Los intereses del turismo y la agricultura, enfrentados en la 'guerra del agua'

La salinizaci¨®n Progresiva de los pozos de Denia amenaza el principal recurso de esta localidad costera de Valencia: el turismo Cuando la Generalitat valenciana ha intentado solucionar provisionalmente el problema, trayendo agua de unos pozos del IRYDA situados en Oliva y Pego, los vecinos de estas localidade se han opuesto violentamente, porque estiman que el trasvase ir¨ªa en perjuicio de sus recursos agr¨ªcolas. Esta guerra del agua ha paralizado, de momento, las obras del trasvase, mientras el consejero de Gobernaci¨®n de la Generalitat, Felipe Guardiola, amenaza con acciones judiciales contra los causantes de los incidentes. La Comisi¨®n de Recursos Hidr¨¢ulicos del J¨²car estudiar¨¢ en su reuni¨®n prevista para el pr¨®ximo viernes otra posible soluci¨®n.
La salinizaci¨®n de los pozos de agua dulce del t¨¦rmino municipal de Denia, municipio tur¨ªstico que cuenta con censo de 25.000 habitantes, pero que en verano ve aumentada su poblaci¨®n hasta m¨¢s de 100.000 personas, ha provocado una situaci¨®n dram¨¢tica de sequ¨ªa, que obliga a sus habitantes a utilizar agua mineral para cualquier uso dom¨¦stico y para el consurno humano, y que ha desecado tambi¨¦n los campos de cultivo y las huertas."Siempre hemos sufrido en Denia", se?ala el alcalde, el socialista Jaime Sendra, "un notable d¨¦ficit de agua dulce, pero desde hace unos meses estamos angustiados, porque la salinizaci¨®n de nuestros pozos ha ido en aumento y la sequ¨ªa que padecemos ha complicado todav¨ªa m¨¢s las cosas. Nosotros pedimos una soluci¨®n de urgencia y la comisi¨®n de sequ¨ªa de la Comunidad Valenciana decidi¨® la construcci¨®n de una tuber¨ªa y el trasvase de agua desde los pozos del IRYDA de Oliva y Pego". Sendra no quiere ni pensar en las catastr¨®ficas consecuencias que una restricci¨®n de agua podr¨ªa acarrear para el turismo, que es la principal fuente de ingresos de esta hist¨®rica ciudad costera, situada en el l¨ªmite entre las provincias de Valencia y Alicante.
Pero al otro lado del conflicto, los pueblos de Oliva y Pego han demostrado con los ¨²ltimos incidentes que est¨¢n dispuestos a defender con u?as y dientes el agua de los pozos del IRYDA. En el fondo de este grave problema, de esta guerra del agua, late un permanente enfrentamiento entre los pueblos costeros y volcados hacia el turismo y las localidades agr¨ªcolas, que se resisten a ceder sus riquezas naturales. La pugna ha llegado a tales extremos que los vecinos de Pego han roto la tuber¨ªa de trasvase en m¨¢s de una ocasi¨®n, y est¨¢n resueltos a repetir la acci¨®n siempre que lo consideren necesario.
Las palabras de Vicente Morera, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Oliva, resumen de alg¨²n modo el sentimiento de sus paisanos, cuando alega que "nosotros somos amigos de Denia y estamos dispuestos a ceder agua para el consumo humano, pero no podemos poner en manos de Denia nuestra agua y nuestros recursos". Morera advierte que "aqu¨ª puede pasar cualquier cosa", para a?adir a continuaci¨®n que "no somos partidarios de la violencia, pero estamos decididos a ponemos delante de las excavadoras para evitar que la tuber¨ªa llegue a nuestros t¨¦rminos". En opini¨®n de Morera, dirigente de la Organizaci¨®n Independiente Valenciana, "Denia no puede mantener su prepotencia tur¨ªstica y agr¨ªcola a costa de los pueblos lim¨ªtrofes. Que adapten sus necesidad¨¦s a sus recursos y que dejen ya de construir urbanizaciones y apartamentos".
Buscando una soluci¨®n
El consejero valenciano de Obras P¨²blicas, Urbanismo y Transporte, Vicente Llombart, aclara que "el agua de los pozos del IRYDA no se utiliza en la actualidad para la agricultura, y no se pensaba ponerlos en funcionamiento para usos agr¨ªcolas hasta la primavera de 1986"."La alternativa que hemos hallado", a?ade el consejero, "tiene un car¨¢cter provisional y nos hemos comprometido a buscar una soluci¨®n definitiva para el a?o pr¨®ximo. Es falso que tratemos de robar el agua a la agricultura; lo que ocurre es que m¨¢s del 80% de los recursos acuiferos de la Comunidad Valenciana est¨¢n dedicados a la agricultura, y, l¨®gicamente, las medidas de ahorro han de afectar m¨¢s a este sector".
Llombart se muestra preocupado por la creciente salinizaci¨®n de los pozos de agua potable de las zonas costeras, y define el conflicto de Denia con los pueblos lim¨ªtrofes como "una consecuencia del crecimiento indiscriminado y ca¨®tico del litoral valenciano desde hace 30 o 40 a?os", al tiempo que acusa a algunos sectores sociales y pol¨ªticos de Oliva y Pego de "manipular pol¨ªticamente el problema y jugar a una f¨¢cil demagogia".
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