"Cierra los ojos y ver¨¢s qu¨¦ delicia"

Cierra los ojos y ver¨¢s qu¨¦ delicia, me aconsej¨® mi compa?ero de butaca, el escritor Terenci Moix. Y llevaba raz¨®n. ?Qu¨¦ gozada! La noche del jueves, en el T¨ªvoli, lleno, como deben estar los teatros, nos resarcimos, y ya era hora, qu¨¦ caras, de todas las cabronadas que nos hizo, nos hace y nos har¨¢ la tele esa, la caja tonta, cada vez que nos endilga el gran Will con un Gielgud, un Olivier, un Ralph Richardson, un Michael Redgrave o una Margaret Leighton, por no citar a 26 extraordinarias actrices m¨¢s.Pero qu¨¦ requetebi¨¦n que dicen a William Shakespeare las gentes de la Royal Shakespeare Company. Aunque, claro, si ellos no lo dicen as¨ª de requetebi¨¦n, siendo como son la RSC, ya me dir¨¢n qui¨¦n va a decirlo. As¨ª pues, se?oras y se?ores de la RSC, muchas, much¨ªsimas gracias por esta noche del jueves -y la gozada sigue hasta el domingo por la tarde- en que por primera vez en Barcelona pudimos disfrutar de ese Shakespeare, en su lengua original, y que ustedes han mamado, desde cr¨ªos, a trav¨¦s de una tradici¨®n, p¨²blica y privada, que uno sinceramente les envidia, como envidia a los c¨®micos de la Com¨¦die, la tropa de Moli¨¨re, la maison de Moli¨¨re.

Y ahora abramos los ojos. La RSC va camino de Los Angeles con dos montajes de Terry Hands: Much ado about nothing (Mucho ruido y pocas nueces) y el Cyrano, con Derek Jacobi, de Cyrano. En Par¨ªs ofrecieron, adem¨¢s, un Lear, el Lear de Bond, que seg¨²n tengo entendido fue sensacional. El ¨¦xito est¨¢ asegurado. Va a haber bofetadas para conseguir una localidad. Pero, repito, abramos los ojos. Y los abrimos y decimos, sin m¨¢s rodeos, que el montaje de Terry Hands es del a?o de maricasta?a, m¨¢s a¨²n, que es cursi. Que Hands lleva la comedia hacia la farsa, hacia el vodevil, carg¨¢ndose la ambig¨¹edad, relativa en comparaci¨®n con otros textos shakespeareanos (As you like it), manifiesta en el baile del inicio del segundo acto. Que Derek Jacobi se pasa descaradamente. Que Sinead Cusack, Beatrice, parece una ni?a bien de Wilde, o de Cukor, aunque esto podr¨ªa interpretarse como un elogio, y que Dogberry (Christopher Benjamin) y Verges (Jimmy Gardner), no est¨¢n, ni de lejos, interpretativamente hablando, a la altura de unos payasos shakespeareanos. Y Borachio (Geoffrey Freshwater), qu¨¦ poquita cosa. Y John Carlisle, el bastardo, qu¨¦ malo m¨¢s malo, vamos, de pel¨ªcula.