La salud de la Sanidad

Es p¨²blico que Catalu?a tiene una larga tradici¨®n en el campo de la Medicina, y recientemente se ha podido constatar por los trasplantes de coraz¨®n, h¨ªgado y p¨¢ncreas, el nacimiento del primer ni?o fecundado artificialmente, etc¨¦tera. Estos hechos no nos han de hacer olvidar otra realidad: nuestra Sanidad no goza de buena salud. Pertenezco a una asociaci¨®n de afectados de coagulopat¨ªas cong¨¦nitas que, si bien recibimos una atenci¨®n primaria generalmente aceptable, no disponemos del tratamiento integral que solicitamos desde hace a?os. Carecemos de atenciones imprescindibles. Por ejemplo, todo hemof¨ªlico que no realice rehabilitaci¨®n preventiva precipita la p¨¦rdida de su capacidad motora, y aqu¨ª no se recibe este tipo de tratamiento. Por ejemplo: la atenci¨®n dental en los hemof¨ªlicos ha de ser extremadamente cuidada, pero no se nos suministra esta atenci¨®n. Estos ejemplos de deficiencias se podr¨ªan extender a otros grupos de enfermos cr¨®nicos y, lo que es peor, a la poblaci¨®n en general. Por lo tanto, si bien los ¨¦xitos m¨¦dicos conseguidos en los ¨²ltimos meses nos enorgullecen, no deben hacer olvidar que a¨²n queda mucho por realizar. Y tampoco hay que olvidar que atendiendo a esos temas elementales, quiz¨¢ con resultados m¨¢s modestos se diaria a la poblaci¨®n en general un mayor bienestar., secretario de la Asociaci¨®n Catalana de Hemofilia.