Fraga hace en Melilla un canto a la familia y a las Fuerzas Armadas

Manuel Fraga apel¨® ayer en Melilla a la exaltaci¨®n de la familia y de las Fuerzas Armadas ante un p¨²blico de m¨¢s de mil personas, integrado en su mayor parte por militares y sus mujeres, seg¨²n apreciaci¨®n del candidato al Congreso de los Diputados por la coalici¨®n Alianza Popular-Partido Dem¨®crata Popular (AP-PDP), Ricardo de la Cierva. En esa arenga Fraga lleg¨® a decir que el PSOE propugnaba la supresi¨®n de la familia y calific¨® de "un error de alg¨²n miembro aislado del Ej¨¦rcito" las sucesivas intentonas de golpe de Estado fracasadas hasta la fecha.

El l¨ªder aliancista, tras afirmar que uno de los objetivos del partido socialista es la supresi¨®n de la familia, manifest¨® que AP, por el contrario, defiende la continuidad de "esa estampa ejemplar que me hab¨¦is ofrecido cuando paseaba hace media hora por la calle principal y ve¨ªa a tantas familias enteras de melillenses, yendo unidos a misa y a la playa".Respecto a las Fuerzas Armadas, Manuel Fraga destac¨®, con voz vibrante, que sus miembros "son ejemplares y dignos del uniforme que llevan", y asegur¨® que AP no consentir¨ªa "que por un error de alg¨²n miembro aislado se mancille y se manche el honor de nuestras fuerzas armadas". "No pasaremos por ello", concluy¨®, entre el fervor de los aplausos de los asistentes, cuyas edades sobrepasaban en bastante los treinta a?os.

En el aspecto puramente electoral com¨²n a todos los m¨ªtines de la campa?a que Fraga ha protagonizado hasta la fecha actual, ¨¦ste volvi¨® a insistir en la necesidad de votar -el l¨ªder aliancista revel¨® recientemente que, seg¨²n los sondeos que ellos est¨¢n manejando estos d¨ªas, la abstenci¨®n puede rondar al 45% de la poblaci¨®n-, y en la trascendencia de que los electores conservadores no se queden en su casa el d¨ªa 28 de octubre, "porque lo que nos estamos jugando en esta ocasi¨®n es el modelo de sociedad", y realiz¨® un nuevo llamamiento al voto ¨²til.

La tesis de Fraga en este sentido es que en Espa?a actualmente s¨®lo existen dos opciones pol¨ªticas: ellos y los socialistas. Fraga no oculta su desprecio por los partidos de centro y pide a todo el que le escucha que no opte por esos "partiduchos, partidejos, partidillos y partid¨²sculos", que dispersan, a su juicio, el voto no marxista.

Naturalmente, a continuaci¨®n explica las razones de por qu¨¦ deben votar a AP y no al PSOE. Entre otras cosas, porque, seg¨²n ¨¦l, los socialistas quieren implantar en Espa?a un modelo estatalizante, colectivizante y autoritario, al no permitir la libertad de expresi¨®n, debido a su negativa a la autorizaci¨®n de instalar cadenas privadas de Televisi¨®n en Espa?a, ni la libertad de elecci¨®n de educaci¨®n, al no ser entusiastas fervientes los socialistas de subvencionar en exceso las escuelas privadas.

En el caso concreto de Melilla, Fraga les prometi¨® a sus posibles votantes dos objetivos concretos: la defensa de los derechos internacionales de los melillenses y el reforzamiento de la defensa militar de esta ciudad.

El candidato de la coalici¨®n AP-PDP por Melilla, es el ex ministro Ricardo de la Cierva, qui¨¦n se presenta en los carteles electorales como 1a voz de Melilla en la Prensa, en la Historia y en el Congreso".

El sacrificio de De la Cierva

Tanto en una conferencia de Prensa como en el citado mitin en el que habl¨® junto a Manuel Fraga, Ricardo de la Cierva dijo que su fuga de Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico a Alianza Popular obedec¨ªa a su inter¨¦s por defender una idea de centro-derecha que, seg¨²n dijo, hab¨ªa profesado toda su vida. Esta fuga, prosigui¨® el candidato, le cost¨® incluso alguna renuncia personal en contra de sus intereses: "Leopoldo Calvo Sotelo", dijo Ricardo de la Cierva, "me hab¨ªa ofrecido el puesto n¨²mero uno por Murcia, que yo rechac¨¦ porque UCD es el partido de las falsas promesas y de la ambig¨¹edad personificada". E incluso a?adi¨® m¨¢s: "Yo estaba decidido a retirarme a mis tareas privadas y dejar la pol¨ªtica, pero los militantes de Alianza Popular de Melilla me rogaron que encabezara la candidatura. Este hecho me hizo dudar. A los pocos d¨ªas, el propio Manuel Fraga me propuso un puesto seguro por Madrid, al mismo tiempo que, adivinando mis pensamientos, me ped¨ªa que me presentara por Melilla". "No pude negarme", concluy¨® Ricardo de la Cierva, "ante el honor de tales ofrecimientos".

La admiraci¨®n que parece sentir De la Cierva por Manuel Fraga qued¨® patente en su intervenci¨®n en el mitin. All¨ª dijo que Fraga era el ¨²nico estadista que hay en estos momentos en nuestro pa¨ªs y que "la llamada de E raga hacia m¨ª es el m¨¢s alto honor que he recibido en mi vida" y entre otras frases igualmente admirativas, concluy¨® su parlamento dando una media vuelta en direcci¨®n al l¨ªder de AP y en una breve inclinaci¨®n dici¨¦ndole: "Melilla cree en ti".

"Pienso lo mismo que Fraga"

En la conferencia de Prensa previa al citado mitin, los informadores preguntaron en reiteradas ocasiones a De la Cierva su opini¨®n, tanto por su condici¨®n de pol¨ªtico como por la de historiador, sobre la ¨²ltima intentona de golpe de Estado. De la Cierva, que hasta esa pregunta se hab¨ªa mostrado muy locuaz con los informadores, se limit¨® en esta ocasi¨®n a responder: "Yo pienso lo mismo que piensa Manuel Fraga".

Los actos electorales de Melilla finalizaron con un almuerzo en el que estaba puesta la televisi¨®n mientras los comensales, presididos por Fraga y De la Cierva, com¨ªan. En un momento determinado salieron por la peque?a pantalla unas im¨¢genes de Santiago Carrillo en su campa?a electoral. Una voz le grit¨® "asesino", si bien la mayor¨ªa se limit¨® a proferir pitadas.