El Ayuntamiento de Sevilla ordena el cierre de tres dep¨®sitos de nafta
El alcalde de Sevilla, Luis, Uru?uela, ha decretado el cierre y precintado de los tres dep¨®sitos de nafta construidos por la Empresa Catalana de Gas y Electricidad, sin contar con la pertinente licencia municipal, en la barriada de El Porvenir. La corporaci¨®n municipal est¨¢ estudiando la posibilidad de proceder al traslado definitivo al extrarradio de la ciudad de todas las instalaciones de la compa?¨ªa, aunque su coste econ¨®mico excede con mucho de su capacidad financiera.El Pleno del Ayuntamiento sevillano celebrado a finales de 1982 decidi¨® realizar una inspecci¨®n sobre las denuncias presentadas por los vecinos de El Porvenir sobre la supuesta construcci¨®n de tres dep¨®sitos de nafta, a pesar de la negativa expresa del alcalde de Uru?uela a conceder la licencia correspondiente. La inspecci¨®n confirm¨® plenamente que la empresa Catalana de Gas hab¨ªa instalado, en efecto, los dep¨®sitos, con capacidad para 165 metros c¨²bicos de dicha sustancia.
En consecuencia, la alcald¨ªa ha dictado un decreto en el que se se?ala que "resultando que en el mencionado dictamen se deja constancia de tres dep¨®sitos con las caracter¨ªsticas expresadas, que en el momento de realizar la inspecci¨®n presentaban se?ales externas de estar acometi¨¦ndose su instalaci¨®n el¨¦ctrica, vengo en ordenar la inmediata clausura de los mismos, mediante el correspondiente precintado". De todas formas, la orden municipal no es ejecutiva, d¨¢ndose a la empresa la posibilidad de interponer recurso de reposici¨®n en el plazo de un mes o contencioso-administrativo dentro de los dos pr¨®ximos meses.
De todas formas, la rotunda actitud municipal no se refiere s¨®lo a estas instalaciones ilegales acometidas por Catalana de Gas, sino que afecta a la propia ubicaci¨®n de la compa?¨ªa en pleno casco urbano y en un barrio populoso cercano al parque de Mar¨ªa Luisa. A este respecto, y haci¨¦ndose eco de varias iniciativas ciudadanas, el Ayuntamiento de la capital andaluza ha encargado un estudio sobre los costes que supondr¨ªa la erradicaci¨®n de las instalaciones de esta empresa y su traslado a las afueras.
Coste elevado
El estudio, a¨²n no terminado, calcula estos costes en varios miles de millones de pesetas, muy por encima de las disponibilidades financieras municipales en el momento presente, lo que exigir¨ªa la ayuda de otros organismos p¨²blicos. Portavoces de Catalana de Gas han insistido, por su parte, en que sus instalaciones estaban ya all¨ª antes de que la ciudad creciese y las viviendas se acercasen a ellas, y que cualquier decisi¨®n administrativa tendr¨ªa que llegar acompa?ada de indemnizaci¨®n.
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