Se superaron los resultados de los Juegos Ol¨ªmpicos en todos los lanzamientos, la p¨¦rtiga y la marcha

Los Juegos de la Amistad comenzaron ayer en Mosc¨² con el atletismo. En todos los lanzamientos, la p¨¦rtiga y la marcha, las marcas de los primeros clasificados ridiculizaron las que valieron para subir al podio en Los ?ngeles. Amistad-84 no pretende humillar a los campeones ol¨ªmpicos, pero las referencias comparativas son exhaustivas, aunque las circunstancias ambientales, temperatura y viento, las hacen muy relativas en algunos casos. Los sovi¨¦ticos pretenden que sea una lecci¨®n de esp¨ªritu ol¨ªmpico y una escuela de maestr¨ªa porque se respeta la Carta Ol¨ªmpica y no se impide la participaci¨®n a ning¨²n deportista con la exigencia de una marca m¨ªnima, como dijo ayer Nikolai Rusali, vicepresidente del Comit¨¦ Sovi¨¦tico de Deportes. As¨ª, se pudo ver c¨®mo el ¨²ltimo clasificado en jabalina, un representante de Yemen, la lanzaba a 45,86 metros, mientras el vencedor lo hac¨ªa a 94,44.

Los Juegos Ol¨ªmpicos pasaron inadvertidos en la Uni¨®n Sovi¨¦tica. A lo m¨¢s que se lleg¨® fue a comentar que Carl Lewis hab¨ªa igualado el r¨¦cord de Jesse Owens con sus cuatro medallas de oro. Es ahora cuando comienza a existir conciencia de lo que fueron a base de comparar los resultados.Ayer comenz¨® el atletismo, que s¨®lo incluye pruebas masculinas. El estadio Lenin no se llen¨® por la ma?ana, cuando actuaron los lanzadores de martillo sovi¨¦ticos. Los tres primeros clasificados, Sedij (85,60 metros), Nikulin (82,56) y Litvinov (81,30), superaron los 78,08 que en Los ?ngeles le valieron el oro al finland¨¦s Tiainen. Ya por la tarde, con el estadio lleno, se sigui¨® demostrando algo que en Los Angeles nadie hab¨ªa ignorado, que en algunas pruebas faltaban los mejores. Pero eso era algo que los sovi¨¦ticos necesitaban mostrar a su propio pueblo. Ayer, a excepci¨®n de los 400 metros y los 3.000 obst¨¢culos, ganadas por el sovi¨¦tico Markin (44.78) y el polaco Maminski (8.27.12), respectivamente, se establecieron marcas que. en Los ?ngeles hubieran valido medalla. Pero, en atletismo s¨®lo se puede proclamar al mejor con rotundidad cuando ha habido un enfrentamiento directo entre los mejores. En algunas pruebas, como la marcha y la marat¨®n, las referencias son muy relativas por los diferentes recorridos.

No obstante, en determinadas pruebas es tan clara la superioridad sovi¨¦tica que no se hace necesaria la confrontaci¨®n directa. Para dilucidar qui¨¦n es el mejor basta con que compitan entre ellos. En todos los lanzamientos, los vencedores e incluso los dos siguientes clasificados superaron las marcas de los campeones angelinos. Primero fue el martillo. Despu¨¦s, la jabalina, en la que los alemanes orientales Hohn (94,44 metros) y Michel (88,32) y el checoslovaco Ademec (87,10) rebasaron los 86,76 del finland¨¦s Haerkoenen. En disco, el sovi¨¦tico Dumchev lanzo a 66,70 metros, diez cent¨ªmetros m¨¢s que, el alem¨¢n occidental Danneberg. Y en peso, otro sovi¨¦tico, Kasmiskas (21,64 metros), super¨® en 38 cent¨ªmetros la marca del italiano Andrei.

Los sovi¨¦ticos tambi¨¦n arrasaron comparativamente en p¨¦rtiga y marcha. Volkov salt¨® 5,80 metros, cuando el oro ol¨ªmpico lo logr¨® el franc¨¦s Quinon con 5,75. El recordman mundial, Budka, se elev¨® a 5,70. En 20 kil¨®metros marcha, Protsishin (1.21.57), Solomin (1.22.21) y Polozov (1.22.40) mejoraron los 1.23.13 del mexicano Canto en Los ?ngeles. Y en 50, Perlov (3.43.06) tambi¨¦n rebaj¨® la marca del otro mexicano, Ra¨²l Gonz¨¢lez (3.47.26). Y, cuando se obtuvieron marcas inferiores a las de Los ?ngeles, se superaron, al menos, aqu¨¦llas con las que all¨ª se ganaron la plata y el bronce. Fueron los casos del sovi¨¦tico Semykin, 8,38 en longitud (r¨¦cord sovi¨¦tico); el cubano Lara, 10,17 en 100 metros; el sovi¨¦tico Abramov, 27.55.1 en 10.000, y el re levo sovi¨¦tico de 4X 100, con 38.32.