El incentivo material, motor del desarrollo econ¨®mico en la Rep¨²blica Popular China
A finales de octubre, un despacho de la agencia oficial de noticias Xinhua (Nueva China) anunciaba que, desde ahora, los productos industriales de mejor calidad tendr¨¢n un precio m¨¢s caro que aqu¨¦llos otros bienes de calidad inferior. Esta decisi¨®n, aprobada por el Consejo de Estado, puede sonar a perogrullada en Occidente, pero es un ejemplo m¨¢s de c¨®mo las nuevas autoridades de Pek¨ªn tratan de racionalizar el aparato productivo aun a costa de desviarse de la ortodoxia mao¨ªsta.El pragmatismo de Deng Xiaoping va sustituyendo a las utop¨ªas visionarias de Mao y al ultraizquierdismo de la llamada banda de los cuatro. Para modernizar China y alcanzar su meta de cuadruplicar la producci¨®n industrial y agr¨ªcola para el a?o 2.000, Deng ha cambiado el orden de prelaciones de la econom¨ªa nacional en este pa¨ªs, el m¨¢s poblado del mundo, que apenas ha sobrepasado la raya de la pobreza.
Influidos por sus, entonces, hermanos sovi¨¦ticos, los l¨ªderes de la revoluci¨®n china siguieron en la d¨¦cada de los 50 la tesis de que la industria pesada, y especialmente la producci¨®n de acero, era la base del desarrollo. Esto supuso, seg¨²n los actuales dirigentes chinos, la carest¨ªa de bienes de consumo, el destino err¨®neo de muchas inversiones y un crecimiento excesivo de la burocracia.
El nuevo orden de prioridades otorga el m¨¢ximo inter¨¦s a la agricultura (un 80% de la poblaci¨®n china vive en el campo), seguida de la industria ligera, la producci¨®n de bienes de consumo y, por ¨²ltimo, la industria pesada.
No se trata de una f¨®rmula nueva, porque estaba ya en la "estrategia para el desarrollo de China", una serie de 23 art¨ªculos que, entre 1956 y 1962, escribiera Chen Yun y que ahora han sido publicados. Chen, de 78 a?os, es uno de los hombres de confianza de Deng, con quien comparte su pragmatismo y sus deseos de modernizar el pa¨ªs a marchas forzadas.
Para un observador occidental, que ha vivido todo el cambio registrado en China en los ¨²ltimos cuatro a?os, "Deng Xiaoping ha dejado a un lado las obsesiones igualitarias de Mao y se preocupa m¨¢s por elevar el nivel de vida, por incorporar t¨¦cnicas modernas mediante la llamada pol¨ªtica de puertas abiertas, aunque eso le cueste ganarse las iras de los sectores m¨¢s tradicionales del partido, que principalmente se encuentran en el Ej¨¦rcito".
Aquellas viejas consignas de Mao, como "el acero es la producci¨®n clave", o "el grano es la producci¨®n clave", han dejado paso a otra no escrita, pero evidente: la clave del desarrollo est¨¢ en el incentivo material.
El llamado sistema de responsabilidad en la producci¨®n, que se aplica ya en la mayor parte del territorio chino, y todo una gama de bonificaciones, primas de productividad y permisos para vender en el mercado los excedentes agr¨ªcolas son los instrumentos de esa nueva pol¨ªtica econ¨®mica. Todo ello hubiera sido anatema hace s¨®lo unos a?os.
Alabanzas en la comuna
En la comuna Sha Jiao, en la ciudad de Fushan, a unos 30 kil¨®metros de Guangzhou, la antigua Cant¨®n, todo son alabanzas para el nuevo sistema. S¨¦ trata de una comuna rica, que se beneficia de la tierra f¨¦rtil del estuario del r¨ªo de las Perlas, y que combina la agricultura con la piscicultura y la industria ligera, como la producci¨®n de seda y papel. Son 72.000 personas, agrupadas en 25 brigadas productivas y 332 equipos de trabajo.Heo, uno de los responsables de la comuna, se vuelca dando datos estad¨ªsticos de c¨®mo la productividad ha aumentado, no s¨®lo en relaci¨®n a 1949, a?o del triunfo de la revoluci¨®n, sino desde que, a finales de 1978, el tercer pleno del und¨¦cimo Comit¨¦ Central del partido hizo posibles las reformas que dan m¨¢s prioridad a la agricultura.
En los ¨²ltimos a?os, las familias campesinas han visto aumentar sus ingresos de forma notable y ya todas las familias tienen, al menos, una bicicleta. "Y todo gracias al sistema de responsabilidad", dice Heo.
Un ejemplo de c¨®mo se aplica este sistema es la factor¨ªa de producci¨®n de seda. Varios centenares de obreros, mujeres en su gran mayor¨ªa, trabajan all¨ª ocho horas diarias, con maquinaria atrasada y bajo el calor sofocante de los ingenios de vapor.
