La situaci¨¢n de Pitarch

Van a cumplirse los dos meses y un d¨ªa de prisi¨®n a que fue conde nado el capit¨¢n Jos¨¦ Luis Pitarch en Alcal¨¢ de Henares, con motivo de una entrevista que le hizo la peneuvista revista Euzkadi, la cual fue considerada falta grave (cuando arrestan a quienes atacan, en El Alc¨¢zar, al r¨¦gimen democr¨¢tico suelen considerarlo falta leve, pero el embudo es el embudo). El expediente judicial seguido para sancionarle ofende al Estado de derecho y a muchas cosas m¨¢s. Se le hizo la lectura de cargos por una determinada falta y se le sancion¨® por otras dos diferentes; una de estas dos se apreci¨® Volando la, irretroactividad de la ley penal, para considerarle reincidente por una falta que no exist¨ªa en el CJM cuando ¨¦l cometi¨® la primera falta que da lugar a la falsa reincidencia; el juez militar, en la notificaci¨®n del arresto, se neg¨® a incluir los recursos a que tiene derecho, despreciando varias sentencias del Tribunal Constitucional invocadas por Pitarch, las cuales determinan el derecho a recurrir (inexistentes en el CJM), por lo cual la notificaci¨®n es nula y su estancia en Alcal¨¢ detenci¨®n ilegal, al sancionarle se viol¨® tambi¨¦n la 'presunci¨®n de inocencia" del art¨ªculo 24 de la Constituci¨®n, puesto que la entrevista fue elaborada y extractada por varios redactores de la revista, seg¨²n declar¨® su director ante el juez militar, haci¨¦ndose expresamente responsable legal y moral, mientras que Pitarch no se reconoci¨® autor del texto tal como apareci¨® y sin que se aportasen al expediente ni el original de la entrevista ni la declaraci¨®n del periodista entrevistador. ?stos y m¨¢s atropellos jur¨ªdicos ha sufrido Pitarch. Ni siquiera le llaman por su nombre en la sentencia: le llaman Pitarcha.

Jos¨¦ Luis Pitarch tl¨¦v¨® queja al Defensor del Pueblo. La Asociaci¨®n Pro Derechos Humanos y otras asociaciones, lo ni?smo. Pitarch ha recurrido al Tribunal Constitucional. El Defensor del Pueblo ha hablado con el ministro de Defensa. La opini¨®n p¨²blica ha preguntado en muchos peri¨®dicos por qu¨¦ tanta irregularidad y persecuci¨®n. El fiscal togado del Consejo Supremo de Justicia Militar ha dicho al Defensor del Pueblo que "abr¨ªa una investigaci¨®n...". Pero Pitarch est¨¢ acabando de cumplir los dos meses y un d¨ªa sin ning¨²n resultado de tanta gesti¨®n, tanta investigaci¨®n y tan buenas palabras, sin que hayan accedido a su petici¨®n de dejar en suspenso la ejecuci¨®n de la sanci¨®n hasta que se aclarasen los numerosos puntos oscuros del expediente. Se dir¨ªa que no hay poder suficiente en Espa?a para esto. O que Pitarch simboliza demasiadas cosas. Como tampoco parece haber poder o derecho para que el actual ministro de Defensa le conteste a,un recurso que present¨® en mayo de 1980 contra un arresto de seis meses, al que no quisieron contestar ni Rodr¨ªguez Sahag¨²n ni Oliart, y por el cual el PSOE interpel¨® a este ¨²ltimo, en junio de 1981, en el Congreso". Ya est¨¢ bien, se?ores./

, esposa de Jos¨¦ Luis Pitarch. Madrid.