El Centro Dram¨¢tico Nacional recupera el 'humor inveros¨ªmil' de Jardiel Poncela
La programaci¨®n de la presente temporada del Centro Dram¨¢tico Nacional, en el teatro Mar¨ªa Guerrero, de Madrid, coloca entre La vida del rey Eduardo II de Inglaterra, de Marlowe y Brecht, y Luces de bohemia, de Valle-Incl¨¢n, una de las obras m¨¢s representativas del humor inveros¨ªmil del dramaturgo y novelista Enrique Jardiel Poncela (1901-1952). El director Jos¨¦ Carlos Plaza, premio nacional de Teatro 1983, estrena hoy su versi¨®n de Elo¨ªsa est¨¢ debajo de un almendro, "una funci¨®n muy completa, donde est¨¢n el amor, la locura y el disparate".
El montaje de Jos¨¦ Carlos Plaza de la obra Elo¨ªsa est¨¢ debajo de un almendro, de Enrique Jardiel Poncela, con escenograf¨ªa de Claudio Segovia y H¨¦ctor Orezzoli, m¨²sica de Mariano D¨ªaz y un reparto de 31 actores, entre los que figuran ?ngel Picazo, Mary Carmen Prendes, Rafael Alonso, Enriqueta Carballeira, Jos¨¦ Luis Pellicena, Jos¨¦ Pedro Carri¨®n, Pilar Bayona y Antonio Valero, se presenta en el mismo escenario del teatro Mar¨ªa Guerrero, donde Jos¨¦ Luis Alonso hizo su versi¨®n en 1962, con Antonio Ferrandis, Jos¨¦ B¨®dalo y Amelia de la Torre.La pieza se estren¨® en 1940, en el teatro de la Comedia, de Madrid, con Elvira Noriega, Guadalupe M. Sampedro, Mariano Azaha, Jos¨¦ Orjas, Carlos Lemos, Fernando Fern¨¢n G¨®mez, como meritorio, y Mar¨ªa Asquerino, en el papel de botones.
Jardiel Poncela, autor de unas 30 obras, entre la que destacan Usted tiene ojos de mujer fatal (1933), Angelina o el honor de un brigadier (1934), Cuatro corazones con freno y marcha atr¨¢s (1936), Los ladrones somos gente honrada (1941), Los habitantes de la casa deshabitada (1942) y Blanca por fuera y rosa por dentro (1943) y Los tigres escondidos en la alcoba (1949), intent¨® renovar el teatro c¨®mico tradicional con su propuesta de un teatro de lo inveros¨ªmil, donde son posibles la fantas¨ªa, la poes¨ªa, la locura, el humor, lo imposible y la poes¨ªa. Seg¨²n el dramaturgo "...a esa risa joven y sagaz, cuyo esqueleto estaba hecho de inverosimilitud y de imaginaci¨®n, inyectarle en las venas lo fant¨¢stico y llenarle el coraz¨®n de ansia po¨¦tica".
Jos¨¦ Carlos Plaza seleccion¨® Elo¨ªsa est¨¢ debajo de un almendro por considerar que es la obra m¨¢s completa de Jardiel, "un autor que debe ser conocido por las nuevas generaciones, al identificarse con el ansia de evasi¨®n y la ruptura con una sociedad represora", junto a las posibilidades del trabajo actoral, "lo m¨¢s hermoso del teatro".
La nueva lectura de la obra de Jardiel realizada por Jos¨¦ Carlos Plaza tiene, seg¨²n el director, dos l¨ªneas generales: una est¨¦tica y otra dramat¨²rgica. "Leyendo Elo¨ªsa... me d¨ª cuenta que el tercer acto era Rebeca y Cumbres borrascosas, uniendo esta referencia cinematogr¨¢fica al pr¨®logo del cine planteo la obra como la pel¨ªcula que ven estos espectadores. Tiene un principio muy naturalista de la posguerra espa?ola, con personajes muy caracter¨ªsticos de los a?os del hambre. Frente a una primera apreciaci¨®n de la pieza como una gran farsa o disparate c¨®mico hay un tratamiento de la locura muy especial, como centro de libertad e imaginaci¨®n, como un rompimiento de la vida cotidiana".
El "hacer una pel¨ªcula con una obra de teatro" lleva a planificar los decorados, la iluminaci¨®n y la m¨²sica en una visualizaci¨®n cinematogr¨¢fica. El director dice que "el texto me ha marcado y no me he separado ni un mil¨ªmetro de Jardiel", aparte de que considere la evoluci¨®n del teatro en una sociedad m¨®vil, "no s¨®lo a nivel visual sino tambi¨¦n emocional, lo mismo que no concibo una funci¨®n sin m¨²sica o sin acciones paralelas".
El director esc¨¦nico explica la interpretaci¨®n con una base de "orgullo melodram¨¢tico" en el personaje de ?ngel Picazo, "con toda la ternura, dolor, tristeza, locura aparente", hacia una linea de disparate y locura extravagante, "el disparate de lo inveros¨ªmil" (personajes de Rafael Alonso y Mari Carmen Prendes) y hacia otra de sublimaci¨®n del amor (personajes de Jos¨¦ Luis Pellicena y Enriqueta Carballeira).
Un caso excepcional
Para el director esc¨¦nico, la figura de Jardiel Poncela "es un caso excepcional en el teatro y la esencia del humor teatral, no s¨®lo en el di¨¢logo vivo sino en las situaciones y personajes". "Lo que m¨¢s me gusta de Jardiel son sus contradicciones y lo m¨¢s hermoso es que fue capaz dramat¨²rgicamente de ense?arlas, al entender el teatro como verdad. Su humor est¨¢ basado en la comprensi¨®n del ser humano. Luchaba por lo inveros¨ªmil y al final lo hac¨ªa todo veros¨ªmil".Elo¨ªsa est¨¢ debajo de un almendro se estren¨® en Madrid en mayo de 1940. Jardiel hab¨ªa incorporado a algunos de sus personajes los golpes o caracter¨ªsticas del cine mudo norteamericano y hab¨ªa trabajado en 1932-1933 en Hollywood como guionista. El hecho de su estreno al comenzar la posguerra ha sido motivo de reflexi¨®n para Jos¨¦ Carlos Plaza. "Es una funci¨®n donde la palabra evasi¨®n cobra todo su sentido. En una ciudad de los a?os 40 aparece el mundo de la imaginaci¨®n, de la magia, de los amores imposibles, de apariciones de esp¨ªritus. Ten¨ªa que ser una funci¨®n surgida de una sociedad que estaba pidiendo esa evasi¨®n."
Babelia
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