La atenci¨®n en salud mental en Madrid

En la Administraci¨®n socialista de algunas ¨¢reas y sectores, las loables esperanzas que supon¨ªan, en palabras del presidente, de "moralizaci¨®n y racionalizaci¨®n de la gesti¨®n p¨²blica", parecen quedarse en meras f¨®rmulas de intenciones, vac¨ªas de contenido.V¨¦ase, por ejemplo, lo que, concretamente en Madrid, sucede en el campo de la salud mental, y que en algunos de sus aspectos recogi¨® EL PAIS en esta secci¨®n.

1. Se convocan por el ayuntamiento las plazas de psiquiatras de los centros de promoci¨®n de la salud (CPS) con unos baremos, un tribunal y unos criterios propios del antiguo r¨¦gimen y usanza, prim¨¢ndose el academicismo, las escuelas y las citas al poder de las c¨¢tedras.

2. Lo que es m¨¢s grave y el fondo de la custi¨®n: se dispone en Madrid de diversos centros, personal e instituciones dependientes de diferentes organismos que contin¨²an sin coordinarse ni planificarse, duplicando y diversificando sus servicios.

3. Tenemos as¨ª que se hace pagar unos mismos servicios en salud mental por v¨ªas diferentes (ayuntamiento, INSAM, Insalud, AISN, etc¨¦tera).

4. El INSAM dispensa 3.000 millones de pesetas este a?o, para dar como resultado unos estudios y unos planes que despu¨¦s de casi tres a?os ¨²nicamente muestran la frivolidad de cifras sin soporte emp¨ªrico ni rigor. Mientras tanto, no existen las ¨¢reas o centros de salud mental y se mantiene la asistencia en los manicomios.

5. Otro tanto ocurre con el ayuntamiento, sin planificar ni clarificarse en la misi¨®n de los CPS, reproduciendo localismos y electoralismos.

6. Todo ello en detrimento de una m¨ªnima gesti¨®n racional y un elemental control de gastos y utilizaci¨®n de recursos, propios a una planificaci¨®n que -variando matices- est¨¢ ya se?alada en los documentos del propio partido y que en algunas provincias administradas por el PSOE, en mayor o menor grado, muestran su capacidad y eficacia (Albacete, Oviedo, M¨¢laga, etc¨¦tera).

Es hora de que los usuarios y contribuyentes no tengan que pagar (en el doble sentido del t¨¦rmino) la ignorancia e incapacdad de los responsables de esta ca¨®tica pol¨ªtica asistencial para que Madrid pueda contar con unos servicios competentes y eficaces en salud mental. / Psiquiatra-director del centro de salud mental infantil.