P¨¦rez- Llorca pide en la ONU que el Reino Unido inicie una negociaci¨®n de buena fe sobre Gibraltar

El ministro de Asuntos Exteriores, Jos¨¦ Pedro P¨¦rez-Llorca, pidi¨® ayer en las Naciones Unidas al Reino Unido "una negociaci¨®n aut¨¦ntica y de buena fe sobre Gibraltar", y atac¨® duramente a Francia, a la que acus¨® de "insolidaria" por su falta de cooperaci¨®n en la lucha contra el terrorismo. La intervenci¨®n de P¨¦rez-Llorca ante la Asamblea General de la ONU, que hab¨ªa despertado inter¨¦s por las recientes intervenciones de Espa?a en el Consejo de Seguridad, puede calificarse de suave en la forma y firme en el fondo. En ella, el ministro espa?ol abord¨® todo el abanico de conflictos internacionales, sin eludir un solo tema de tensi¨®n mundial desde el Oriente Pr¨®ximo a las Malvinas, pasando por la situaci¨®n en Centroam¨¦rica y Afganist¨¢n.

La constante de su intervenci¨®n fue una reafirmaci¨®n ante los 150 miembros de la Asamblea General de la independencia de la pol¨ªtica exterior espa?ola, a pesar de la reciente entrada de nuestro pa¨ªs en la OTAN y del proceso de integraci¨®n en la Comunidad Econ¨®mica Europea, con una especial referencia dentro de esa independencia a los lazos que unen a Espa?a con los pa¨ªses de Latinoam¨¦rica. Seg¨²n P¨¦rez-Llorca, esos lazos no s¨®lo no se debilitar¨¢n, sino que saldr¨¢n reforzados por la presencia espa?ola en las comunidades atl¨¢ntica y europea.

Gibraltar y la lucha contra el terrorismo

Los temas en los que el titular de Exteriores espa?ol fue especialmente fogoso fueron los que afectan a Gibraltar y a la lucha contra el terrorismo. Para P¨¦rez-Llorca, la situaci¨®n del Pe?¨®n es "contraria a los prop¨®sitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas". Y a este respecto record¨® que el Gobierno brit¨¢nico se oblig¨® a resolver, de acuerdo con las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas, primero en Lisboa y luego en Londres, todas sus diferencias con Espa?a sobre Gibraltar "por la v¨ªa civilizada del di¨¢logo y la negociaci¨®n"."Pero es preciso", a?adi¨®, "que esa negociaci¨®n sea aut¨¦ntica y de buena fe, y que contemple todos los elementos del problema y, fundamentalmente, el que constituye la ra¨ªz misma del contencioso: la cuesti¨®n de la soberan¨ªa". En una clara alusi¨®n al problema de las Malvinas, P¨¦rez-Llorca declar¨® que "cualquier intento de eludir ese elemento en base a circunstancias coyunturales, por fuertes y poderosas que sean las pasiones que han despertado, constituir¨ªa una grave responsabilidad que no s¨®lo podr¨ªa perjudicar el proceso de soluci¨®n pac¨ªfica del problema, sino constituir un grave obst¨¢culo en las relaciones entre los dos pa¨ªses".

Espa?a busca el restablecimiento de su integridad territorial, consagrado en el p¨¢rrafo sexto de la resoluci¨®n 1.514, que debe prevalecer sobre cualquier otro criterio, como la aplicaci¨®n del p¨¢rrafo quinto de esa resoluci¨®n, siempre aireado por el Reino Unido, en el que se defiende el principio de autodeterminaci¨®n de los habitantes de territorios coloniales, olvidando el respeto a la integridad territorial de los pa¨ªses.

En este contexto, P¨¦rez-Llorca pidi¨® igualmente: el comienzo de negociaciones entre el Reino Unido y Argentina para resolver el tema de fondo del problema de las Malvinas, que, en opini¨®n espa?ola, no es otro que "la descolonizaci¨®n del territorio para llegar a una soluci¨®n que contemple el restablecimiento de la plena integridad territorial de Argentina". El conflicto austral, si no se eliminan sus ra¨ªces, se convertir¨ªa en un permanente factor de tensi¨®n y desestabilizaci¨®n de toda la zona, con el previsible impacto negativo en las relaciones entre Europa y Latinoam¨¦rica.

