D¨ªaz Miguel se dedic¨® a mover el banquillo ante China
ENVIADO ESPECIALEspa?a, que hoy se enfrenta a Estados, Unidos (20.00 horas, TVEl), renunci¨® ayer a propinarle una gran paliza a China. D¨ªaz Miguel, probablemente, sinti¨® piedad por el vencido y, cuando el encuentro caminaba hacia una victoria casi humillante, comenz¨® a realizar cambios en el equipo que proporcionaron a los chinos momentos de desahogo. De ir doblando los puntos, Espa?a acab¨® la primera mitad con tan s¨®lo doce de ventaja. Con la retirada de Epi e Iurriaga, se acab¨® en el primer tiempo con el espect¨¢culo del contragolpe certero.
L¨®pez Iturriaga no tiene mejor cualidad que la de saber correr en solitario en espera del pase largo para pillar desprevenida a la defensa contraria. Ayer, aunque en dos ocasiones fall¨® bajo la canasta, fue el palomero ideal mientras estuvo en la cancha y el hombre que proporcion¨® a los espectadores la satisfacci¨®n de ver c¨®mo se puede sorprender al contrario sin que este caiga en la cuenta de que debe modificar su esquema.
Pese a que, en principio, Corbal¨¢n y Mart¨ªn se quedaron en el banquillo, el conjunto hispano, con u a defensa al hombre un tanto presionante, domin¨® el encuentro sin dificultades. Romay, que estuvo incluso fino en alg¨²n momento, recogi¨® rebotes y lanz¨® largo el bal¨®n para que Iturriaga pudiera escaparse. Lo mismo hizo Soloz¨¢bal. Y en esa racha de salidas a todo gas particip¨® incluso Jim¨¦nez.
Romay gan¨® a Zhangbao
Espa?a lleg¨® a tener 21 puntos de ventaja, pero las modificaciones en el equipo produjeron descuidos en la defensa. Las diferencias se fueron manteniendo mientras Epi e Iturriaga tuvieron sus momentos felices, pero sucedi¨® que Mart¨ªn fall¨® bajo el aro como no es propio en ¨¦l y tampoco De la Cruz y Corbal¨¢n anduvieron muy acertados en el tiro. Con todo, la tranquilidad se mantuvo porque, a¨²n en los instantes en que China fue acortando distancias, mientras Espa?a se quedaba detenida en los 46 puntos, se not¨® que s¨®lo hab¨ªa un equipo capaz de jugar con movilidad y romper la defensa del contrario con los tiros desde media distancia.
D¨ªaz Miguel, por si acaso, repesc¨® en la reanudaci¨®n a L¨®pez Iturriaga y Epi y puso a Corbal¨¢n por Llorente. Y, en poco m¨¢s de un minuto, otra vez hubo 16 puntos de delantera.
El peque?o duelo entre Romay y Zhangbao (2,16 metros) se resolvi¨® a favor del espa?ol. Su adversario es mucho m¨¢s lento y bastante menos preciso en los lanzamientos a canasta. China aline¨® en el comienzo a un equipo con bastantes menos cent¨ªmetros que Espa?a, pero tampoco consigui¨® inquietar cuando modific¨® su esquema.
El encuentro se jug¨® con tal correcci¨®n que hasta el minuto cinco ninguno de los dos equipos hab¨ªa sumado una sola personal. El juego fue tan evidentemente favorable al conjunto espa?ol que ni siquiera en el momento en que se qued¨® con s¨®lo once puntos de ventaja hubo opci¨®n a conflictos de ning¨²n tipo. Y de ese apacible transcurrir de los minutos se lleg¨® a contagiar el propio p¨²blico, que s¨®lo reaccion¨® en algunos instantes de asistencias originales, canastas m¨¢s o menos espectaculares y breves reacciones de los chinos, En la segunda mitad hubo muchos minutos en los que se jug¨® entre el silencio del p¨²blico. La presencia de numerosos chinos en los grader¨ªos y el deseo de parte de los espectadores de ver a la v¨ªctima menos torturada fue lo que proporcion¨® alg¨²n grito de aliento. Pero todo fue tan tranquilo que ni el grupo de espa?oles que suele usar las consignas de la demencia del Estudiantes se dej¨® sentir. No merec¨ªa la pena.
En esas circunstancias, D¨ªaz Miguel movi¨® el banquillo por completo para que incluso Arcega pudiera estar en la pista m¨¢s minutos de los habituales. En el colmo de las delicias, Fernando Romay marc¨® m¨¢s puntos que nunca
Solventada la primera fase y asegurado el segundo puesto, que da opci¨®n a los cuartos de final, contra el tercero del otro grupo queda para hoy la prueba del nueve, es decir el pulso con Estados Unidos.
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