La cebada, al rabo

El f¨²tbol espa?ol es partidario de la cebada al rabo. Pasado el Mundial-82, consumido el mayor compromiso deportivo de la historia, comienzan a ser planificados los partidos internacionales con un m¨ªnimo de sentido com¨²n. Durante toda la pasada campa?a, la selecci¨®n se reuni¨® los lunes, se entren¨® un ratito los martes y jug¨® los mi¨¦rcoles. No hubo forma de estudiar ning¨²n encuentro y de preparar el equipo m¨¢s adecuado para cada compromiso. Lo que sucedi¨® durante el campeonato fue otra historia, m¨¢s desgraciada todav¨ªa, pero no es cosa de repetir la serie de errores cometidos con inusitada contumacia.Miguel Mu?oz, que tiene por delante un encuentro b¨¢sico para obtener la clasificaci¨®n en la Copa de Europa de Naciones, ha podido disponer del equipo durante casi una semana. Para hacer factible esta razonable programaci¨®n ha sido necesario adelantar a hoy la jornada liguera del pr¨®ximo domingo. El sacrificio que los clubes no hicieron la pasada temporada han podido realizarlo esta vez. En la anterior campa?a fue imposible condicionar las competiciones oficiales espa?olas al Campeonato MundiaL

Es toda una iron¨ªa que la Eurocopa haya merecido mayor atenci¨®n que el Mundial del que Espa?a fue anfitriona. Pero ante esta incongruencia, y ante otras, ya no hay razones para sorprenderse. A todo se acostumbra el cuerpo, y la capacidad de resistencia de los aficionados es inconmensurable. Al f¨²tbol espa?ol le vale todo ' como a aquel viejo catedr¨¢tico sordo al que los alumnos hablaban en camelo cuando preguntaba las especies de insectos.