Las conversaciones entre L¨ªbano e Israel para la retirada de tropas se abren en un eflina de incertidumbre

Las conversaciones l¨ªban¨®-israel¨ªes, que comenzar¨¢n hoy en Jalde, al sur de Beirut, se inician bajo el signo de la desconfianza, incertidumbre e inseguridad. Todav¨ªa ayer se escuchaban en Jalde los disparos entre drusos y falangistas, y casualmente los obuses de los hombres de Walid Jumblat, l¨ªder de los drusos de la izquierda libanesa, cayeron cerca del hotel Lebanon Beach, donde deben reunirse los negociadores de ambas partes.

Un clima un tanto superrealista rodea las conversaciones. El Gobierno israel¨ª no conf¨ªa plenamente en su negociador, el ministro de Defensa Ariel Sharon, y le ha colocado dos vigilantes, el viceprimer ministro Simha Ehrlich y el ministro de Asuntos Exteriores Itzhak Shamir.Los negociadores libaneses est¨¢n paralizados por las divergencias que separan al presidente Am¨ªn Gemayel y al primer ministro de L¨ªbano, Chafif Wazzan, divergencias reflejadas en el abismo que a¨²n separa a cristianos y musulmanes libaneses.

Portavoces oficiales libaneses afirman que el ¨²nico punto que ser¨¢ abordado en la negociaci¨®n ser¨¢ las modalidades de la evacuaci¨®n "incondicional" de las tropas israel¨ªes.

El orden del d¨ªa israel¨ª es mucho m¨¢s amplio. Se trata de la normalizaci¨®n de relaciones entre ambos pa¨ªses, intercambios comerciales y tur¨ªsticos, acuerdo sobre el sur de L¨ªbano y, naturalmente, la retirada israel¨ª.

Falta de entendimiento

Por el momento ambas partes no se entienden en nada. No solamente

sobre la existencia de un "acuerdo de principio" del que se jacta Sharon y desmienten los libaneses, sino incluso sobre un principio de acuerdo sobre el orden del d¨ªa de las negociaciones.

Sharon fue atacado primero en la reuni¨®n del Gabinete israel¨ª, y luego en la comisi¨®n de defensa parlamentaria, incluidos los portavoces de su partido, el Likud. Varios miembros del Gobierno, entre ellos el viceprimer ministro Ehrlich, los ministros Modayi y Tzipori, reprocharon a Sharon de haber "inventado" e "inducido a error" al Gobierno, al pretender presentar un acuerdo inexistente.

Ariel Sharon no se sinti¨® concernido por las cr¨ªticas y aconsej¨® a sus colegas no prestar atenci¨®n a las declaraciones p¨²blicas efectuadas en Beirut. "Se trata de hombres que ejercen solamente un poder parcial en un pa¨ªs dividido y ocupado por tropas extranjeras.

Mosaico religioso racial y pol¨ªtico

El Gobierno liban¨¦s debe tener en cuenta a los drusos de izquierda y a los drusos de derecha, a los musulmanes chi¨ªtas y sunnitas. El Ej¨¦rcito regular liban¨¦s est¨¢ menos equipado y entre nado que los falangistas. Deben apaciguar a los sirios, a la OLP y a los saud¨ªes. Tienen necesidad de la ayuda norteamericana, pero saben que se tienen que en tender con nosotros a fin de cuentas. Los libaneses hablan alto y fuerte, pero es el Ej¨¦rcito israel¨ª el que debe garantizar la seguridad de los negociadores en Lebanon Beach. Esa es la verdadera relaci¨®n de fuerzas".

El ministro israel¨ª de Defensa a?adi¨® que "en v¨ªsperas de las negociaciones las partes intentan endurecer sus posiciones, imaginar obst¨¢culos inexistentes, con el prop¨®sito de ganar peso. Es normal y no hay por qu¨¦ inquietarse".

Tensi¨®n entre los soldados

Sharon es optimista, pero sus soldados estacionados en L¨ªbano lo son menos. En medio de facciones que se combaten sin piedad, los soldados israel¨ªes se preguntan si defender a la patria es interponerse entre drusos y falangistas en las monta?as del Chuf D¨ªa tras d¨ªa caen los soldados de Israel, muertos o heridos, v¨ªctimas de minas, granadas o disparos. La televisi¨®n israel¨ª quiso entrevistar a los soldados de Tsahal (Ej¨¦rcito israel¨ª) que hac¨ªan de polic¨ªa en una aldea. De pronto un grupo de militares comenz¨® a cantar desde un balc¨®n: "Querido avi¨®n, te espero.

Aterriza en este campo y s¨¢canos de L¨ªbano. Combatimos por Sharon y nos meter¨¢n en un caj¨®n (ata¨²d)...". El Ministerio de Defensa ha pedido la suspensi¨®n del corresponsal militar de la televisi¨®n, Dan Scemama, "culpable" de haber filmado esta escena que revela un cierto ¨¢nimo en el Ej¨¦rcito israel¨ª.

Como es costumbre, los pol¨ªticos quieren romper el espejo que les devuelve una imagen poco halag¨¹e?a de ellos mismos.