Manuel Tar¨ªn

No va por la vida mirando a todos por encima del hombro, pero, a sus 21 a?os, Manuel Tar¨ªn puede permitirse el lujo de contemplar a la mayor¨ªa de las personas de arriba abajo. Mide dos metros y 17 cent¨ªmetros, calza un 52, duerme en una cama de medidas excepcionales; est¨¢ casado y es padre de una hija. Vive del baloncesto y para el baloncesto, pero todav¨ªa tiene mucho que aprender. El Barcelona, club al que pertenece, espera mucho de ¨¦l. Quiere convertirlo en el Tkachenko -sovi¨¦tico de 2.20- del baloncesto espa?ol. Supera en cinco cent¨ªmetros a Fernando Romay.

A los 14 a?os ya med¨ªa dos metros y Tar¨ªn iba de rockero por la vida. Dos a?os antes tuvo que ser operado de los dos pies para no terminar paral¨ªtico. Su problema era de peso (112 kilogramos). Todo cambi¨® para ¨¦l cuando el t¨¦cnico barcelonista Jaime Berenguer vio por la calle a un espigado muchacho que hac¨ªa o¨ªdos sordos a las proposiciones deportivas. "Es que antes yo encontraba esto del deporte una chorrada. T¨ªos que corr¨ªan y se cansaban para nada, pensaba yo. Cuando los t¨¦cnicos del Barga vinieron a hablar conmigo, les fui claro. Les dije que yo era un t¨ªo muy manta, que lo ¨²nico que hac¨ªa era comer y dormir. Pero me convencieron y puedo decir que ahora el deporte no lo cambio por nada".Le cost¨® acostumbrarse, porque yo siempre he ido a mi aire". Todos pensaban que ser¨ªa poco menos que imposible que asimilara las t¨¦cnicas del baloncesto y la disciplina del deporte. Se cas¨® a los 19 a?os, por lo civil: "La boda fue un esc¨¢ndalo. Yo llevaba una cazadora roja, tejanos y zapatillas deportivas. Mi mujer, cazadora negra y gafas oscuras". Ahora tiene una ni?a de un a?o, Sara, y "ya paso de todo lo relacionado con aquella vida". Tar¨ªn tambi¨¦n pasa de pol¨ªtica -"la vamos a palmar todos"- y lo ¨²nico que le interesa es el baloncesto.

Tar¨ªn firm¨® el pasado verano un contrato de tres temporadas con el Barcelona. La idea del entrenador blaugrana, Antoni Serra, es que el jugador se incorpore definitivamente la pr¨®xima temporada al primer equipo, tras haberse formado en el Pineda y antes en el N¨¢utico de Tenerif¨¦. "A m¨ª me gustar¨ªa jugar ma?ana", explica, "pero, cuidado, poder jugar, no estar todo el partido en el banco. Si veo que la proxima temporada a¨²n no estoy preparado, le dir¨¦ a Serra que espere".

Tar¨ªn se entrena todos los d¨ªas por la ma?ana en el Palau Blaugrana, haciendo preparaci¨®n f¨ªsica, y por las tardes en Pineda, con su actual equipo. "Y si Serra me necesita para algo", puntualiza, "tambi¨¦n me entreno con ¨¦l".

Reconoce que 1983 ha sido el a?o m¨¢s intenso de su vida. "Ha sido el m¨¢s fuerte. Ahora me entreno como nunca antes hab¨ªa hecho. Y me lo tomo con muchas ganas". Para ¨¦l lo m¨¢s dificil de estos ¨²ltimos cinco a?os fue empezar: "Tuve que perder 30 kilos en un mes. Corr¨ªa 10 metros y ya estaba en 200 pulsaciones. Nunca hab¨ªa hecho nada de deporte".

Ahora sue?a con llegar al primer equipo del Barga en condiciones de jugar. "Me gustar¨ªa que alg¨²n d¨ªa pudiera escribirse que el Bar?a ha conseguido su Tkachenko. Aunque tambi¨¦n creo que no hay dos personas iguales. Quisiera parecerme a los estadounidenses Davis y Hollis, aunque mi maestro es Ed Johnson".

Su obsesi¨®n es la perfecci¨®n. "Quiero hacerlo todo bien. Si le preguntas a Joan Costa, mi entrenador en el Pineda, te dir¨¢ que estoy obsesionado con la estad¨ªstica, pero es que yo quiero ir al m¨¢ximo". Y conf¨ªa en llegar en condiciones al Palau Blaugrana. De momento, Miguel Tar¨ªn sigue su camino, el que inevitablemente le conduce al Barla, donde ya fue campe¨®n de Espa?a j¨²nior. Todav¨ªa le falta mucho que aprender.