Documentos secretos de Carter llegaron a manos de Reagan en la campa?a electoral

Ronald Reagan podr¨ªa haberse servido de documentos de trabajo confidenciales del presidente Jimmy Carter para adelantarse a la estrategia de la campa?a electoral dem¨®crata y conseguir ser elegido presidente de Estados Unidos en 1980. Responsables de la Casa Blanca reconocieron el jueves haber tenido en sus manos tales documentos, aunque dicen no recordar como llegaron hasta ellos. El ex director de la campa?a de Carter, Robert Strauss, ha pedido al Gobierno que nombre un investigador especial. Ser¨ªa, en su opini¨®n, "la mejor manera de servir al inter¨¦s p¨²blico".En un libro recientemente publicado, el corresponsal pol¨ªtico del semanario Time en la Casa Blanca, Laurence Barrett, relata este episodio y sugiere que un topo de Reagan en el equipo de Carter proporcion¨® a los estrategas del entonces candidato presidencial un clasificador con documentos dirigidos al presidente y especialmente elaborados con vistas al debate televisado que mantuvieron ambos candidatos.

En cartas de respuesta a un congresista que pidi¨® explicaciones sobre el asunto, colaboradores pr¨®ximos a Reagan admitieron haber visto el dossier y reconocen que fue utilizado para la preparaci¨®n del candidato. Precisan que trataba sobre temas pol¨ªticos, pero que no conten¨ªa revelaciones sobre la estrategia de la campa?a de Jimmy Carter.

Estas cartas fueron hechas p¨²blicas por la Casa Blanca el jueves en Chicago. Proceden del secretario general de la Casa Blanca, James Baker, del director del presupuesto, David Stockman, y del consejero presidencial para relaciones p¨²blicas, David Gergen, que jugaron un papel importante en la campa?a de Reagan. El portavoz Larry Speakes declar¨® por su parte que el presidente no tuvo conocimiento de la existencia de tales documentos.

Contradicciones

El actual director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), William Casey, uno de los dirigentes de la campa?a de Ronald Reagan, neg¨® haber estado al corriente de la existencia de los textos. "Puedo asegurar", ha dicho, "que el Estado Mayor de la campa?a jam¨¢s contempl¨®, suscit¨® o autoriz¨® tentativas para procurarse informaciones de este tipo".

Por su parte, Baker afirm¨®: "Recuerdo el libro, pero no creo que fuera material electoral estrat¨¦gico. De lo mas que me acuerdo es de que me lo dio William Casey sugiri¨¦ndome que podr¨ªa ser ¨²til en el debate televisivo". Casey neg¨® recordar que, ni ¨¦l, ni sus cinco ayudantes en la campa?a, hubiera recibido tal material. En el citado debate, Reagan pareci¨® salir ganador y su popularidad aument¨® considerablemente.