Espl¨¢ prefiere los gritos de "?torero, torero!"

El lunes pasado Paco Ojeda fue sacado a hombros de la plaza de Las Ventas mientras un p¨²blico enfervorecido le proclamaba el nuevo fen¨®meno del toreo. Luis Francisco Espl¨¢ sal¨ªa de la misma plaza a pie, acompa?ado por los gritos de "?torero, torero, torero!", y los aficionados exigentes celebraban el arte y la sabia lidia que hab¨ªa exhibido. Espl¨¢, un diestro alicantino de 25 a?os, se queda con la segunda manera de abandonar un ruedo."Ojeda cort¨® dos orejas muy merecidas y el p¨²blico hizo lo que ten¨ªa que hacer", dijo ayer Espl¨¢, que el pr¨®ximo s¨¢bado torea su tercera corrida de feria. "Sin embargo, fue una gran satisfacci¨®n marcharme con los gritos de ?torero!'. Fue m¨¢s sustancioso".

Aquella tarde, como en su primera actuaci¨®n, Espl¨¢ hab¨ªa dado una lecci¨®n completa de torer¨ªa: siempre perfectamente colocado, dio la lidia exacta que ped¨ªa cada uno de sus toros. Banderille¨® con sabidur¨ªa e hizo quites oportunos; hab¨ªa gracia, arte y valor, y mat¨® a su segundo toro recibiendo. "Una cosa es dar pases y otra torear", escribi¨® el cr¨ªtico de este peri¨®dico en una cr¨®nica titulada "Espl¨¢ es el torero".

No es la primera vez que algunos sectores del p¨²blico han subestimado la labor de este torero. Ya en la feria de julio del a?o pasado en Valencia, con un toro de Miura, Espl¨¢ hab¨ªa cuajado "la mejor faena de mi vida, fue cuando m¨¢s estuve a gusto con un toro, y sin embargo se produjo un fen¨®meno extra?o y el p¨²blico no se dio cuenta". S¨®lo despu¨¦s se valor¨® esta labor, y el diestro recibi¨® el premio para la mejor faena de esa feria.

Espl¨¢ ha tenido que recorrer un largo camino para torear as¨ª, Hijo de un novillero, ganadero y maestro de una escuela taurina, Espl¨¢ empez¨® a andar entre las reses cuando ten¨ªa muy pocos a?os. Despu¨¦s torear¨ªa vaquillas, "pero nunca con el prop¨®sito de ser torero". Tom¨® muy pronto la alternativa y en las primeras temporadas acus¨® una falta de sitio con los toros m¨¢s grandes. "Era un cambio bestial desde el novillo al toro cuajado, que est¨¢ saliendo m¨¢s (Juro que nunca. Tambi¨¦n me exig¨ªan mucho los p¨²blicos".

Pero poco a poco Espl¨¢ ha ido cuajando en un torero muy completo. Una de las cosas que m¨¢s admiran los p¨²blicos es su amplio repertorio, con muchos lances que estaban en desuso. "He estudiado revistas y pel¨ªculas antiguas", dice Espl¨¢. "El torero que m¨¢s admiro es Joselito. Tambi¨¦n conoce otro arte: es estudiante de tercero en Bellas Artes, carrera que pronto piensa terminar.

"Primero intento dominar a los toros, luego hacer arte", dice. "Pero cuanto m¨¢s tiempo estoy delante de los toros, m¨¢s me doy cuenta de una cosa: de lo poco que s¨¦ de este oficio".