El paro y la defensa de una democracia independiente de los bloques militares, base de la campa?a de Carrillo
Tres han sido los puntales del mensaje de Santiago Carrillo en los cerca de veinticinco m¨ªtines que ha pronunciado en la campa?a electoral: el paro, la profundizaci¨®n y defensa de las libertades contempladas en la Constituci¨®n y la paz, entendida como necesidad de crear un frente democr¨¢tico de lucha contra el golpismo, y realizaci¨®n de una pol¨ªtica exterior independiente de los bloques militares, la salida de Espa?a de la OTAN y la desaparici¨®n de las bases norteamericanas.
El hor¨®scopo hablaba a Carrillo de "tu tendencia, en ocasiones, a dar una imagen falsa de c¨®mo en realidad eres", y terminaba diciendo : "Debes ser m¨¢s sincero". La reducida comitiva que volaba con el secretario general comunista hacia Badajoz, a bordo de la avioneta Josefina II estall¨® en risas cuando una periodista termin¨® de leerle los consejos destinados a los nacidos bajo Capricornio, y hay que decir que las primeras carcajadas fueron las del propio l¨ªder.El dirigente del PCE ha volado en la avioneta Josefina II -m¨¢s de 30.000 kil¨®metros estimados- en manos de dos pilotos j¨®venes, uno de ellos hijo del teniente general Galarza, y ha ido, casi siempre, relajado, tom¨¢ndose un whisky, no m¨¢s de uno, fumando sin parar Peter Stuyvesant y comiendo, de vez en cuando, alg¨²n emparedado.
No obstante, siempre ha tenido tiempo para comentar las ¨²ltima noticias sobre los intentos de golpe de Estado -uno de los temas m¨¢s tratados en su campa?a- o para prestar atenci¨®n y, en ocasiones, tomar buena nota de c¨®mo llevaban la campa?a Gonz¨¢lez o Lavilla y, sobre todo, de las cosas que hac¨ªa Fraga. Aunque en Galicia, Euskadi o Andaluc¨ªa Carrillo haya hablado de la necesidad de terminar con "esa ley extra?a concebida por el PSOE y Calvo Sotelo que es la LOAPA", el tema auton¨®mico no es de los que m¨¢s peso han tenido en su campa?a.
Llamamientos al PSOE
El secretario general comunista ha hecho un constante llamamiento a los compa?eros socialista, para que no se sigan escorando hacia la derecha y ha tenido un recuerdo tambi¨¦n constante para los peligros de la bipolarizaci¨®n pol¨ªtica, entre una derecha echada al monte -"Fraga electriza exactamente al mismo p¨²blico que Blas Pi?ar"- y una izquierda "cada vez m¨¢s moderada". Carrillo ha insistido en la necesidad de uni¨®n entre los trabajadores comunistas y socialistas, para pasar a continuaci¨®n a solicitar el voto incluso a los socialistas de izquierda que creen en la necesidad de un grupo parlamentario comunista fuerte. En este sentido, el l¨ªder del PCE ha reiterado la falta de necesidad del PSOE de recibir "votos ¨²tiles", por tener, a su juicio, garantizada la mayor¨ªa absoluta.
La postura firme ante el problema del paro -"el mayor peligro para la democracia"- y la neutralidad en la pol¨ªtica exterior -"nosotros no queremos que nuestros muchachos tengan que ir a hacer el servicio militar a Alemania o a Turqu¨ªa, ni que Espa?a se convierta en un inmenso Gibraltar o rampa lanzamisiles que atraiga los disparos del otro lado"- las ha reiterado Carrillo provincia a provincia sin variaciones. S¨ª ha hecho cambios en el cap¨ªtulo de las libertades, como, por ejemplo, en lo referente a la defensa del aborto como uno de los derechos de la mujer.
Santiago Carrillo ha hablado del aborto, que figura en el programa de su partido, muy pocas veces -ya el segundo d¨ªa de la campa?a, en El Ferrol, encontr¨® muy poco entusiasta al p¨²blico cuando lo mencion¨®- y lo ha abordado con circunloquios, por comparaci¨®n. Se ha referido, en las contadas ocasiones en que lo ha hecho, a una ley de interrupci¨®n voluntaria del embarazo, pero la "palabra m¨¢gica" s¨®lo la ha citado en negativo: "No somos abortistas", "nadie aborta por placer", adem¨¢s de mostrarse contrario a los privilegios de quienes pueden ir a Londres a interrumpir su embarazo mientras esa situaci¨®n no se soluciona en territorio nacional piara miles de mujeres que tienen que hacerlo en condiciones inhumanas.