Ocho grados en la escala salarial
El sueldo mensual es de 50 yuanes (unas 4.000 pesetas), pero existe la posibilidad de obtener una prima de 25 yuanes (2.000 pesetas m¨¢s) si se supera la producci¨®n m¨ªnima. Uno de los responsables explica que el 90% de las trabajadoras consigue la bonificaci¨®n todos los meses. A quienes no cubran la productividad media se les descuenta del sueldo una cantidad variable, pero que, en ning¨²n caso, puede ser superior al 20% del salario mensual.A unos kil¨®metros de all¨ª, en la f¨¢brica de cer¨¢mica de Shiwan, la prima es de 30 yuanes al mes (2.400 pesetas) y el sueldo medio de 50 yuanes (4.000 pesetas). La aplicaci¨®n de descuentos, bonificaciones y las distintas categor¨ªas de trabajos componen una escala salarial con ocho grados, que van desde los 38 yuanes al mes (unas 3.000 pesetas) de los que menos cobran hasta los 105 yuanes (8.400 pesetas) de los que m¨¢s dinero ganan cada mes.
Junto a este sistema de responsabilidad en la industria, los campesinos han obtenido permiso para cultivar sus propias parcelas y para vender directamente en el mercado los excedentes que obtengan sobre una cuota de producci¨®n prefijada por las autoridades econ¨®micas.
Cuota de producci¨®n
Mao Zedong se opuso siempre a que los campesinos pudieran cultivar tierras en su propio beneficio, e incluso a que decidieran qu¨¦ productos sembrar. La r¨ªgida, y con frecuencia irracional, planificaci¨®n centralizada llev¨® a desastres econ¨®micos como el del "gran salto hacia delante", en 1956 y a?os sucesivos, a la carest¨ªa y al desabastecimiento de las ciudades.En los ¨²ltimos a?os, muchas comunas han sustituido el sistema de puntos de trabajo por el de una cuota de producci¨®n que permite a los campesinos comercializar sus excedentes. Esto ha supuesto un alza de precios de algunos productos, pero ha terminado con el racionamiento de muchos de ellos y, sobre todo, ha elevado notablemente el nivel de vida en el campo, lo que se ha reflejado en seguida en la mayor demanda de bienes de consumo, como relojes de pulsera, bicicletas e incluso televisores.
En sus Obras escogidas, de las que se editan actualmente millones de ejemplares, Deng Xiaoping explica claramente los objetivos de la reforma en curso: "En el campo econ¨®mico debe aumentar la productividad y mejorar los niveles materiales y culturales del pueblo; pol¨ªticamente, debe promover la democracia popular y, en t¨¦rminos de organizaci¨®n, crear un mayor n¨²mero de j¨®venes y competentes revolucionarios que trabajen por la modernizaci¨®n del pa¨ªs". La reforma ha supuesto tambi¨¦n la desaparici¨®n de aquellos h¨¦roes del trabajo de estilo estalinista, aunque algunas f¨¢bricas todav¨ªa eligen trabajadores modelo. El principio ut¨®pico de "a cada cual seg¨²n su necesidad" ha sido reemplazado por el m¨¢s pragm¨¢tico de "a cada cual seg¨²n su capacidad; a cada cual seg¨²n su trabajo".
Pol¨ªtica de 'puertas abiertas'
Chou Zuo Hua, secretario general adjunto del Gobierno de la provincia de Guangdong, una de las m¨¢s ricas de China, poblada por 60 millones de habitantes, dice que con el sistema de responsabilidad y la pol¨ªtica de puertas abiertas, los ingresos de los campesinos han subido en esta provincia un 90% desde 1979 y los de los trabajadores urbanos un 60%.Guangdong, la provincia vecina a los enclaves capitalistas de Hong Kong y Macao, goza de un trato especial y se han creado en ella tres zonas de desarrollo tendentes a crear un colch¨®n de riqueza entre la pr¨®spera Hong Kong y el resto del pa¨ªs para cuando la colonia brit¨¢nica retorne a la soberan¨ªa china, dentro de 14 a?os.
En Guangdong hay m¨¢s divisas extranjeras, m¨¢s turismo, m¨¢s autonom¨ªa econ¨®mica y mayor nivel de vida, adem¨¢s de m¨¢s tolerancia pol¨ªtica y cultural.
?Qu¨¦ piensa un comunista. como Chou Zuo Hua de estas diferencias en los salarios mensuales entre trabajadores, entre la riqueza de unas provincias y otras que potencia la reforma? "Bueno... es la pol¨ªtica de nuestro partido. Algunas personas y algunas zonas en China pueden ser ricas antes que otras", responde.
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