Otra tendencia negativa

Esta semana ha tra¨ªdo para muchos la sospecha, y para algunos la certeza, de que una nueva tendencia negativa est¨¢ en curso o, cuando menos, est¨¢ comenzando su desarrollo. Los motivos para pensar as¨ª vienen dados por el descenso que a partir del martes han registrado los ¨ªndices generales en las bolsas espa?olas, la disminuci¨®n paulatina de los vol¨²menes de contrataci¨®n y la ausencia de expectativas claras para el mercado.La semana comenz¨® con lo que parec¨ªa un voto de confianza para el Gobierno que llegaba y se traduje, inmediatamente en expectativas e ilusiones, o al menos se quiso ver as¨ª. Pero ya. el martes el mercado mostr¨® m¨¢s claramente por d¨®nde iba, y las expectativas, ilusiones y deseos se desvanecieron casi tan r¨¢pidamente como hab¨ªan nacido. La lectura del programa de gobierno, el debate y la investidura del presidente apenas han hecho parpadear al mercado. Comentarios hubo para casi todos los gustos, pero la cosa no pas¨® de ah¨ª.

El. sector que m¨¢s ha sufrido la situaci¨®n ha sido precisamente el que en las ¨²ltimas sesiones de la semana anterior y la primera de ¨¦sta actu¨® como motor del mercado. La rentabilidad de las acciones el¨¦ctricas se pon¨ªa en entredicho ante el anuncio del recorte de dividendos de que podr¨ªan ser objeto en un futuro pr¨®ximo. La reacci¨®n no se hizo esperar, y el grupo no s¨®lo perd¨ªa, las 77 cent¨¦simas ganadas el martes, sino que para el total de la semana llegaba a perder casi los tres puntos.

El mercado se qued¨® sin motor y, lo que es peor, no encontr¨® a mario medio alguno para frenar. Comenz¨® lo que en principio se llamaron peque?os movimientos a la baja, que, sumados, han sido la causa principal de que empiece a hablarse de tendencia.

El sector de valores bancarios ven¨ªa mostrando una apat¨ªa de la que a¨²n no ha salido y, a pesar de que aumenta la oferta de sus acciones, la situaci¨®n sigue siendo tranquila.

Especial importancia ha tenido esta semana la aceptaci¨®n -casi habr¨ªa, que decir rechazo- que liar, tenido las primeras ampliaciones de capital de las empresas el¨¦ctricas. El precio a que salieron los cupones al mercado, apenas modificado a lo largo de la semana, y el precio a que quedaron las acciones viejas el viernes han hecho aparecer serias dudas sobre su futuro. Tras la ¨²ltima sesi¨®n, el precio de tina acci¨®n nueva y el de una vieja era casi igual para Hidrola, y m¨¢s cara la nueva para Sevillana.

La situaci¨®n que queda para la semana que viene es la de abundante papel y alguna que otra incertidumbre, que, si no sucede nada durante el largo fin de semana, no habr¨¢n de traer alegr¨ªas al patio de operaciones. La total ausencia de expectativas vuelve cauto al dinero y, volvemos a repetirlo, el propio mercado de valores ofrece unos canales alternativos que permiten a los capitales circular con mayor seguridad.