Bailes experimentales de cara a Europa

Europeans son escoceses. Sin embargo, su vocaci¨®n europe¨ªsta les ha llevado a realizar su carrera musical en Londres. Abandonaron su ciudad natal, Glasgow, y han tenido una suerte bien distinta a la de sus paisanos estelares Simple Minds o Alterated Images, que supieron aguantar haciendo patria. Hasta el momento han conseguido colocar un par de canciones Aeiou y Animal song, destinadas al p¨²blico de discoteca.Practican una m¨²sica de fusi¨®n. El baile y la experimentaci¨®n se amalgaman en un mismo producto, dirigido a los ambientes juveniles m¨¢s trascendentales. Los j¨®venes madrile?os que acudieron a escucharlos tuvieron que bailar luchando con la duermevela. Y no precisamente porque los Europeans tocaran sin ganas, sino porque el concierto comenz¨® a eso de la 1.45 horas.

Como instrumentistas son un cuarteto m¨¢s que aceptable. Adem¨¢s tienen a gala el cantar los cuatro. Y en los juegos bucales, ejecutados a coro, resultan bastante originales. Exploran los territorios tribales con una existencia nada europea y consiguen un clima duramente ex¨®tico, aunque sugerente. En las voces solistas obtienen unos resultados m¨¢s desiguales. El bajista, Freg Harper -un se?or rubicundo y limpio, disfrazado "muy a la ¨²ltima", como un obrero de la gran depresi¨®n haciendo jogging-, canta en una onda pr¨®xima a las asperezas de Adrian Belew, con digestible acierto. M¨¢s dif¨ªcil de tragar es la voz del teclista, Stewe Hogarth, que estuvo a punto de perder los papeles en una balada de corte psicod¨¦lico.

Geoff Dugmore, en la bater¨ªa, ten¨ªa una fuerza considerable. Pero el m¨¢s atractivo, probablemente, fuera el guitarrista, Colin Woore. Su actitud en escena era bastante natural y contrastaba con la de sus compa?eros, un poco sosos. Sus habilidades con la guitarra tambi¨¦n discurren por una v¨ªa pr¨®xima a la de Adrian Belew, y, siendo una referencia tan frecuente, parece conveniente recordar que Adrian Belew es el actual vocalista y guitarra de King Crinison y que ha pasado, entre otras formaciones, por Talking Heads o Frank Zappa. Lo m¨¢s granado de la noche se concentr¨® en el trabajo de Colin y su instrumento.

Europeans acaba de sacar al mercado un elep¨¦ en vivo, y no es muy comprensible que su casa discogr¨¢fica no les preste un poco m¨¢s de apoyo. Los organizadores del concierto tuvieron que correr con todos los riesgos, y eso no siempre es justo. La actuaci¨®n de Europeans ofrec¨ªa el inter¨¦s de lo arriesgado. Objetivo que se cubri¨® con no demasiada fortuna en cuanto a asistencia de p¨²blico. Y esto, en el presente caso, tampoco fue justo.