La direcci¨®n del PC italiano se re¨²ne el lunes para elegir al nuevo secretario general

La maquinaria pol¨ªtica de Italia se puso ayer nuevamente en marcha tras la tregua provocada por la muerte del secretario general del Partido Comunista Italiano (PCI), Enrico Berlinguer. La atenci¨®n vuelve a volcarse en dos temas: la sucesi¨®n del desaparecido dirigente y la inc¨®gnita de las elecciones para el Parlamento Europeo del pr¨®ximo domingo. Con relaci¨®n a la primera cuesti¨®n, el lunes se reunir¨¢ la direcci¨®n del PCI para proponer el nuevo secretario general.

Tras los funerales de Berlinguer, cuando la incre¨ªble ola de emoci¨®n se ha calmado y el psicodrama nacional ha sido asimilado o removido y Enrico Berlinguer descansa en la sencilla tumba familiar de Prima Porta, la n¨²mero siete, nicho 12, sin m¨¢s inscripci¨®n que "Berlinguer", escrito con flores de begonia, la pregunta que a nivel pol¨ªtico se hacen todos es una sola: ?Y ahora, qu¨¦?Despu¨¦s de la tregua del mi¨¦rcoles, la m¨¢quina de las elecciones ha vuelto a moverse con su dura dial¨¦ctica en una campa?a electoral que la muerte de Berlinguer ha agravado y cargado de inc¨®gnitas. ?Habr¨¢ sorpresas en los resultados? ?Y si el partido comunista se despertara el lunes pr¨®ximo como el primer partido de Italia? Los observadores menos apasionados aseguran que no ser¨¢ as¨ª, porque el italiano en materia de voto pol¨ªtico es muy maduro y estable y sabe defenderse de las emociones moment¨¢neas. Pero las otras fuerzas pol¨ªticas, por si acaso, se han preparado ya para la posible sorpresa, mientras el partido comunista ha anunciado que el lunes se reunir¨¢ la direcci¨®n del partido para proponer el nombre del sucesor de Berlinguer, que deber¨¢ ratificar el comit¨¦ central y la comisi¨®n central de control, que se reunir¨¢n inmediatamente despu¨¦s.

La Democracia Cristiana ha lanzado ya una se?al de alarma. Su secretario nacional, Ciriaco de Mita, afirm¨® ayer en la televisi¨®n que si el partido comunista superara en votos a su partido, "cambiar¨ªa en Italia el cuadro pol¨ªtico", a pesar de que se trata s¨®lo de elecciones europeas.

Por su parte, el Partido Socialista Italiano (PSI) se ha adelantado a decir que no est¨¢ dispuesto a dejar la presidencia del Gobierno, por lo menos en tres a?os, y ha advertido que si alguien piensa en una simple crisis del Gabinete para arrebatarle la presidencia del Consejo de Ministros, puede ir perdiendo sus ilusiones porque o no habr¨¢ crisis o "habr¨¢ nuevas elecciones".

Otro problema para el PSI ser¨¢ la sustituci¨®n de Berlinguer en el PCI. Si el nuevo secretario general quiere acelerar la pol¨ªtica de la alternativa de izquierdas y est¨¢ dispuesto a un di¨¢logo m¨¢s abierto con los socialistas, ?qu¨¦ har¨¢ Craxi? ?Abandonar¨¢ su alianza con la Democracia Cristiana y con los peque?os partidos laicos? Y si no lo hace, ?no existe el peligro de que el partido comunista pueda volver a aumentar su fuerza electoral gracias a su dura oposici¨®n?

Pero si el partido socialista acepta pactar con el partido comunista, abri¨¦ndole, por ejemplo, la puertas del Gobierno, ?no acabar¨ªa siendo absorbido por el hermano mayor, el PCI, que en estos d¨ªas ha demostrado, a pesar de su reciente crisis interna poseer una fuerza en la base que no pueden ni so?ar otros partidos?