var¨ªa en funci¨®n de la afiliaci¨®n pol¨ªtica de la fuente palestina que se la comunica.

En c¨ªrculos allegados a la negociaci¨®n se teme que las vacilaciones palestinas inciten a Israel a reanudar a partir del domingo, como ya lo hizo la semana pasada, una pol¨ªtica que combine la presi¨®n militar activa con la negociaci¨®n diplom¨¢tica.

En previsi¨®n de estas nuevas hostilidades, y siguiendo los consejos difundidos en ¨¢rabe por la radio israel¨ª y por las octavillas lanzadas por la aviaci¨®n hebrea, numerosos habitantes de Beirut oeste cruzaron ayer, por sexto d¨ªa consecutivo, al sector cristiano del este de la ciudad.