Errores internacionales
En EL PAIS del 20 de octubre, Feliciano Fidalgo reproduce una frase de un admirador de Mend¨¨s-France, en la que se dice que Mitterrand "no fue nunca mendesista", es decir, partidario del abandono de Indochina -o mejor, del traspaso de la colonia a Estados Unidos- no por un s¨²bito anticolonialismo, sino por un af¨¢n de pol¨ªtica racional: Francia no pod¨ªa seguir su dominio en la lejana Asia, era mejor renunciar a tiempo, para salvar el resto, es decir, Africa y muy en especial la Argelia francesa, esta pol¨ªtica se hundi¨®, y el gaullismo fue la consecuencia. (Cf. el esclarecedor art¨ªculo de alain Ruscio: Le mend¨¦sisme-et l'Indochine, en Revue d'Histoire Moderne et Contemporaine, Abril-Junio 1982).En otra parte del peri¨®dico, Jes¨²s Ceberio informa de las "aldeas estrat¨¦gicas" que se est¨¢n creando en Guatemala, "siguiendo la experiencia iniciada por el Ej¨¦rcito norteamericano en Vietnam". Verdad a medias: la experiencia inmediata, puede ser, pero esta barbarie colonial fue ya practicada por Espa?a en Cuba y por Inglaterra en el Transvaal, s¨®lo que entonces no se hablaba de hamlets, sino de campamentos de concentraci¨®n". Y probablemente habr¨¢ otros ejemplos en la historia colonial de Europa.
Convendr¨ªa que los periodistas hiciesen un esfuerzo para no incurrir en errores por falta de conocimientos hist¨®ricos, y que hiciesen tambi¨¦n un esfuerzo para no reducir todo a lo ocurrido delante de nuestras barbas; que la historia es profunda. /
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