El tema del terrorismo fue abordado por P¨¦rez-Llorca en el marco de la defensa de los derechos humanos. Espa?a, dijo el ministro, que valora el respeto a esos derechos, en el plano interno e internacional, "con la intensidad y pasi¨®n de quien recobra algo perdido", considera que el primer derecho humano es el derecho a la vida, conculcado todos los d¨ªas por los terroristas. Despu¨¦s de recordar los esfuerzos realizados por Espa?a para conseguir una cooperaci¨®n internacional en este tema, P¨¦rez-Llorca fue contundente en su ataque a "los pa¨ªses fronterizos" que no facilitan esa cooperaci¨®n. El ministro manifest¨® que "los progresos conseguidos (en el campo de la cooperaci¨®n internacional) no pueden, sin embargo, hacer que dejemos de ver con claridad la continuada existencia de actitudes de inconsciencia o de insolidaridad, cuyas explicaciones ¨²ltimas s¨®lo pueden encontrarse en un ego¨ªsmo miope y suicida, y que se hacen particularmente dolorosas cuando se efect¨²an desde pa¨ªses fronterizos.

Tema destacado en la intervenci¨®n de P¨¦rez-Llorca fue la situaci¨®n en Centroam¨¦rica, para la que expuso un plan concreto, encaminado a lograr una distensi¨®n y una estabilidad en esa zona espec¨ªfica. El esquema de soluciones propuesto por el ministro espa?ol est¨¢ basado en cuatro ideas b¨¢sicas: rechazo de la llamadas soluciones militares, confiando en una negociaci¨®n pol¨ªtica que integre a todas las fuerzas nacionales; apelaci¨®n al principio de no intervenci¨®n; ayuda a la consolidaci¨®n de las alternativas democr¨¢ticas y pluralistas, y condena inequ¨ªvoca e indiscriminada de la violaci¨®n de los derechos humanos, sin excepciones territoriales o ideol¨®gicas. La situaci¨®n en Centroam¨¦rica necesita soluciones urgentes antes de que degenere en un conflicto que afecte a toda la zona y se convierta en uno de los focos importantes de la crisis mundial.

Condena a Israel

Por lo que respecta a Oriente Pr¨®ximo, la intervenci¨®n espa?ola ha estado caracterizada por una condena s n paliativos "a la brutal intervenci¨®n armada de Israel" en L¨ªbano y a la matanza de palestlnos en los campos de refugiados -"un acto de barbarie que cre¨ªamos pertenec¨ªa al pasado"-, y por un nuevo reconocimiento de los derechos nacionales del pueblo palestino. Junto al derecho de todos los Estados de la zona a vivir en paz dentro de fronteras seguras y reconocidas, derecho que Espa?a reconoce y del que no excluye a nadie. Es preciso colocar la aceptaci¨®n del hecho palestino en todas sus dimensiones. En este sentido, Espa?a ha visto con esperanza el plan ¨¢rabe elaborado en la cumbre de Fez como un elemento que puede contribuir a lograr una soluci¨®n justa, duradera y global del problema de Oriente Pr¨®ximo.P¨¦rez-Llorca se refiri¨® asimismo al tema de las relaciones entre Espa?a y los pa¨ªses africanos, y resalt¨® a este respecto la colaboraci¨®n hispano-guineana, enmarcada dentro del m¨¢s estricto respeto a la independencia y soberan¨ªa de la antigua colonia espa?ola, y expres¨® el deseo espa?ol de intensificar su colaboraci¨®n con todos los pa¨ªses del continente.

Despu¨¦s de reiterar el apoyo espa?ol a la independencia de Namibia y condenar nuevamente la pol¨ªtica de apartheid seguida por Sur¨¢frica, P¨¦rez-Llorca pidi¨® una continua presi¨®n internacional para conseguir "la liberaci¨®n de Afganist¨¢n y la retirada de tropas extranjeras de su territorio".