Primac¨ªa de los intereses estrat¨¦gico-nucleares en el Cono Sur
Tel Aviv cultiva el mercado argentino desde el golpe de Estado de marzo de 1976. Un a?o despu¨¦s, la Marina argentina -ac¨¦rrima partidaria del proyecto OTAS- adquiri¨® una cantidad indeterminada pero suficiente de misiles mar-mar a 90.000 d¨®lares cada uno, seg¨²n fuentes bien informadas. Los militares argentinos tambi¨¦n colaboraron, agregan, en la subcontrataci¨®n de traductores de interrogatorios con acento argentino, chileno, guatemalteco... que el Pent¨¢gono encarg¨® al Mossad israel¨ª.
El inter¨¦s estrat¨¦gico prioritario d¨¦ Israel en Argentina es "penetrar en la industria nuclear", rumbo en el que Buenos Aires ostenta liderazgo continental.Dos de las cabeceras de puente en los que conf¨ªa Te? Aviv -aparte de jefes de la Marina- son los ex ministros de Econom¨ªa Jos¨¦ Mart¨ªnez de Hoz, y de Interior general Albano Harguindeguy, quienes sualen viajar juntos a Sur¨¢frica.
Los militares argentinos plantearon a Isaac. Shamir su c¨®lera contra el rabino residente, el norteamericano Marshall Meyer, activo denunciante de desapariciones. "Alguien hablar¨¢ con ¨¦l", convino Ariel Sh¨¢ron. A continuaci¨®n, la comisi¨®n mixta analiz¨® un paquete de posibles compras de aviones, naves ligeras, misiles, m¨¢s la contrataci¨®n adicional de asesores. En Montevideo, Shamir se reuni¨® con sus embajadores en la regi¨®n para "coordinar la estrategia militar-comercial", dejando atr¨¢s las duras preguntas period¨ªsticas en Buenos Aires en tomo a las "similitudes entre las desapariciones en Am¨¦rica Latina y el genocidio en los campamentos palestinos de Sabra y Chatila".
De prosperar los regateos de la comisi¨®n mixta, Tel Aviv obtendr¨ªa un contrato por 2.500 millones de d¨®lares, especialmente por la venta de escuadrones de aviones KFIR, dijeron fuentes seguras. "Nos conformar¨ªamos por ahora con la mitad de eso, si resolvi¨¦ramos la cuesti¨®n de la tecnolog¨ªa nuclear", se?al¨® uno de los negociadores israel¨ªes.
La exportaci¨®n de armamento y servicios se convirti¨® en el eje de la econom¨ªa israel¨ª, cuya deuda exterior es de 25.000 millones de d¨®lares -superior a la de Polonia-y excede en un 50% al propio Producto Nacional Bruto. La ayuda norteamericana (1982) de, 2.800 millones de d¨®lares "es s¨®lo una aspirina", seg¨²n economistas israel¨ªes, "para un presupuesto nacional de 15.000 millones (con una inflaci¨®n del 140%).
La Organizaci¨®n del Pueblo en Armas (ORPA), una de las cuatro que en enero de 1982 cre¨® la Unidad Revolucionaria Nacional de Guatemala (URNG), denunci¨® en un documento que "Israel ha sido el ¨²nico proveedor de equipos b¨¦licos a Guatemala desde l976", entre ellos, "aviones ARAVA para despegue y aterrizaje en pistas reducidas", para lucha antiguerrillera. "En noviembre de 1977", agrega el Ej¨¦rcito, "recibi¨® todo tipo de armas y sustituy¨® el fusil Garand M-1 por los fusiles Galil, proporcionando Estados Unidos cinco millones de cartuchos para los mismos".
"En ese mismo a?o se compr¨® a Israel un sistema de transmisiones t¨¢cticas, y a finales de 1980 se instal¨® un circuito de cinco radares controlados y dirigidos por expertos israel¨ªes. Barcos procedentes de Israel cargados de armamento llegan ¨²ltimamente al puerto Santo Tom¨¢s de la Castilla de manera m¨¢s sistem¨¢tica. El 4 de noviembre de 1981 Israel instal¨® para el Ej¨¦rcito una escuela de transmisiones y electr¨®nica", afirma el documento.
En su toma de posesi¨®n, el jefe del Estado Mayor, general Benedicto Lucas Garc¨ªa, felicit¨® al embajador israel¨ª por "ese trabajo gigantesco". Por entonces, los miembros de la CIA y el Mossad buscaban un hombre id¨®neo para asumir el poder ante el desprestigio del presidente, general Romeo Lucas Garc¨ªa, por un desfalco de 65 millones de d¨®lares en un negocio de carreteras. Para el servicio secreto israel¨ª, el candidato deb¨ªa ser de la fuerza a¨¦rea, por razones comerciales obvias. El general (del aire) Efra¨ªn R¨ªos Montt, con su golpe de Estado del 23 de marzo de 1982, inauguraba "una nueva etapa de cooperaci¨®n".
Las zonas m¨¢s asoladas por el etnocidio se concentran en la franja transversal del norte, rica en petr¨®leo, uranio, cobre, cobalto, n¨ªquel, cromo, magnesio y asbesto, minerales cr¨ªticos de los que Estados Unidos sufre una casi total dependencia de importaciones. Despu¨¦s de la invasi¨®n que derroc¨® al r¨¦gimen democr¨¢tico del coronel Jacobo Arberiz, en 1954, la Hanna Minning Co. y la International Kinckel constituyeron el trust Exmibal, que explota la franja en sociedad con terratenientes y generales guatemaltecos.
En ese contexto, la Eagle Military Gear Overseas, de Tel Aviv, instal¨® sus oficinas en el hotel Cortijo Reforma, de Guatemala, un negocio que tiene sus riesgos. La guerrilla salvadore?a ejecut¨® al importador de armas y c¨®nsul honorario israel¨ª, Ernesto Liebes, como "criminal de guerra por el rol que jug¨® en el asesinato vil de miles de civiles salvadore?os".
Para la Administraci¨®n Reagan, la inserci¨®n israel¨ª en la zona funciona simplemente en el marco del "resguardo estrat¨¦gico del tri¨¢ngulo norte (Guatemala, El Salvador y Honduras) en el cuadro militar de la tercera frontera de Estados Unidos", seg¨²n el Pent¨¢gono define ese espacio ¨ªstmico y marino.
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