La pista de patinaje sobre hielo, una instalaci¨®n rentable para el Real Madrid

El a?o pasado utilizaron la pista de hielo 130.000 personas. El p¨²blico asistente -acompa?antes y familiares de patinadores en su totalidad- fue de 250.000. Esta asistencia supuso unos ingresos superiores a los cuarenta millones de pesetas. El elevado coste de mantenimiento de la pista permiti¨® s¨®lo 3.498.654 pesetas de beneficio.Esta instalaci¨®n no mantiene fines deportivos a nivel de competici¨®n, ya que ni el Madrid tiene equipo de hockey, ni permitir¨ªa la entrada de ning¨²n otro para entrenamientos. La actividad de otras manifestaciones deportivas que pudieran tener entrada en la pista tambi¨¦n es nula. El Real Madrid, como club deportivo, no puede dirigir sus actividades hacia fines lucrativos, pero lo que deja la pista de hielo le sirve, aunque m¨ªnimamente, para paliar d¨¦ficit de otras actividades.

Mantener un equipo de hockey sobre hielo le supondr¨ªa al Madrid cerrar la pista al p¨²blico durante unas horas al d¨ªa para celebrar entrenamientos y partidos, m¨¢s los gastos de mantenimiento del equipo. Los beneficios se convertir¨ªan en p¨¦rdidas, seg¨²n el club, por lo que prefiere mantener la utilizaci¨®n de la pista para recreo de sus usuarios, entre los que se encuentran practicantes del patinaje art¨ªstico que all¨ª han encontrado un lugar para perfeccionar sus movimientos.

El precio para patinar es de trescientas pesetas, mas cincuenta por el alquiler de patines si no se tienen. Los socios del club pagan cien pesetas, y los menores de catorce a?os, 75.

La ense?anza, un aspecto conflictivo

Cuando el Madrid construy¨® la pista de hielo, s¨®lo una minor¨ªa de los asistentes sab¨ªa patinar. La insistencia que mostraba la gente por llegar a hacerlo con cierta habilidad fue un caldo de cultivo para que hasta la ciudad deportiva se llegaran seudoprofesionales del patinaje que tras convertirse en centro de atenci¨®n con mil y una piruetas asombrosas, invitaban a los novatos a ense?arles todos los secretos para deslizarse con las cuchillas sobre el hielo.Esos profesores piratas fueron desapareciendo cuando dej¨® de hacer furor el patinar sobre hielo, y ¨²nicamente quedaron aquellos pocos, los que ten¨ªan mayor aceptaci¨®n, que hicieron de la ense?anza su profesi¨®n. El Madrid consinti¨® que esta actividad comercial se desarrollara sobre su pista, hasta el punto que habilit¨® unas horas, las de menor afluencia, para alquilar la instalaci¨®n a centros o profesores que impartieran sus ense?anzas.

El Madrid alquila su pista de hielo por 7.500 pesetas la hora. Actualmente la tiene alquilada a una profesora estadounidense, Jane Voich, y al C¨ªrculo Catal¨¢n. Lo que luego cobran a los alumnos por la ense?anza no lo controla el club. Unicamente no permite la ense?anza fuera de los horarios contratados, y ello ha supuesto la expulsi¨®n de Mar¨ªa ?lvarez, a la que incluso se le ha retirado el carn¨¦ de socia.

Mar¨ªa Alvarez goza de las s¨ªrnpat¨ªas de los asistentes por ser una veterana de la ense?anza en la pista de hielo del Madrid y tener prestigio como profesora. Le fue prohibida la entrada a las instalaciones el pasado mes, al suponer el club que segu¨ªa ejerciendo la enseflanza en horas p¨²blicas.

Ella atribuye su expulsi¨®n a que el club ha demostrado inter¨¦s por conceder la exclusiva ja Jane Voich, de la que dice que cobra ochocientas pesetas por cuarto de hora y cuatrocientas por la utilizaci¨®n de una zona de la pista. Afirma que el Real Madrid nunca le concedi¨® facilidades para alquilar la pista, punto que desmiente el club.

Mar¨ªa Alvarez estudia la posibilidad de querellarse contra el Real Madrid -el club reconoce que no puede demostrar que haya cobrado por dar clases- por su expulsi¨®n como patinadora y como socia. Recuerda que en etapas anteriores un socio madridista fue expulsado por aplaudir un gol del contrario; llev¨® el caso a los tribunales y tuvo que ser readmitido. "El Madrid, por lo visto, sigue en esta misma l¨ªnea", dice Mar¨ªa Alvarez, "puesto que a un socio no se le puede echar sin iniciar primero un expediente, que es lo que han hecho conmigo".