La profesi¨®n m¨¦dica, una revoluci¨®n pendiente
Las elecciones en el colegio de Madrid ponen al descubierto los problemas del colectivo m¨¢s influyente en la sanidad
De todos los sectores que intervienen en el hecho sanitario, el de los m¨¦dicos, unos 70.000 en toda Espa?a, constituye probablemente el que ejerce una mayor influencia social. Ante una serie de nuevas condiciones de vida y nuevas necesidades en el campo de la salud y a la espera de la anunciada reforma sanitaria en profundidad, la figura del m¨¦dico, tradicionalmente mitificada, deber¨¢ cargarse, seg¨²n opiniones muy extendidas, de un nuevo contenido. El per¨ªodo electoral abierto recientemente en el Colegio de M¨¦dicos de Madrid y en el que cuatro candidaturas se disputar¨¢n la presidencia, descubre algunos de los problemas pendientes de este colectivo.
Una de las primeras contradicciones que tienen que asumir los tres sectores, especialmente el de los m¨¦dicos y el de la Administraci¨®n, porque los pacientes son en este caso los perjudicados, es el de la masificaci¨®n de la medicina de la Seguridad Social que afecta a la mayor¨ªa de los espa?oles. Dicen las organizaciones profesionales que sobran m¨¦dicos en Espa?a, que existen 20.000 m¨¦dicos en, paro; pero se quejan, por otra parte, que los que ejercen no pueden atender a tantos enfermos de la Seguridad Social en tan poco tiempo. "No vemos a los enfermos, los enfermos nos ven a nosotros", manifiestan.Por otra parte el apoyo o no a la reforma sanitaria tal como la pretende llevar a cabo la actual Administraci¨®n (anteproyecto de Ley General de Sanidad y una bater¨ªa de leyes y decretos-leyes en torno a este sustancial marco legal) y la posici¨®n frente a la colegiaci¨®n libre u obligatoria, son dos de los puntos que dividen a los m¨¦dicos y que han aflorado a esta campa?a para las elecciones del d¨ªa 14 del pr¨®ximo mes de junio en el Colegio de M¨¦dicos de Madrid, que agrupa a casi 20.000 m¨¦dicos.
El debate medicina p¨²blica-medicina privada, por ejemplo, que ha producido una gran crispaci¨®n en el cuerpo m¨¦dico, es un indicativo m¨¢s de la crisis de la medicina tradicional. Las actividades profesionales de los m¨¦dicos ya no pueden ser las mismas que las de hace 100 o 50 a?os. El avance de los conocimientos cient¨ªficos y la tendencia cada vez m¨¢s marcada de potenciar los aspectos de salud p¨²blica, de atenci¨®n primaria y de prevenci¨®n de la enfermedad hacen pensar en que ya va siendo hora de que se configure un nuevo profesional.
En el terreno de la pr¨¢ctica colegial concreta, un hecho que ha podido conducir a la crispaci¨®n de los m¨¦dicos ha sido la denominada por muchos "politizaci¨®n" de la Organizaci¨®n M¨¦dica Colegial por medio de sus actuales directivos, especialmente por su presidente, Ramiro Rivera, persona muy vinculada a Alianza Popular. Esta tendencia se ha visto agravada con las campa?as de la c¨²pula del Consejo General de m¨¦dicos, denunciadas en los medios de comunicaci¨®n, encaminadas a "ponerle las cosas cada vez m¨¢s dif¨ªciles al Gobierno".
'Prepotencia'
Por su parte, la pol¨ªtica de prepotencia que, seg¨²n muchos m¨¦dicos, ha llevado "equivocadamente" la Administraci¨®n en relaci¨®n con estos profesionales, ha contribuido a deteriorar todav¨ªa m¨¢s las relaciones con este cuerpo profesional anclado en gran medida dentro de consideraciones el¨ªtistas e incluso m¨ªticas, lo que ha repercutido tambi¨¦n en la asistencia sanitaria en general.
Muy unida a esta pol¨ªtica que lleva Ramiro Rivera al frente de la OMC se encuentra la candidatura de Javier Matos, actual presidente del Colegio de Madrid. Una fuerte defensa del corporativismo y del libre ejercicio de la medicina y la oposici¨®n a los puntos m¨¢s esenciales de la anunciada Ley General de Sanidad caracteriza los postulados de la misma.
Para la candidatura de Matos la Ley General de Sanidad propiciar¨¢ el que existan diversos tipos de ejercicio de la medicina (m¨¦dicos de primera, segunda o de tercera clase) y plantear¨¢ una relaci¨®n no profesional entre el m¨¦dico y el Estado. Otra de las cr¨ªticas que hacen a este proyecto es su indefinici¨®n sobre los medios con los que se va a financiar la reforma.
La candidatura conservadora y continuista de Matos, que ha sido tildada por algunos de sus contrincantes en las elecciones de haber cerrado el colegio a la participaci¨®n de los socios y de haber dado las espaldas a los problemas reales, de la profesi¨®n, mantiene tambi¨¦n una postura de abierta oposici¨®n a los puntos fundamentales del anteproyecto de ley de Colegios Profesionales. "Esta ley", dicen, "tiene como m¨¢ximo defecto el que no plantea de una forma clara cuales son las funciones de los colegios profesionales en la sociedad. Para nosotros los colegios deben desempe?ar las funciones de control cient¨ªfico y deontol¨®gico de la profesi¨®n. Estas dos funciones no las van a poder suplir ni el Estado ni los tribunales.
