El fiscal pidi¨® 45 a?os para la acusada por el asesinato del beb¨¦ de Canovelles

El ministerio fiscal reclam¨® ayer que se impusiera una pena total de 45 a?os de prisi¨®n, tres a?os m¨¢s de los que hab¨ªa solicitado en su calificaci¨®n provisional, a Luisa Conill Oms, por los presuntos delitos de asesinato y detenci¨®n ilegal de la ni?a Ana Mar¨ªa Puerto, de 11 meses de edad. Con esta modificaci¨®n, a la que se sum¨® el abogado querellante finaliz¨® ayer por la tarde la vista oral del juicio, salpicada de incidentes por parte del p¨²blico.

Sin darse cuenta, se hab¨ªan re partido la sala. En un extremo, los familiares y amigos de la acusada; en el otro, los de de la ni?a secuestrada. En el centro, una masa compacta de periodistas funcionarias de la Trinidad, abogados, despistados y curiosos Las primeras escaramuzas se hab¨ªan producido el martes al mediod¨ªa, al finalizar la sesi¨®n matinal, cuando Luisa Conill Oms se vio obligada a pasar bajo un arco de insultos y amenazas. Volvieron a repetirse los incidentes aquella misma noche, a las 9.30 al acabar la sesi¨®n, cuando Luisa Conill Oms, custodiada por la Polic¨ªa Nacional, enfil¨® el pasillo. Un grupo de mujeres se acerc¨® hasta ella y empez¨® a llamarle "asesina" y "zorra". Alguien, por encima de todas las voces, grit¨® "Si te absuelven te pincharemos".En la sesi¨®n de ayer se repartieron de nuevo las zonas y los gritos. Una mujer, desde el centro de la sala, en pleno juicio mientras un testigo estaba declarando, empez¨® a increpar al tribunal repitiendo una y otra vez hasta la saciedad "El presidente no es parcial, no es parcial". Desde la otra punta se alz¨® un joven y respondi¨® con un "calla guarra", que fue seguido de un silencio y de una tajante orden de los magistrados mandando que las dos personas abandonaran la sala.

Continuaron los incidentes durante toda media ma?ana cuando una de las testigos, despu¨¦s de prestar declaraci¨®n, abandon¨® el estrado insultando a la acusada, "Puta, puta puta...", mientras Antonio Puerto, el padre de la ni?a asesinada, abrazaba a su mujer intentando calmar su histeria.

En busca de las dudas

Cuando se registraron estos gritos, hac¨ªa ya rato que el ahogado defensor, Luis Ch¨ªa hab¨ªa abandonado la infructuosa b¨²squeda del tambor de jab¨®n en polvo en el que hab¨ªa sido metido el cuerpo de la peque?a. Quiz¨¢s el letrado Ch¨ªa hab¨ªa abandonado su b¨²squeda infructuosa porque al estrado le hab¨ªa llegado ya el comentario del alcalde socialista de Canovelles, haciendo responsable de esta desaparici¨®n al equipo de desratizaci¨®n municipal ya que "quince d¨ªas despu¨¦s de los hechos fueron al local donde apareci¨® la ni?a, se encontraron con el tambor de detergente y lo tiraron a la basura".Continuaba, sin embargo, el letrado Ch¨ªa interpelando sobre los datos inconexos de la causa, sobre las llaves perdidas o sobre las irregularidades procesales, intentado de esta manera levantar un muro de dudas, con las que apuntalar el principio constitucional de in dubio pro reo.

La tediosa y crispada sesi¨®n testifical -m¨¢s de 60 personas pasaron por la sala- finaliz¨® a las 14.30 del mediod¨ªa, cuando las conclusiones provisionales fueron elevadas a definitivas, con ligeras modificaciones. El ministerio fiscal, que hasta aquel momento hab¨ªa asegurado que Luisa Conill Oms era responsable de un delito de secuestro y otro de asesinato y que proced¨ªa imponerle 42 a?os de prisi¨®n, rectific¨® y se?al¨® que, en realidad, se hab¨ªa cometido un delito de detenci¨®n ?legal y otro de asesinato y que la pena deb¨ªa incrementarse en tres a?os de prisi¨®n.

El letrado querellante, Juan Antonio Roqueta, acept¨® tambi¨¦n la modificaci¨®n.

Luis Ch¨ªa, el letrado defensor, que momentos antes hab¨ªa reclamado infructuosamente una investigaci¨®n suplementaria y el consecuente aplazamiento para aclarar los puntos oscuros del caso, reivindic¨® la inocencia de su acusada y anunci¨® ya su intenci¨®n de acudir al Supremo y al Tribunal Constitucional, si fuera necesario.