Un Nobel en casa

SER?A un imperdonable pudor ocultar que la concesi¨®n del Premio Nobel de Literatura a Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez constituye un especial acontecimiento para este peri¨®dico. Dicho sucintamente, le han concedido el mayor galard¨®n literario del mundo a uno de los columnistas de EL PAIS, que ejerce su trabajo, como pueden comprobar los lectores cada mi¨¦rcoles, con la excelencia del mejor profesional en periodismo. El Premio Nobel de Literatura que la Academia Sueca ha decidido este a?o es as¨ª, a la vez que la distinci¨®n a un escritor de cuentos y novelas, el reconocimiento al trabajo de un veterano redactor de peri¨®dicos que jam¨¢s ha abdicado de esta condici¨®n, desde que en 1947 comenzaron sus publicaciones en el diario El Espectador, de Bogot¨¢.El reciente premio Nobel ha reiterado en sus declaraciones que su concepci¨®n de la literatura est¨¢ ¨ªntimamente adscrita a su experiencia period¨ªstica, y que un mismo concepto radical emparenta a la literatura considerada como relato y al periodismo entendido como reportaje. Adem¨¢s est¨¢ esa importante dimensi¨®n p¨²blica de Garc¨ªa M¨¢rquez como combatiente por los derechos humanos en el mundo, su intervenci¨®n en el canje de prisioneros pol¨ªticos de uno u otro signo, su denuncia de los reg¨ªmenes militares en Am¨¦rica Latina, de la situaci¨®n en Angola y Mozambique o respecto a los refugiados huidos de Vietnam...

Por otro lado el hecho m¨¢s importante de este premio que ha acordado la Academia Sueca- no est¨¢ en haberlo concedido a un escritor relativamente joven, diez a?os por debajo de la media en que se recibe el Nobel, ni tampoco en concederlo a un escritor de la gran talla de Garc¨ªa M¨¢rquez. Aunque la venerable instituci¨®n acad¨¦mica, fundada en 1786, ha repartido este galard¨®n entre autores tan anodinos como Karl Gjellerup o Henryk Pontoppidan y ha olvidado a pilares literarios como Henry James, Marcel Proust, Rainer Maria Rilke o James Joyce, tambi¨¦n ha sabido premiar a Rudyard Kipling con 42 a?os, a Sinclair Lewis con 45 o a Albert Camus con 44. Lo m¨¢s destacable de la designaci¨®n es que Garc¨ªa M¨¢rquez representa a la vez a la literatura de calidad y a la literatura de gozo popular.

Una suerte, pues, de caluroso sufragio ha antecedido a esta decisi¨®n de los muy diplom¨¢ticos y fr¨ªgidos acad¨¦micos. Un sufragio popular que ha hecho traducir los libros de Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez a m¨¢s de treinta idiomas y que, si ha destacado a este escritor, lo ha hecho tambi¨¦n junto a ese inolvidable grupo de rutilantes creadores latinoamericanos que forman Octavio Paz, Vargas Llosa, Jorge Luis Borges o Juan Rulfo, Julio Cort¨¢zar, Juan Carlos Onetti y tantos otros hacia todos los cuales, como un reconocimiento de su envergadura creadora y sus fastuosas ra¨ªces, debe ser recibido este premio que salta desde Estocolmo hasta Aracataca.