La situaci¨®n sanitaria de Beirut se ha vuelto desesperada en los ¨²ltimos d¨ªas

El abastecimiento alimentario de Beirut oeste ha mejorado, pero la situaci¨®n higi¨¦nica y sanitaria se ha degradado desde que el Ej¨¦rcito israel¨ª, que cerca la ciudad, cerr¨® hace dos semanas los tres accesos al sector occidental de la capital de L¨ªbano, controlado por las fuerzas palestinas.

Por lo que se refiere al alto el fuego, al margen de algunos intercambios de disparos en el sector sur de la capital, ayer se respet¨® por ambas partes en el conjunto del frente.Con sorprendente unanimidad, todas las comunidades religiosas libanesas, desde la asamblea de patriarcas cristianos hasta los representantes de las asociaciones isl¨¢micas, han pedido a lo largo de la semana la supresi¨®n del bloqueo israel¨ª de Beirut.

Desde hace una semana, sin embargo, los controles israel¨ªes para los camiones que intentan entrar en Beirut oeste cargados de v¨ªveres son m¨¢s flexibles y los conductores que dan una buena propina -hasta 88.000 pesetas- a los soldados del Ej¨¦rcito hebreo, o aquellos cuya mercanc¨ªa procede de Israel, est¨¢n pr¨¢cticamente seguros de pasar el "filtro".

El restablecimiento por el Ej¨¦rcito ocupante del suministro de luz y de agua permite disfrutar a los 500.000 habitantes que a¨²n permanecen en la capital de dieciocho horas de electricidad y algunas menos de agua al d¨ªa, a condici¨®n de que las ca?er¨ªas y el tendido el¨¦ctrico no hayan sido destruidos por un bombardeo.

Desde el viernes 9, el Ej¨¦rcito israel¨ª autoriza tambi¨¦n la entrada en la ciudad sitiada, aunque con cuentagotas, de veh¨ªculos que transportan sangre para los hospitales, pero el combustible sigue bloqueado en las puertas de Beirut, por lo que algunos centros hospitalarios tienen dificultades para alimentar sus grupos electr¨®genos y para conservar la sangre a una temperatura determinada. Los hospitales sufren tambi¨¦n de una grave penuria de ox¨ªgeno.