"Ha sido un ¨¦xito, todo el mundo ha visto que Solidaridad existe" afirma Walesa
"El Primero de Mayo ha sido un ¨¦xito", afirm¨® ayer el dirigente del sindicato clandestino polaco Solidaridad, Lech Walesa, en una declaraci¨®n a la agencia France Presse, desde su apartamento en Gdansk."La gente", subray¨® Walesa "ha respondido al llamamiento Todo el mundo puede ver que s¨®lo la fuerza les impidi¨® manifestarse como hubieran querido. Pero han demostrado verdaderamente que Solidaridad existe". Y concluy¨® "Estoy muy contento".
Lech Walesa fue a misa en una iglesia de su barrio, Zaspa, con su mujer, Danuta, cinco de sus siete hijos y su ch¨®fer, Mietek. Volvi¨® a casa con varios amigos.
Un poco m¨¢s tarde, la polic¨ªa antidisturbios, Zomo, rode¨® su domicilio. "El panorama es aterrador", aseguraba Danuta Walesa a la agencia Efe, refiri¨¦ndose a la cantidad de agentes de seguridad, totalmente pertrechados con elementos antidisturbios, que rodeaban el edificio de la calle de Pilotow, n¨²mero 17.
Seg¨²n la esposa de Lech Walesa, muchas personas se congregaron detr¨¢s de la barrera policial con la intenci¨®n de saludar al l¨ªder sindical. "Mi marido saluda desde la ventana a aquellos que pueden verlo. Jam¨¢s he vivido un Primero de Mayo como este", dijo.
La polic¨ªa intervino, poco antes de formar el cord¨®n de seguridad, debajo mismo de la ventana del domicilio del dirigente sindical, para dispersar a unas 2.000 personas que aclamaban a Walesa y al sindicato Solidaridad. Sin embargo, la presencia policial no disuadi¨® a los manifestantes, cuyo n¨²mero aument¨® todav¨ªa considerablemente.
En otros puntos de Gdansk se celebraron manifestaciones ilegales con mayor n¨²mero de participantes que la que tuvo lugar junto al domicilio de Walesa (que no hab¨ªa sido convocada). En la ciudad portuaria el l¨ªder sindical, que el pasado mi¨¦rcoles se incorpor¨® a su trabajo en los astilleros Lenin, goza de un gran prestigio.
La entrevista de Walesa con dirigentes clandestinos de Solidaridad y las varias detenciones (o retenciones) que sufri¨® poco despu¨¦s aumentaron el prestigio del dirigente sindical como l¨ªder del movimiento reivindicativo y de oposici¨®n al r¨¦gimen militar de Jaruzelski.
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