El presunto asesino de una mujer guatemalteca en Potes reconstruy¨® el crimen con gran serenidad
Manuel Gonz¨¢lez Rodr¨ªguez, de 38 a?os de edad, vecino de la localidad c¨¢ntabra de Pido, se ha odeclarado autor del intento de robo, cometido el pasado d¨ªa 12 en un prado cercano a la carretera que conduce a Potes, en el que result¨® muerta la s¨²bdita guatemalteca Mar¨ªa Teresa Z¨²?iga, y herido muy grave su acompa?ante, Mariano Pe?a, que se encuentra actualmente internado en la unidad de cuidados intensivos del centro m¨¦dico nacional Marqu¨¦s de Valdecilla. En la tarde del s¨¢bado, el detenido, acompa?ado del juez y de fuerzas de la Guardia Civil, procedi¨® a la reconstrucci¨®n de los hechos, aparentando en todo momento una total serenidad.La detenci¨®n del presunto asesino de la joven se produjo el pasado jueves, una vez que la Guardia Civil consigui¨® reunir pruebas su ficientes para incriminarle, entre ellas los casquillos de la carabina de calibre 22 utilizada por el detenido, y que fue la misma con que tres d¨ªas antes de acabar con la vida de Mar¨ªa Teresa Z¨²?iga ha b¨ªa amenazado a una pareja bilba¨ªna, que se encontraba en aquella zona, y a la que oblig¨® a entregarle el dinero que portaba.
Una ronda de identificaci¨®n ole voces, celebrada en el cuartel de la Guardia Civil de Potes, permiti¨® que uno de los j¨®venes asaltados reconociese la voz del detenido como la del autor del robo de que hab¨ªa sido objeto, procedi¨¦ndose poco despu¨¦s a un registro en el domicilio de Gonz¨¢lez Rodr¨ªguez, donde fue hallada el arma utilizada en ambos robos.
Resistencia
Seg¨²n la versi¨®n ofrecida por la Guardia Civil, que coincide con la ofrecida el pasado s¨¢bado por EL PAIS, la resistencia de la pareja de j¨®venes, al ser sorprendidos en un prado cercano a la carretera, que conduce a Potes, fue la causa de que Gonz¨¢lez Rodr¨ªguez disparase contra ellos.
Con cierta tosquedad y sin pausas, el deltenido hizo, finalmente, una completa declaraci¨®n antelas pruebas acumuladas en su contra, sin que en ning¨²n momento manifestara arrepentimiento ante lo que repetidamente califica de "marranada", refiri¨¦ndose al asesinato de la. joven guatemalteca.
El detenido, conocido en la zona por Xinf¨², alternaba las tareas de jornalero con las de cazador furtivo, y no se descarta que pudiera haber cometido otros robos en la comarca lebaniega, y m¨¢s concretamente en los alrededores del telef¨¦rico de monta?a de Fuente De, donde la afluencia de turistas es numerosa, dado que la zona es conocida perfectamente por el presunto asesino.
Habitante solitario de una cabafla que sus convecinos definen como pocilga, se confiesa capaz de vivir con 1100 pesetas al d¨ªa "para vino y tabaco, aunque siempre he bebido poco", precisando que el alimento "me lo da el monte", a pesar de lo cual se?ala que la caza ilegal de un venado o un corzo le produc¨ªa unos beneficios por ejemplar de hasta 30.000 pesetas.
Para los portavoces de la Guardia Civil, que sigui¨® el caso desde un principio, la personalidad de Gonz¨¢lez Rodr¨ªguez es extremadamente confusa, y no se descarta que sea preciso recurrir a un dictamen psiqui¨¢trico para esclarecer el caso.
En el momento de ser trasladado al lugar donde dispar¨® contra Mar¨ªa Teresa Z¨²?iga y Mariano Pe?a, el presunto asesino no tuvo reparo en narrar a los informadores, de forma r¨¢pida y sin matices, su dif¨ªcil infancia. "Mi padre se ahorc¨® en casa cuando yo ten¨ªa un a?o. La verdad es que ¨¦l y mi madre, que eran parientes no s¨¦ en qu¨¦ grado, no llegaron a casarse porque hubo alguna oposici¨®n. Despu¨¦s, ella al casarse con otro hombre me dio cinco hermanos, que est¨¢n por Vizcaya trabajando. No me llevaba bien con mi padrastro y decid¨ª volver a Li¨¦bana. Tampoco me entend¨ªa yo con ella".
De Gonz¨¢lez Rodr¨ªguez se sospecha que tenga que ver con la desaparici¨®n el pasado mes de agosto en las cercan¨ªas del telef¨¦rico de Fuente De de un veraneante madrile?o, cuyo paradero a¨²n se desconoce, aunque tal extremo no quiso ser comentado por los portavoces de la Guardia Civil
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