Mejorar las relaciones Estados Unidos-China, principal objetivo de George Shultz
El secretario de Estado norteamericano, George Shultz, inici¨® el domingo una gira de doce d¨ªas por Jap¨®n, China y Corea del Sur, cuyo principal objetivo radica en el intento de estimular las relaciones entre Washington y Pek¨ªn. Relaciones particularmente fr¨ªas por la pol¨ªtica de la Administraci¨®n Reagan hacia Taiw¨¢n, los conflictos comerciales y el giro dado ¨²ltimamente por China, al reanudar sus conversaciones con los sovi¨¦ticos.
"No hay que esperar resultados importantes", dicen en el Departamento de Estado al comentar la primera gira de Shultz por el continente asi¨¢tico. Pero hay esperanzas de corregir la pol¨ªtica hacia China, espectacularmente inaugurada hace diez a?os con la visita del presidente Richard Nixon a Pek¨ªn y el restablecimiento de relaciones diplom¨¢ticas entre EE UU y China."El objetivo de la visita es revisar todo el conjunto de la tem¨¢tica de relaciones entre ambos pa¨ªses", comentan en Washington. Recuerdan el compromiso firmado entre China y Estados Unidos, el 17 de agosto pasado, seg¨²n el cual EE UU acept¨® limitar las ventas de armas a Taiw¨¢n, mientras China se comprometi¨® a utilizar m¨¦todos pac¨ªficos para intentar la aspiraci¨®n hist¨®rica de incluir Taiw¨¢n al Estado de China Popular. Sin embargo, a pesar del compromiso en torno a Taiw¨¢n -principal punto que determina el bar¨®metro de las relaciones EE UU-China-, la reuni¨®n, en octubre ¨²ltimo, en Nueva York, entre George Shultz y el ministro chino de Relaciones Exteriores, Huang Hua, fue descrita como fr¨ªa por ambas partes.
Bloqueo de tecnolog¨ªa
Desde entonces, la situaci¨®n de la cooperaci¨®n entre Washington y Pek¨ªn no dej¨® de complicarse por diferentes motivos. Cuando en 1981 el entonces secretario de Estado, Alexander Haig, visit¨® Pek¨ªn, formaliz¨® un acuerdo de principio para el aumento del comercio entre ambos pa¨ªses, incluido el suministro de material militar norteamericano a China. Pero, cuando Pek¨ªn se interes¨® por ciertos productos b¨¦licos americanos, la Administraci¨®n Reagan bloque¨® la mayor¨ªa de env¨ªos, por considerarlos de alta tecnolog¨ªa. Exist¨ªa, sin duda, un inter¨¦s manifiesto de no provocar las iras de Mosc¨² con la venta de sofisticadas armas norteamericanas a Pek¨ªn.
Problemas comerciales
Tambi¨¦n en el terreno de lo comercial, con un volumen de comercio del orden de los 5.000 millones de d¨®lares anuales, la situaci¨®n sufri¨® un deterioro cuando, hace un mes, Washington decidi¨® reducir las importaciones de productos textiles de origen chino. La r¨¦plica de Pek¨ªn fue inmediata, suspendiendo la reanudaci¨®n de contratos para la compra de algod¨®n, fibras sint¨¦ticas y soja a Estados Unidos.
Aunque Shultz no tratar¨¢ con detalle los escollos comerciales de las relaciones con Pek¨ªn, es posible que influya pol¨ªticamente a los expertos en las negociaciones comerciales para reducir las tensiones entre EE UU y Pek¨ªn.
En el terreno de lo pol¨ªtico, Shultz deber¨ªa corregir los errores anteriores de la Administraci¨®n Reagan en direcci¨®n a Pek¨ªn.
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