El urbanismo y la reconversi¨®n del acero
Cuando la econom¨ªa de un pa¨ªs est¨¢ en crisis, es toda su estructura social la que est¨¢ en crisis. Esto significa que no es posible solucionar los problemas econ¨®micos de fondo sin modificar de una forma u otra tales aspectos de la convivencia social. En particular, el modo de edificar las ciudades se relaciona, de un modo din¨¢mico, con el sistema productivo y con el comercio nacional e internacional.El urbanismo que se ha hecho en nuestro pa¨ªs es el producto de la escasez y la carest¨ªa del acero, junto con una concepci¨®n de la ciudad de tipo barroco o neocl¨¢sico, en el que la vida social y econ¨®mica tiene lugar, b¨¢sicamente, a un solo nivel operativo. Sin embargo, las grandes renovaciones tecnol¨®gicas y financieras se est¨¢n realizando hoy en d¨ªa en ciudades dotadas de niveles operativos superpuestos, donde la vida social se vuelve mucho m¨¢s densa y multidimensional, lo que, a su vez, genera excedentes econ¨®micos de tipo acumulativo.
En estas ciudades la est¨¦tica formalmente est¨¢tica de las ciudades neocl¨¢sicas se transforma en la est¨¦tica multivariante de los prismas cristalinos, donde las im¨¢genes se reflejan en m¨²ltiples direcciones y tonalidades para acabar fundi¨¦ndose las unas en las otras.Rascacielos
En Espa?a se dispone de una gran abundancia de suelo rocoso, seco y estable, lo que hace que sea un lugar id¨®neo para construir rascacielos de acero y cristal. En las dos mesetas hay una gran abundancia de s¨ªlice de ¨®ptima calidad para poder hacer vidrio. Por lo que se refiere al acero, parece que sobra tanto en Espa?a como en el mundo entero, y si en el futuro no basta con la producci¨®n nacional, siempre podemos importarlo a bajo precio del extranjero.
Por otra parte, el empezar a construir en altura permitir¨ªa revalorizar el suelo urbano y crear m¨²ltiples nuevos empleos, sin contar con los empleos generados por la construcci¨®n y el mantenimiento de los nuevos edificios.
Los edificios altos proporcionan nuevas posibilidades para las telecomunicaciones, para la automatizaci¨®n inform¨¢tica de los sistemas operativos y para la implantaci¨®n de las nuevas t¨¦cnicas ecol¨®gicas que combinan los paneles solares con los circuitos internos de calefacci¨®n y refrigeraci¨®n.
Agua y energ¨ªa
Naturalmente, para ello es preciso cambiar las r¨ªgidas normas urban¨ªsticas sobre altura de edificios y renunciar a las amplias perspectivas urbanas pero a cambio podremos cambiar los transportes urbanos ruidosos y depresivos, por redes circulares de monorra¨ªl a¨¦reo, a la vez r¨¢pido y silencioso, que permitan combinar la comodidad del usuario con una pespectiva urbana cambiante y vluminosa.
Las unidades construidas hacia lo alto precisan de ingentes cantidades de energ¨ªa y de agua, lo que, a su vez, exigir¨ªa una renovaci¨®n total de nuestra red de distribuci¨®n el¨¦ctrica, y la necesidad de transportar el agua a larga distancia mediante turbinas y tubos de acero. La mano de obra especializada que se precisa para esta tarea est¨¢ disponible gracias a los excedentes laborales de la industria naval y sider¨²rgica, y si precisamos de m¨¢s operarios, los podemos obtener de los excedentes laborales de los pa¨ªses de la CEE y del Magreb.
El problema m¨¢s grave est¨¢ en c¨®mo financiar una renovaci¨®n urbana integral, en un mundo donde la financiaci¨®n es a la vez cara y canalizada mediante cr¨¦ditos y t¨ªtulos a corto plazo.
La soluci¨®n est¨¢ en volver barata, estable y abundante la financiaci¨®n a medio y largo plazo, y para ello hay que actuar con esp¨ªritu empresarial y evitar la compartimentalizaci¨®n financiera, que ahogar¨ªa en su ra¨ªz unos proyectos de inversi¨®n muy rentables, que tienen que desarrollarse a lo largo de varias generaciones.
En nuestro pa¨ªs los mercados de capitales son raqu¨ªticos porque no se cotizan valores extranjeros en divisas, a la vez que son escasos los valores espa?oles que se cotizan en bolsas del exterior. A pesar del fuerte crecimiento del comercio y de la financiaci¨®n internacional, nadie parece preocuparse en este pa¨ªs por la instalaci¨®n de mercados cambiarios a futuros.
Libertad para los capitales
En una ¨¦poca en la que tantos invocan el liberalismo econ¨®mico para establecer techos salariales y despedir con m¨¢s facilidad a los trabajadores, nadie parece interesado en permitir el libre movimiento de los capitales, lo cual, a su vez, exigir¨ªa liberalizar las cuentas bancarias en divisas y permitir la existencia de cuentas numeradas, o sea, cuentas an¨®nimas protegidas por el secreto bancario.
El proporcionar libertad y seguridad financiera a los inversores extranjeros es un prerrequisito b¨¢sico para que se puedan realizar negocios rentables desde el exterior que favorezcan nuestro desarrollo econ¨®mico, aunque, esto no parecen entenderlo aquellos que est¨¢n obsesionados por la financiaci¨®n a corto plazo de la balanza de pagos y por la estricta regulaci¨®n, tambi¨¦n a corto plazo, de la liquidez monetaria. Pero, en ¨²ltimo t¨¦rmino, la ingente acumulaci¨®n de activos l¨ªquidos s¨®lo sirve para facilitar la especulaci¨®n exterior y dificulta la inversi¨®n interior.
El actuar con avaricia lleva, m¨¢s tarde o m¨¢s temprano, a la ruina, ya que s¨®lo aquellos que saben invertir en proyectos rentables podr¨¢n recoger abundantes beneficios para ellos y para otros.
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