Consecuencias de un plante

El Real Madrid es campe¨®n de Liga, oficiosamente y a la espera de la decisi¨®n que la pr¨®xima semana adopte el Comit¨¦ de Competici¨®n, pero no podr¨¢ alardear de ello. El Bar?a intentar¨¢ rentabilizar la excusa que le han ofrecido para esconder alguna de sus frustraciones, pero los hechos sucedidos el viernes en el pabell¨®n traer¨¢n consecuencias.Primero, la sanci¨®n. El Real Madrid ya sent¨® el precedente al abandonar el pasado a?o la Copa del Rey. Le sancionaron con 650.000 pesetas de multa, una risa en m¨¢s de 1.000 millones de presupuesto. Para m¨¢s sonrojo, el Real Madrid, que hab¨ªa despreciado esa competici¨®n, resultaba elegido representante espa?ol en la Recopa, lo que le ha permitido gozar esta temporada de un t¨ªtulo europeo. El Barcelona ha vuelto a hacer lo mismo, y no cabe pensar que reciba otro tipo de sanci¨®n. Habr¨¢ directivos que intenten nuevas f¨®rmulas de recurso ampar¨¢ndose en que en el baloncesto europeo ya se ha dado un caso de una final de Liga, en Yugoslavia, que hubo de ser repetida.

El a?o pr¨®ximo las urgencias futbol¨ªsticas de estos dos clubes no volver¨¢n a transmitirse al baloncesto; ninguno de los dos grandes podr¨¢, otra vez m¨¢s, desvirtuar a su capricho el resultado de una competici¨®n oficial, salvo que quiera exponerse a una grave sanci¨®n. Pero todo pasa por un suceso que se aproxima: el Comit¨¦ de Competici¨®n y las designaciones arbitrales ser¨¢n competencia de la Asociaci¨®n Espa?ola de Clubes de Baloncesto. Es decir, la responsabilidad de la Liga para quien la organiza.

El Comit¨¦ de Competici¨®n desliz¨® ya su intenci¨®n de perdonar a Iturriaga varias horas antes de reunirse, lo que indica que estaba predispuesto a reparar al Real Madrid. Dicho comit¨¦ se reuni¨®, previamente a su decisi¨®n final, en un local del Real Madrid y, finalmente, volvi¨® a incurrir en un desliz ante las c¨¢maras de televisi¨®n. La Asociaci¨®n tiene todas las excusas para hacerse con el control del comit¨¦. En el futuro, lo integrar¨¢, posiblemente, una sola persona.

La carga arbitral

Luego, los ¨¢rbitros. Un sospechoso esp¨ªritu de clase obliga a tener que soportar a 30 colegiados para la Primera Divisi¨®n cuando s¨®lo hacen falta 20. Si hab¨ªa reestructuraci¨®n arbitral, los colegiados amenazaban con una huelga general. Bagu¨¦, directivo azulgrana que ayer se mostr¨® muy activo en sus ofensas, fue antes colegiado. De Merc¨¦, ¨¢rbitro catal¨¢n del partido del viernes, se conocen sus l¨¢grimas en un vestuario por una derrota azulgrana.

G¨¢rate, castellano, es de reconocido filomadridismo y nadie se atreve a discutirlo. Pas¨®, simplemente, que G¨¢rate perdi¨® su partido particular con Merc¨¦ y dej¨® que ¨¦ste implantase su ritmo. La Asociaci¨®n de Clubes ha sido, hasta el momento, la ¨²nica entidad que ha mantenido a raya a los dos grandes. El Barcelona, de momento, est¨¢ imposibilitado a tener un miembro en la junta directiva. Es la fuerza de la igualdad de voto: son 14 clubes contra 2, pero esos dos necesitan ganar a aquellos 14 para ser algo en el baloncesto espa?ol, y disfrutar de sus t¨ªtulos.