El poeta de la vida y la muerte
El curso que dirige Koldo Michelena en homenaje a Jos¨¦ Mar¨ªa Aguirre, Xabier Lizardi, el poeta de la vida y la muerte, en el curso de verano donostiarra, supone el reconocimiento definitivo de una de las figuras m¨¢ximas de la literatura en eusquera y permite la divulgaci¨®n de la obra de este autor, muerto hace 50 a?os y hasta ahora pr¨¢cticamente desconocido.Dominado por la obsesi¨®n permanente de dotar al eusquera de los recursos de expresi¨®n po¨¦tica de que carec¨ªa esta lengua, Xabier Lizardi empezar¨¢ su vida en renovar el lenguaje literario asumiendo formas de los distintos dialectos hasta crear un eusquera conciso, depurado y altamente expresivo que, en palabras de Gabriel Aresti, le convierte en el poeta cumbre de la literatura vasca.
Junto con Orixe y Lauxaeta, el poeta fusilado en Vitoria en 1937, Xabier Lizardi forma parte de la generaci¨®n que llev¨® a cabo el renacimiento cultural vasco, rompiendo con el romanticismo trasnochado de la llamada poes¨ªa culta y abandonando la recopilaci¨®n de versos cantados (bertsolarismo), ¨²nica forma hasta entonces que la poes¨ªa en eusquera.
Estrechamente relacionados con Garc¨ªa Lorca, con quien Lauxaeta mantuvo una profunda amistad, los tres j¨®venes poetas vascos sintonizan f¨¢cilmente con la generaci¨®n del 27 y asumen en cierta forma el gongorismo dentro de sus planteamientos de renovaci¨®n del lenguaje. La tensi¨®n continua entre la vida y la muerte que Lizardi proyecta a trav¨¦s del simbolismo en su universo afectivo o en las referencias al futuro del pueblo vasco y del propio eusquera caracteriza sus dos obras po¨¦ticas, Biotz begiatan (El coraz¨®n en los ojos) y Umezurtz olerkiak (Poes¨ªas hu¨¦rfanas), y est¨¢ presente asimismo en su obra teatral.
Lizardi aborda frecuentemente el paisaje vasco a trav¨¦s de descripciones minuciosas que inevitablemente le conducen a plantearse el futuro del pueblo vasco.
Miembro de la ejecutiva provincial del PNV, partido en el que, a su juicio, se manifestaba entonces el resurgir pol¨ªtico paralelo al renacimiento cultural vasco, Lizardi aparece como un hombre polifac¨¦tico, dotado para la m¨²sica, los idiomas y la direcci¨®n de empresa.
Natural de Zarauz, falleci¨® en. Tolosa a los 36 a?os, v¨ªctima de una afecci¨®n, pulmonar. Hombre poco comunicativo, pero jovial y sincero en el trato, consigui¨® el reconocimiento de parte de sus empleados que, como homenaje p¨®stumo, trasladaron su cad¨¢ver a hombros. El d¨ªa de su boda, trabajadores de su empresa, en su mayor¨ªa afiliados a la CNT, le entregaron un regalo en se?al de amistad, no sin dejar bien claro, para que la historia no los confundiera, que este gesto iba dirigido a la persona de Jos¨¦ Mar¨ªa Aguirre, Xabier Lizardi, y no su patr¨®n.
El curso de Koldo Michelena, dedicado a la figura de este autor, da continuidad a los actos de homenaje que han tenido lugar a lo largo del presente a?o y que finalizar¨¢n el 1 de octubre con la colocaci¨®n en Tolosa de una escultura, obra de Eduardo Chillida.
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