Econom¨ªa cree posible que el paro aumente en la legislatura en 450.000 personas

Si se cumpliese el escenario mas pesimista de las previsiones oficiales sobre la econom¨ªa espa?ola, al final de la legislatura habr¨ªa 2,7 millones de parados, lo que significa que no s¨®lo no se cumplir¨ªa la promesa electoral del PSOE de generar 800.000 puestos de trabajo, sino que en los cuatro a?os de Gobierno socialista se habr¨ªa incrementado el paro en 450.000 personas. Estas previsiones est¨¢n contenidas en uno de los cuadros macroecon¨®micos presentados por el Ministerio de Economia y Hacienda al Consejo de Ministros del pasado mi¨¦rcoles, y provocaron una larga discusi¨®n entre Miguel Boyer y varios ministros del Gabinete.

Fuentes consultadas en la Administraci¨®n socialista insistieron en que el ¨²ltimo y maratoniano Consejo de Ministros puso de relieve las diferencias existentes entre distintos departamentos en tomo a los grandes n¨²meros de los presupuestos para 1985 y a los cuadros macroecon¨®rn¨ªcos presentados por Hacienda. Sin embargo, el ministro de Econom¨ªa y Hacienda, Miguel Boyer, en una reuni¨®n mantenida ayer en Madrid con los corresponsales extranjeros, en ning¨²n momento dej¨® traslucir la existencia de tales desacuerdos. De acuerdo con portavoces oficiales, la cuesti¨®n tampoco se trat¨® ayer en la reuni¨®n de la comisi¨®n ejecutiva federal del PSOE, que dur¨® dos horas m¨¢s de lo habitual.El pasado Consejo de Ministros, pese a su inusual duraci¨®n (m¨¢s de 10 horas), s¨®lo aprob¨® dos decretos (sobre el saneamiento del sector de seguros y sobre retribuciones de las fuerzas de seguridad), que ya hab¨ªan sido ampliamente debatidos con anterioridad, y algunos nombramientos de gobernadores civiles. Las nuevas previsiones del programa econ¨®mico a medio plazo y los grandes n¨²meros de los presupuestos para el pr¨®ximo a?o quedaron aplazados para pr¨®ximas reuniones del Gabinete.

Los nuevos escenarios a medio plazo se han realizado en base a dos supuestos de incremento salarial promedio en t¨¦rminos reales para el per¨ªodo 1985-1987: un 0% y un -0,7%. La presentaci¨®n de estos n¨²meros, por la dureza del ajuste, gener¨® cr¨ªticas en diversos miembros del Gabinete. Boyer desafi¨® a sus compa?eros del Gobierno a que presentasen alternativas ante esas cr¨ªticas. El Consejo termin¨® con el aplazamiento de la aprobaci¨®n de este nuevo programa a medio plazo y volvi¨® a replantearse la conveniencia de dar prioridad a la reducci¨®n del d¨¦ficit o retomar el objetivo program¨¢tico de creaci¨®n de empleo. El presidente Gonz¨¢lez cerr¨®, como es habitual, la sesi¨®n del Gabinete. En su intervenci¨®n dijo a los ministros que el primer objetivo del Gobierno debe ser el empleo, y que hab¨ªa que aportar elementos de optimismo a la sociedad y no s¨®lo demandar sacrificios y austeridad. Este mensaje y la reanudaci¨®n de las negociaciones para una concertaci¨®n social podr¨ªa significar, seg¨²n altos cargos de la Administraci¨®n, la posibilidad de un giro en la pol¨ªtica econ¨®mica actual, en el sentido de poner menos ¨¦nfasis en la reducci¨®n de los salarios y tratar de recuperar actividad y empleo con un cierto relanzairliento.

Ello significar¨ªa asimismo supeditar los objetivos de reducci¨®n del d¨¦ficit y de la inflaci¨®n a la prioridad del empleo y modificar la severa pol¨ªtica de ajuste que ha impuesto hasta ahora el equipo de Miguel Boyer. El debate sobre la supremac¨ªa de unos u otros objetivos, motivo de discrepancias internas desde la formaci¨®n del Gobierno, ha resurgido con fuerza en los ¨²ltimos d¨ªas.

Miguel Boyer desech¨® en la citada reuni¨®n con los periodistas los enfrentamientos con el vicepresidente del Gobierno: "Siempre se supone que existe una tremenda contradicci¨®n entre Alfonso Guerra y yo; no es as¨ª la cosa", dijo el ministro.

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