La candidatura sindical de Luis Mart¨ªn Sanz -la Confederaci¨®n Estatal de Sindicatos M¨¦dicos
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est¨¢ detr¨¢s- se define como una candidatura de aut¨¦nticos profesionales que pretenden encontrar una mejor imagen de la profesi¨®n m¨¦dica"; al mismo tiempo afirma que van a separar lo sindical de lo profesional. Sin embargo no se puede olvidar que la CESM estuvo muy unida hasta hace muy poco con las posiciones de Ramiro Rivera con el que rompi¨® tras el desvelamiento de la llamada "operaci¨®n primavera".
En otra ¨®rbita progresivamente m¨¢s abierta a los problemas reales actuales que tiene planteada la profesi¨®n m¨¦dica se sit¨²an las candidaturas de Jos¨¦ Arizcun y Jos¨¦ Toledo. El primero, con gran experiencia en los temas colegiales, puesto que fue vocal de la secci¨®n de deontolog¨ªa en el per¨ªodo 74-80 con Francisco Garc¨ªa Miranda como presidente y se considera miembro del equipo que organiz¨® las primeras elecciones democr¨¢ticas en este colegio, asegura que los colegios deben existir y que no deben convertirse en los "grandes mudos" frente a la sociedad "como ha sucedido en la actual junta directiva".
En su candidatura, con la que tambi¨¦n colabora Fernando Garc¨ªa Miranda, resalta como principales presupuestos la independencia de los colegios respecto a partidos pol¨ªticos y sindicatos, la defensa de los principios del ejercicio m¨¦dico y la colaboraci¨®n con todas las tendencias del colectivo profesional. Para Jos¨¦ Arizcun los colegios son ¨®rganos que ha creado la sociedad para la defensa de la propia sociedad y tienen como funci¨®n principal el participar activamente en todo lo concerniente a la salud de los ciudadanos. Los colegios profesionales son ¨®rganos intermedios entre el Estado y el individuo. "Un Estado en el que no existe nada entre el propio estado y el individuo es un Estado marxista".
Sobre la pr¨¢ctica deontol¨®gica Arizcun afirma que los colegios en general y no s¨®lo el de m¨¦dico no han cumplido sus funciones deontol¨®gicas que "no tienen por qu¨¦ chocar con los procedimientos judiciales". El c¨®digo deontol¨®gico es necesario "entre otras cosas porque el acto m¨¦dico es, en una gran medida, un arte sobre el que dif¨ªcilmente se puede legislar. A veces el m¨¦dico falta a la deontol¨®gica profesional pero no incurre en causa de juicio".
Las posturas de Arizcun y los miembros de su candidatura se muestran muy cr¨ªticos con las reformas sanitarias que tiene preparadas el Gobierno del PSOE. "Partimos de que hay que cambiar la sanidad, pero cambiar un fen¨®meno tan complejo exige previamente un estudio en profundidad, un debate t¨¦cnico, mucho dinero y la colaboraci¨®n de todas las fuerzas que intervienen en este campo. A pesar de que somos cr¨ªticos con los proyectos de la actual Administraci¨®n, aportaremos todos los medios para que el debate sanitario llegue a los m¨¢ximos niveles".
Una visi¨®n comprometida
El grupo de m¨¦dicos que apoya la candidatura de Jos¨¦ Toledo parte de la consideraci¨®n de "los profundos cambios que han experimentado las formas del ejercicio m¨¦dico en los ¨²ltimos a?os, que se distinguen, entre otros factores, porque la labor individualista y en solitario, "perfectamente leg¨ªtima, por otra parte", ha ca¨ªdo progresivamente en desuso, lo mismo que la medicina liberal en cuyo contexto se insertaba.
"Por otra parte", dicen, "nunca como hoy, en que se ha impuesto el quehacer colectivo y en equipo, los m¨¦dicos debemos profundizar en el contexto social, laboral, familiar e individual de los enfermos en busca de las causas, no siempre evidentes, que desajustan la mente y el cuerpo de la poblaci¨®n".
Uno de los puntos m¨¢s pol¨¦micos que diferencia a este grupo de m¨¦dicos de los otros que compiten es precisamente que defiende la libre colegiaci¨®n "porque queremos", ha explicado Jos¨¦ Toledo, "un colegio de M¨¦dicos fuerte, que responda a las necesidades de promoci¨®n profesional de tal manera que los colegiados sientan la necesidad de colegiarse pero de una forma voluntaria.
Sobre el debate medicina p¨²blica-medicina privada dicen los miembros de esta candidatura que no van en contra de la asistencia privada pero "s¨ª estamos en contra del lucro de terceras personas puesto que esto implica necesariamente o bien una inadecuada atenci¨®n m¨¦dica o una retribuci¨®n no suficiente del personal facultativo, o lo que es peor, ambas cosas a la vez".
"Creemos tambi¨¦n", a?ade Jos¨¦ Toledo, "que un servicio p¨²blico integral e integrado de la Salud, financiado con los fondos generales del Estado que establezca las prioridades asistenciales en la promoci¨®n de la salud, y asistencia a los enfermos, que sea equitativo y solidario, accesible y gestionado democr¨¢ticamente por los tres sectores implicados, responder¨ªa a un modelo sanitario ideal como se demuestra con el National Held Service brit¨¢nico".
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