Posible chantaje del fallecido Calvi al Vaticano

El diario Repubblica revel¨® el jueves que la ¨²ltima. baza jugada, antes de su muerte, por Roberto Calvi y por su brazo derecho, Flavio Carboni, fue un chantaje al Vaticano y a su banco, el Instituto de Obras de la Religi¨®n (IOR). Se trata de un manojo de folios entregados al notario Francesco Lollio y que hasta ahora hab¨ªan permanecido escondidos en los cajones de la Fiscal¨ªa de Roma, acusada precisamente por la presidenta de. la comisi¨®n del Parlamento que investiga sobre la logia mas¨®nica P2, Tina Anselmi, de falta de colaboraci¨®n con la comisi¨®n.Aquellos que han podido examinar estos papeles -que ahora han pasado, por fin, a manos de los miembros de la comisi¨®n Anselmi- aseguran que se trata de una especie de carta de un grupo de fieles enviada al Papa en la que se explica la situaci¨®n del IOR frente al Banco Ambrosiano. Hab¨ªa de una deuda de 15.000 millones de pesetas y tambi¨¦n de la masoner¨ªa, de la P-2, de Sindona, del tr¨¢fico de armas... Los documentos han sido analizados como una advertencia al Vaticano, una especie de amenaza que se podr¨ªa traducir as¨ª: "Si ustedes no pagan, nosotros podemos hablar y explicar muchas cosas". No es posibIe a¨²n saber si una copia de dichas cartas fue o no enviada al Papa o si, ante la fuga y muerte de Calvi, se quedaron encerradas y secretas en el despacho del abogado romano.

La pista del Opus

Lo que m¨¢s impresiona es que dichos folios confirmar¨ªan las ¨²ltimas confesiones de la viuda y de los hijos de Roberto Calvi y tambi¨¦n ciertas conversaciones telef¨®nicas entre Carboni y Calv¨ª, examinadas por la comisi¨®n de la P-2. Demostrar¨ªan que Calvi se ve¨ªa acosado ante las deudas que se cern¨ªan corno un hurac¨¢n sobre su banco, y que antes de morir hizo todo lo posible por convencer al Vaticano -y, concretamente, al arzobispo Paul Marcinkus, presidente del IOR- para que le sacaran del atolladero en el que se encontraba; y que, como demuestra una de las conversaciones telef¨®nicas secretas con Carboni, estaba haciendo todo lo posible para que alguien -y aqu¨ª habla del Opus Dei- le comprara el 10% de las acciones del Ambrosiano para poder hacer frente a ciertos "plazos internacionales inminentes".