Interrupci¨®n del embarazo
Tambi¨¦n en este tema, que el secretario general comunista reconoci¨® que era impopular, se ha dirigido al primer dirigente de Alianza Popular, contrario a la interrupci¨®n voluntaria del embarazo, pero partidario de restablecer la pena de muerte. "Fraga dec¨ªa en una revista, a sus casi sesenta a?os, con esa expansi¨®n y vitalidad que no se le puede negar que tiene, que a ¨¦l le gustaban mucho las mujeres, sobre todo si eran guapas y de cualquier raza, porque en esto, seg¨²n afirmaba, no era racista. Y yo me pregunto: ?no habr¨¢ dejado embarazada a alguna de ellas fuera del matrimonio, a alguna que haya tenido que irse a Londres? Y lo digo sin querer acusar al se?or Fraga. iDios me libre!".
Otro aspecto en el que cambi¨® su discurso a lo largo de la campa?a fue en el tratamiento del porro, que pas¨® de ser fumado por la juventud porque est¨¢ desesperada y sin expectativas a ser fumado simplemente. Un periodista le hizo notar que quiz¨¢, entre la juventud actual, no todo el que liaba un canuto lo hac¨ªa como alternativa al suicidio, y Carrillo, que en toda la campa?a ha demostrado una considerable rapidez en incorporar a sus discursos y actuaciones posibles mejoras que cazaba al vuelo, pas¨® de preguntarse "?c¨®mo extra?a que una juventud que no tiene trabajo ni esperanza de tenerlo se fume un porro, busque en para¨ªsos artificiales la felicidad y el ensue?o que no tiene en la vida real, mien-
El paro y la defensa de una democracia independiente de los bloques militares, base de la campa?a de Carrillo
tras se deja a los grandes traficantes hacer negocio?" -siempre contrapon¨ªa el consumo al tr¨¢fico- a hacer una simple enumeraci¨®n. "La juventud es una capa marginada a la que las gentes que se dicen de orden pueden considerar delincuentes por llevar barba o melena o por fumarse un porro".Al contrario que otros l¨ªderes, Santiago Carrillo no ha tenido pr¨¢cticamente aparato de seguridad. Una pareja -conductor e inspector- de su escolta habitual le acompa?aba al aeropuerto de Barajas y otra le esperaba en el punto de destino. Incluso prescindi¨® del inspector que iba a acompa?arle en la avioneta de diez plazas para que cupiera un periodista m¨¢s.
S¨ª ha tenido Carrillo dos puntales firmes de apoyo que le han acompa?ado sin moverse un momento de su lado, vigilando cada uno de sus pasos, ayud¨¢ndole, incluso, a ponerse la gabardina: su secretaria desde que regres¨® a Espa?a, hace seis a?os, Bel¨¦n Pini¨¦s, y su jefe de Prensa, Angel Mullor.
Bel¨¦n Pini¨¦s, discreta para no aparecer en las fotos, siempre dispuesta a resolver el menor problema a los periodistas, le preparaba todas las ma?anas un termo de "t¨¦ con miel calentita, para la garganta", que met¨ªa en una bolsa de caza de su padre.
Angel Mullor ha sido el encargado de transportar por todas partes esa bolsa de caza y de gestionarle sus contactos con los medios de comunicaci¨®n locales. Su eficacia le ha llevado a utilizar el plural cuando un m¨¦dico, por ejemplo, inyectaba corticoides, euforizantes, al secretario general comunista porque su voz reflejaba ya los ajetreos de la campa?a: "Le estamos poniendo unas inyecciones".
El secretario general comunista le ha dicho de todo a Fraga, pero no ha sido el ¨²nico en su partido. El sentimiento que Fraga produce en el PCE podr¨ªa resumirse en una frase que dedic¨® en Sevilla al l¨ªder de AP Felipe Alcaraz, secretario general andaluz: "El Se?or nos pille confesados si esa locomotora reaccionaria que s¨®lo tiene marcha hacia atr¨¢s se nos viene encima".
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